Curso de Democracia Básica II: ¿qué es la democracia? ¿qué no es la democracia?

1.686

Camilo

Estudié hasta el 2008 en el ciclo básico de un colegio municipal, pero a diferencia de mi generación, mi desencanto con la política no lo manifestaré no inscribiéndome a votar, sino que precisamente ejerciendo mi derecho y deber soberano a patalear. La única manera de darle nuevos aires, sacar del coma, revivir o como le quieran decir a la política chilena es precisamente ejerciendo poder ciudadano. Las revoluciones armadas pasaron de moda.
Espero que mis palabras sirvan de algo.

2.1 Democracia –de nuevo

“Democracia: Doctrina política favorable a la intervención del pueblo en el gobierno. Predominio del pueblo en el gobierno político de un Estado.”

Si lo llevamos al plano literal, como a todos –incluidos los políticos– nos enseñan en la escuela, significa gobierno del pueblo. Veamos qué es pueblo:
“…Conjunto de personas de un lugar, región o país…”

¡Guau! Eso significa que todos nosotros deberíamos controlar el gobierno del estado. Definamos ambos:

“Estado: Conjunto de los órganos de gobierno de un país soberano.”

País: Nación…
“Nación: Conjunto de los habitantes de un país regido por el mismo gobierno. Territorio del mismo.
“Gobierno: Dirección de un país o colectividad política”.

Definido todo esto, podemos afirmar que la democracia es cuando la totalidad de la población controla un determinado territorio, y lo administra mediante un mecanismo burocrático que asegura su funcionamiento, así como leyes y lineamientos, para una mejor convivencia, llamados poderes del Estado y leyes respectivamente. Demos, entonces, hacer un análisis rápido de los poderes del estado y sus leyes.

Poder Ejecutivo: mandado por el gobierno oficial. Bajo él se agrupa el presidente y los ministerios, que a su vez cumplen tareas administrativas y prácticas. A él cabe la responsabilidad de financiarlas y de explotar/importar/exportar y distribuir de manera equitativa los recursos dentro de la nación.

Es supervisado por el parlamento y se debe manejar mediante órdenes directas del pueblo a través de referendos y otros espacios de participación ciudadana. Es su deber hacer pensar al pueblo incentivando el desarrollo humano. Cuenta con un pequeño brazo armado, bien letrado e instruido, para asegurar la paz social y la seguridad.

Poder Legislativo. Elabora y modifica las leyes. Debe seguir estrictamente las órdenes de la población y supervisar al Estado en la medida de que los ciudadanos se lo indiquen.

Poder Judicial. Se preocupa de aplicar las sanciones y medidas pertinentes para el normal desarrollo humano y la protección de los derechos civiles. También debe velar por la seguridad ciudadana y ayudar a carabineros. Su proceder debe ser siempre imparcial, sin tomar en cuenta más que lo que la ley dicte, y sus sentencias deberán ser aprobadas por un jurado de civiles comunes, representativos de todas las áreas de la sociedad.

Leyes. Normas dictadas por el pueblo, transmitidas y formalizadas por el parlamento Y hechas cumplir por los poderes ejecutivo y judicial. Son transversales a todos los habitantes y cargos dentro de un Estado y nación.

Medios de Prensa y Telecomunicación. Debe estar al mando del Poder Ejecutivo, y necesita ser el vivo reflejo de las opiniones, intereses y sucesos del pueblo. No es un poder en si, pero es parte fundamental del buen o mal desarrollo humano de un país. Se insiste en no caer en clichés de dictaduras informáticas. El control privado implica un colador aún mayor, pues hay intereses de por medio –recordemos que hasta el “intachable” Google, cayó en la censura con el episodio de la “proposición 8” en EEUU–.

2.2. Contradicciones del modelo actual

La primera y fundamental contradicción del modelo capitalista –y específicamente el neoliberal– es la presencia de privados. El gobierno de la totalidad de la población es absolutamente incompatible con la existencia de figuras privadas, pues su organización no depende de sus trabajadores, sino que de su cúpula, por lo que podríamos decir que se organiza de manera totalitaria, no sólo impidiendo la participación de sus propios empleados, sino que además imponiendo su voluntad por sobre la de la masa.

Aunque existiese la voluntad para hacer todos estos cambios en una empresa, seguiría estando en manos de una persona o un grupo determinado, siendo que produce para terceros también.

¿De qué modo podemos solucionar este problema? Estatizando. El Estado es un aparato que no sólo no tiene intereses de por medio, sino que además se autorregula y está controlado por la totalidad del pueblo, lo que no sólo haría más equitativa la distribución de la riqueza, sino que además incrementaría, abarataría y mejoraría la producción de bienes, puesto que no hay nada que economizar: los bienes del pueblo, son para el pueblo y por el pueblo.

La segunda contradicción que podemos apreciar en nuestra realidad, es que no se fomenta debidamente el desarrollo humano colectivo. La segregación educacional y cultural ha ido demasiado lejos. Y por si fuera poco, el canal estatal sigue transmitiendo mierda.

Para que un estado funcione debidamente, debe asegurarse de que sus habitantes estén bien informados y pensando, pues son éstos quienes corregirán las fallas y quienes, también, llegado el momento, trabajarán para el mismo aparato supervisor. Si no hay ciudadanos concientes, si no hay ciudadanos pensantes, concientes y activos, todo se derrumba.

La tercera contradicción es la existencia y permanencia del sistema binominal. La cosa es simple: no necesitamos cambiar las proporciones de la elección. Los votantes tienen la última palabra, no el sistema, sean cuales sean sus intenciones.

Vamos por la cuarta contradicción: la reforma procesal penal. “una nueva manera de hacer justicia”, fue eslogan que usó Lagos para meter esta estupidez, pero lo cierto es que sin la existencia de jurados, las decisiones son mucho más parciales, manipulables e imposibilitan al Poder Judicial para hacer su trabajo.

La presencia de ciertos personajes en las cortes de apelaciones y la Corte Suprema en pleno son también un cáncer, pero es extirpable si ejercemos nuestro soberano derecho a pataleo, insisto.

Y así suman y siguen los problemas –en mi angosto país, al menos–. Mejor me pongo a pensar en la siguiente entrega ¿cómo convencer al lector de que lo que digo es posible y no es, tampoco una sobre-democratización ni una sobre-burocratización?

El capítulo I puede leerse <a href="https://www.surysur.net/?q=node/9526">aquí<a/>.

También podría gustarte
1 comentario
  1. Muddly Cop dice

    Gracias, me dedicated servers gusta cuando puedo ir a por algo en un examen, y esto realmente domain registration me hubiera podido discutir. ¡Oh, cómo deseaba yo estaba en un club de libros. La mayoría son buenos, pero hay algunos, me gusta cuando escribe sus novelas de suspenso website design legal.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.