Brasil, petróleo. – RENOVAR LAS FUERZAS ARMADAS
«Evidentemente, en el momento en que se tiene una gran riqueza nacional en el área del Atlántico, tenemos que estar en condiciones de defenderla. Y para eso necesitamos tener un submarino de propulsión nuclear», dijo Jobim. Los analistas estiman que Brasil no tiene enemigos, pero –señalan– ningún país que tenga petróleo puede dormir completamente tranquilo, e Iraq es un ejemplo tras la intervención militar de Estados Unidos.
Los expertos también consideran que la Amazonia brasileña es otra región ambicionada por sectores del exterior, como lo muestran algunos llamados a la internacionalización de la zona. Además, el país carece de fronteras seguras que son constantemente violadas por narcotraficantes.
El ministro de Defensa de Brasil aseguró que un país sin fuerzas armadas eficaces «no está en condiciones de ser protagonista en la estabilidad mundial». Un reciente balance de las fuerzas armadas presentado ante la Comisión de Presupuesto del Congreso muestra el panorama desolador en que se encuentran las tres fuerzas.
– En el ejército, de los 1.437 blindados existentes, el 78 por ciento tiene más de 34 años y el 55 por ciento no está en condiciones de operar. De los 6.676 vehículos terrestres (de jeeps a camiones pesados), el 40 por ciento está seminutilizado.
– La marina ha tenido que desactivar 22 navíos, desde 1999, que no han sido sustituidos, y entre 2007 y 2010 tendrá que retirar de servicio otros 17, de un total de 85 todavía en uso. Hasta 2025, el 87 por ciento de la flota actual saldrá de circulación.
– La aeronáutica cuenta teóricamente con 719 aviones de todos los tipos, pero el 30 por ciento de ellos tiene más de 30 años y 60 por ciento está en uso hace más de 20 años. Sólo 267 aparatos están en operación real.
En conjunto, las Fuerzas Armadas brasileñas cuentan con 312.000 hombres, pero los soldados de tierra no tienen munición suficiente para entrenarse y los pilotos de la aviación no consiguen completar el número de horas de vuelo anuales, por falta de recursos.
Recientemente, el comandante de la Aeronáutica reveló que en este momento el poderío aéreo de Brasil es el cuarto en América del Sur, después de Venezuela, Chile y Perú.
Brasil gasta poco con sus fuerzas armadas. El presupuesto para 2008 prevé gastos de 5.340 millones de dólares (los militares piden 50 por ciento más), la mayor parte de los cuales se destina a sueldos y éstos son realmente bajos.
En términos comparativos, el país destina cerca del dos por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) al gasto militares, una proporción similar a la de la pobre Bolivia. Colombia, que vive una guerra civil, gasta poco más del tres por ciento, y Chile cerca del cuatro por ciento. Solamente Venezuela, bien provista de petrodólares, destina más del cinco por ciento de su PIB en gastos militares.
Desde el fin del ciclo de gobiernos militares en Suramérica, la región gasta poco en sus militares: en promedio, el 1.3 por ciento del PIB, la menor proporción entre las grandes regiones del mundo.
Los expertos consideran que Brasil necesita una modernización de sus fuerzas militares, al menos para que tengan carácter disuasivo, como las de Chile.
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Addenda
HASTA OCHO MIL MILLONES DE BARRILES
EN AGUAS PROFUNDAS EN EL SUR DE BRASIL
A mediados de 2003 Petrobras, anunció el hallazgo de tres nuevos yacimientos marinos –en el litoral del sur– con reservas estimadas en alrededor de 500 millones de barriles de crudo. Los descubrimientos confirmaron la existencia de una nueva zona petrolífera al norte de la Cuenca de Campos, en el estado de Espíritu Santo
Los pozos submarinos fueron ubicados al realizar exploraciones en la plataforma continental a profundidades de entre 1.473 y 1.535 metros.
En noviemnbre de 2007 la empresa estatal confirmó un nuevo descubrimiento: el yacimiento Tupí en la sureña cuenca de Santos, con reservas estimadas de 5.000 a 8.000 millones de barriles de petróleo liviano, que puede aumentar 50% las reservas nacionales. Petrobras pasa a ocupar un lugar entre las cinco primeras petroleras mundiales de capital abierto en cantidad de reservas, mayores que las de Shell y a Chevron.
Los estudios realizados, una vez confirmados, pueden convertir a Brasil «en un país de proporciones exportadoras, en el nivel de los países árabes y Venezuela», en palabras de la ministra jefe de Gabinete Civil, Dilma Rousseff.
Sin embargo, en opinión del el director del Centro Brasileño de Infraestructura, Adriano Pires, se debe ser prudentes: «Son buenas noticias –dijo–. Pero es una producción muy cara, en aguas profundas, que podrá comenzar en el mejor de los casos en 2012 ó 2013, y será factible solo si se mantienen altos precios del petróleo», dijo a AFP .
El bloque y el área descubiertos se encuentran a 250 km de la costa brasileña, a una profundidad de entre cinco y siete kilómetros, y bajo una extensa capa de sal. Con los elevados precios del petróleo y la reconocida experiencia brasileña en aguas profundas, los analistas estiman que la explotación será viable.
La noticia provocó moderado entusiasmo también en Uruguay y la Argentina: el campo petrolero podría extenderse hasta la cuenca del Río de la Plata.