Recuerdo de un ser humano y de su muerte. Dedicado a Jovino Novoa

Rebeldía*

Al funeral de Eduardo Jara asistió casi todo Villarrica, recuerda Gladys. Hoy el liceo de la ciudad galardona a los buenos alumnos con un premio que lleva su nombre como un ejemplo de vida, la cual se vio frustrada por agentes represivos. El Informe Rettig estableció que el estudiante de Periodismo Eduardo Jara Aravena murió el 2 de agosto de 1980 en la Posta Nº 4, desangrado debido a las torturas que recibió durante su detención en la que participaron agentes ex miembros de Investigaciones pertenecientes al Comando de Vengadores de Mártires (Covema). Entonces Jovino Novoa (der.) era subsecretario de Gobierno, hoy preside el Senado de la República de Chile.

Sus amigos recuerdan a este estudiante de periodismo como un joven trabajador y muy idealista. Murió desangrado luego de ser sometidos a horrorosas torturas por agentes de la dictadura. Jovino, ¿tú dónde estabas?

Su hermana Gladys del Carmen recuerda cómo la dictadura les arrebató a su hermano y así una parte de su corazón. Gracias a una beca Eduardo logró estudiar Periodismo en la Universidad Católica. Así mantuvo sus inquietudes humanistas que se reflejaban en sus labores sociales cotidianas, como entregar comida a los mendigos en la noche junto a sus amigos. El joven de Villarrica, viajó a la capital para concretar sus ilusiones de una sociedad mejor, pero todo se truncó cunado fue detenido el 23 de julio de 1980.

La familia Jara Aravena vivía en la Región de la Araucanía y se enteró de lo ocurrido días más tarde. "Me acuerdo que encendí la Radio Minería y dijeron "está confirmada la muerte del periodista Eduardo Jara Aravena y me empezó a correr agua helada por la espalda y sólo grité", cuenta Gladys. Recuerda que por los diarios vio cómo había quedado el cuerpo de su hermano.

Consultada si creía que Eduardo era un reconocido líder de izquierda que motivara tal odio por los agentes represivos para que lo trataran de esa forma, la mujer asegura que él nunca estuvo tan metido en esos temas. "Como todo universitario se metió en la política, en este caso en el MIR, pero después empezó a trabajar para poder educarse y se alejó un tanto de eso". La última vez que Eduardo viajó a Villarrica le contó a sus padres que estaba muy ilusionado con terminar la carrera, porque le habían ofrecido un trabajo en una radio de Puerto Montt lo que lo tenía muy feliz. "Lástima que nunca pudo realizar sus sueños", cuenta Gladys.

El médico lloró

La parte más dolorosa, según Gladys, fue enterarse en qué condiciones quedó el cuerpo de su hermano. "Tenía el cráneo hundido, las costillas rotas, heridas en las muñecas, alfileres en las piernas y se notaba que le habían puesto electricidad en el cuerpo, sobre todo en los testículos, fue horrible y muy doloroso enterarnos de todo esto" confiesa. A tanto llegó la crueldad para el estudiante de periodismo que Gladys recuerda que el médico que le hizo la autopsia lloró y le dijo al tío que se encargó de los trámites que "nunca había vista tanta crueldad contra un ser humano".

La prensa cubrió el hecho como nunca, asegura Gladys, y criticó el rol de las autoridades de la época que guardaron silencio. Por eso ve como una burla la ascensión del subsecretario de la dictadura, Jovino Novoa, a la cámara alta. "Se necesita que ellos reconozcan el gran daño que hicieron a personas valiosas para la sociedad" emplazó.

La periodista Cecilia Serrano fue compañera de Jara en la Universidad Católica el año 1980. Lo recuerda como un joven muy encantador, bueno de corazón, de esfuerzo y por sobre todo muy idealista. "Yo les prestaba los cuadernos", recordó la ahora concejal por Las Condes. "Cuando nos enteramos de su muerte, fue un cosa horrorosa, fue mi primer contacto fuerte con una persona víctima de la represión que hubo (…) Lo que le pasó a Eduardo me introdujo en el mundo real de esa época, fue muy terrible", señala la profesional.

Agregó que "en el velorio hubo mucha impotencia y pena". Serrano cree que si Jara estuviera vivo seguiría siendo el mismo. "Ahora sería un periodista que ganaría dos pesos y medio, seguiría siendo un buen ser humano y me lo imagino súper buen papi, porque él ya en la universidad tenía un hijo" indicó.

Ese hijo hoy es ingeniero y vive entre Puerto Varas y Puerto Montt. Según Gladys, su sobrino –del mismo nombre– vive con el orgullo de quien fue su padre. Esto porque, aparte de su historia, el Liceo Araucanía de Villarrica entrega un galardón a la entereza, perseverancia y a bondad que lleva el nombre de Eduardo Jara Aravena un hombre bueno.

* Publicado por Juan Gilman para Rebeldía (http://larebeldiadelosinmigrantes.blogspot.com).
http://www.wearechange.org
http://www.chile-mir.org
http://www.patrialibre.org
 

 
Addenda

La verdad mirista: el pinochetismo busca asesinarla una ves mas.
 
Un miembro del Mir no se conforma con un chupete ni con calugas judiales, somos incorregibles mientras la verdad no sea y no se diga completa.

Son alrededor de mil miembros del Mir y revolucionarios sobre los cuales los pinochetistas enquistados hasta en La Moneda, los pinochetistas de las FFAA, del Senado y del Congreso, los de los Tribunales de Justicia, los pinochetistas del Poder Económico, agrario e industrial, la UDI-RN y algunos jerarcas de la Iglesia junto a los traidores de la Concertación, que no quieren los casos de miristas asesinados y desaparecidos por la Operación Cóndor sean investigados.

La nueva y vieja clase política, busca a rajatabla la impunidad y enterrar para siempre la verdad sobre los casos de desaparecidos, lanzados al mar, fusilados, muertos en tortura, enterrados y desenterrados de cementerios clandestinos… De esta manera se busca por los sobrevivientes del pinochetismo asesinar la verdad.
 
Sólo la verdad completa es verdadera y ella se logra solo con la lucha y construyendo un poder alternativo al de las clases dominantes, el poder popular.

Paradojalmente hoy tenemos que luchar por la libertad de decenas de hombres y mujeres mapuche encarcelados y perseguidos por sus territorios, luchar por los jovenes revolucionarios encarcelados por la Concertación, luchar por la libertad de grandes mujeres tras las rejas de la seudo democracia chilena. Apoyar a los movimientos laborales y a los estudiantes que ya estan de pie otra vez, apoyar a los sin trabajo y afectados por la crisis que nos azota.

Los dueños del poder y la riqueza tienen que saber que ningun crimen del pinochetismo y los de la Concertación quedará impune, todos seran investigados por el pueblo y los tribunales populares tarde o temprano harán la justicia verdadera.

Basta de impunidad, basta de calugas judiciales.
Justicia total o Justicia Popular.
 
Libertad al Pueblo Mapuche y sus líderes herman@s del pueblo chileno.
Libertad para Elena Varela y para tod@s l@s jóvenes revolucionarios en las mazmorras de Chilre, Argentina, Brasil y Peru.
Libertad a Peltier y Mumia.
El 29 de marzo Adelante con todas las fuerzas de La historia.
 
Victor Toro Ramirez.
Indocumentado luchando contra la deportacion y por una amnistia en EEUU.