Costa Rica. – LA REELECCIÓN DEL RECTOR TREJOS Y EL TLC

Eugenio Trejos, rector del Instituto Tecnológico de Costa Rica, presidente del Consejo Nacional de Rectores y presidente del Frente Nacional de Apoyo a la lucha contra el TLC acaba de ser reelecto como Rector del ITCR para un nuevo período de cuatro años.

El proceso electoral que culminó con esta reelección merece ser analizado con detalle, por su gran significado en la actual coyuntura de lucha nacional contra el TLC. La presente es una breve reflexión sobre una novedad en relación con las campañas anteriores y sobre algunas enseñanzas que deben ser profundizadas y aprovechadas en el contexto del próximo Referéndum.

La novedad es la interferencia externa, evidente y parcializada a favor del candidato opositor.

La Nación S.A. hizo lo posible por promover al otro candidato: publicó diversos artículos de sus seguidores –estudiantes y funcionarios– en los que se criticaba directa o indirectamente la posición militante del rector Trejos contra el TLC y se denunciaba una supuesta falta de consulta a la comunidad institucional en relación con este tema. La víspera de las votaciones La Nación publicó en página destacada un artículo del candidato contendor y destacó en una breve pero vistosa columna que el tector estaba «enfermo», sin mencionar que su oponente había dejado de asistir a los debates internos por una presunta afonía.

El propio día de las elecciones apareció una entrevista con el Rector Trejos, alrededor del tema del TLC, con la evidente intención de enfatizar su alianza con los sectores sociales que combaten este Tratado y así dar a entender a los votantes que la prioridad del Rector seguía siendo la lucha contra el TLC, en tanto para el otro candidato «lo primero es el TEC», según decía su principal consigna de campaña.

El gobierno de los hermanos Arias distinguió al otro candidato –que en todo caso es efectivamente un distinguido y respetable académico– con un puesto relevante en la CONICIT, que en el contexto de una campaña electoral solo puede entenderse como un intento de fortalecer su candidatura.

A estos hechos probados se suma un indicio significativo: la renuncia de dos precandidatos que obviamente no iban a alcanzar el caudal suficiente, a favor de un tercero que meses atrás había renunciado a una posible candidatura y al cual le hicieron creer que tenía posibilidades de ganar sobre la base de un presunto apoyo mayoritario de la comunidad institucional al TLC, o al menos un supuesto descontento con la posición militante del Consejo Institucional y del Rector Trejos en contra del nefasto tratado.

A pesar de esta interferencia externa, a pesar del mayor poder económico que se manifestó en la abundancia y calidad de los signos externos del candidato opositor y a pesar de que la «campaña informal» –es decir, la de los rumores– procuró crear temor en los votantes al propagar especies entre los estudiantes como aquella de que las empresas estaban cerrando las puertas a las prácticas de especialidad del ITCR, la comunidad institucional votó a favor de Eugenio Trejos y lo hizo contundentemente: 63% de votos a favor del Rector, quien resultó ganador en todos los sectores (docentes, estudiantes y .funcionarios de apoyo a la Academia) y en todas las sedes: (Central, San Carlos y Centro Académico de San José). Si a estos sumamos que hubo más de un 90% de participación del Padrón Electoral es clara la contundencia y el significado de esta victoria.

Factores que explican este triunfo

Uno: La gestión del rector Trejos mostró logros amplios, concretos y significativos en creación de carreras y de plazas, en incremento de proyectos de investigación, en construcción de infraestructura, en estabilidad laboral, en incrementos salariales mediante la mejor negociación salarial realizada en la historia del ITCR en el marco de la Convención Colectiva. Esto y más vino a desmentir la acusación de que el Rector no se dedicaba al TEC por estar demasiado involucrado en la lucha contra el TLC.

Dos: la Comunidad Institucional demostró ser una comunidad madura y pensante que silenciosamente tomó conciencia de que era necesario defender la autonomía universitaria frente a un candidato que ñaparte de su honestidad e integridad personal- hubiese quedado muy condicionado por los intereses y vaivenes políticos de los hermanos Arias y de los poderosos medios de difusión masiva.

Por otra parte, los evidentes logros del Rector y la superioridad de sus argumentos en el primero y ˙ltimo debate (en San Carlos y en Cartago, respectivamente) aunado a la ausencia del candidato oponente en otros tres debates a los que fue convocado, terminaron de convencer al electorado de cuál era la opción correcta. Queda por analizar por qué esa mayoría a favor del Rector, mayoría con la que probablemente se contaba ya desde el inicio pero que se fue consolidando durante la campaña, no quiso mostrarse p˙blicamente y ni siquiera el día de las votaciones se presentó con distintivos electorales, sino que manifestó su apoyo contundente ˙nicamente en el silencio y la privacidad de las urnas de votación.

Tres: la Comunidad Institucional, estudiantes, docentes y administrativos del TEC apoyan la participación activa del rector Trejos en el movimiento nacional contra el TLC. En ningún momento de la campaña quiso el rector dejar de hablar de este tema, ni siquiera bajo la suposición de que eso podría perjudicarlo en algunos sectores. Al contrario, Trejos siempre manifestó su convicción de que «lo primero es la Patria, y junto a la Patria va el TEC». La votación aplastante a favor de Trejos vino a desmentir totalmente las denuncias de los pocos docentes y estudiantes que La Nación S.A. destacó en sus páginas con la intención de hacer creer que el Rector Trejos había dividido y polarizado a la comunidad institucional.

El 8% de abstencionismo y el 63% de los votos a favor evidencia que el apoyo a Eugenio Trejos y a sus apuestas y propuestas contra el TLC tienen pleno respaldo de la comunidad institucional. ¡Cómo envidiará cualquier Presidente de la República una legitimidad de este calibre!

A partir de este proceso se derivan enseñanzas importantes, entre ellas las siguientes:

La Nación S.A y en general los económicamente poderosos medios de difusión masiva que están a favor del TLC, viven alejados del verdadero sentir nacional. Irrespetan la inteligencia y la sensibilidad del pueblo y sin ning˙n rubor felicitan al Colegio de Abogados y a la UNED por asumir actitudes presuntamente neutrales y objetivas ante el TLC, en tanto sus propias empresas no son, obviamente, ni neutrales ni objetivas.

El apoyo de estos medios y de los hermanos Arias a grupos minoritarios a los que ponen a defender sus intereses puede resultarles contraproducente, si se topan con una comunidad pensante y madura.

El poder económico, mediático y gubernamental no garantiza el triunfo de sus intereses. La mística, la transparencia, la argumentación clara, rigurosa y amable, el debate respetuoso y sin ataques personales, el abrazo sincero y la voz del corazón son más efectivos que todos los recursos y las triquiñuelas del poder.

Finalmente, no hay duda de que el triunfo del rector Eugenio Trejos es un buen augurio para la victoria del no al TLC en el referéndum de setiembre. Hay actores comunes: por un lado el gobierno de los Arias, los poderosos medios de difusión masiva y el poder económico y político nacional y trasnacional, es decir, los menos, a favor del TLC y por otro lado la mayoría: el movimiento social integrado por trabajadoras y trabajadores, cooperativistas, religiosos, académicos, sindicalistas, artistas, políticos y empresarios patrióticos, todas y todos sin poder económico pero con mucha mística, con mucha creatividad, con ojos, oídos y corazones luchando contra el TLC en los miles de comités patrióticos distritales y cantorales que ya están brotando en todos los rincones de la Patria.

El 17 de mayo derrotamos a los primeros en el TEC, con el Rector Trejos a la cabeza. El 23 de setiembre saldremos a derrotarlos en el Referéndum. También en esta ocasión lo primero será la Patria, y junto a la Patria irá el TEC.

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* Director del Centro Académico ITCR- San José.