La cruz de un ángel
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No es mucho lo que la película convoca a decir: obra de 1928/29, del comienzo del realizador y del comienzo del cine en Venezuela; una historia de bandidos, de un hijo prodigio, de un padre intolerante… cuento pueblerino y campesino, en suma, que debe probablemente más al western de la época que a la idea de trascender cinematográficamente. Pero trascender es, con justeza, el vocablo que mejor define a Amábilis Cordero.
A fines del XIX en la distante París por el que suspira la burguesía (más o menos) ilustrada de América Latina, Georges Méliès había demostrado que el cine, el biógrafo, era algo más que una tecnología para mostrar cosas en movimientos; lo despegó de la realidad, lo puso al servicio de historias. Hacia fines de la década de los noventas (1891/1900) las primeras películas se importan a Venezuela y exhiben en Maracaibo, Valencia, Barquisimeto, Caracas.
En alguno de esos lugares, Barquisimeto casi seguro, un joven Amábilis Cordero fue contagiado por el virus-cine.
De profesión oficial fotógrafo, músico popular por afición, Cordero es, sin embargo, el gran cineasta de un tiempo a la vez congelado y heroico de su país. Ya en 1907 el "hombre-fuerte", Juan Vicente Gómez, 
pone él también el ojo en la actividad el gobierno manda a hacer uno de los primeros noticieros cinematográficos del continente. Años después, hacia 1916 se filma el primer largometraje venezolano.
Nacido en la pequeña ciudad de Duaca, estado Lara, en 1890 Amábilis Cordero. Más tarde, en Barquisimeto y ya hombre, conoce a Carmen Montesinos, su inspiradora, compañera y cónyuge. Para entonces es todo un fotógrafo, pronto será el "autor de proyectos imposibles", realizador de cine, tras estudiar por correspondencia, músico, pintor y poeta.
En la segunda mitad de la década de 1921/30 funda —en un acto de fe y de orgullo provinciano— los Estudios Cinematográficos Lara y luego se convierte en el alma máter de os Artistas Unidos de Barquisimeto; la primera obra es un medio metraje, Los milagros de la Divina Pastora.
No fue un suceso, salvo en la región. Pronto aprendió el director que los recursos nunca alcanzan en la avenutra 
cinematográfica. La cortedad de medios lo perseguiría hasta su ceguera y muerte a la edad de 80 años. No obstante su nombre quedó
Dirección: Amábilis Cordero
Intérpretes: Leonidas Montesinos, Carlos Torres, Ligia Velásquez, Carmen de Cordero
Producción: Estudios Lara
Año de Producción: 1929
Duración: 41,25 min
Cortesía del Festival de Cine Latino Americano de Trieste
www.cinelatinotrieste.org
Fuente: Festival de Cine Latino.
Disponible a partir de la mañana del martes 15 de junio.