Venezuela: Caiga quien caiga, (¿primer?) golpe a la corrupción
Marcos Salgado*
El Ministerio Público de Venezuela informó que fue detenido, junto a otras ocho personas, Arné Chacón Escamillo, presidente del banco Real, por presunta vinculación con las maniobras financieras en bancos privados, que amenazaban con un crack financiero de proporciones catastróficas. Arné es hermano de Jesse Chacón, ministro de Ciencia y Tecnología e importante colaborador del presidente Chávez, quien presentó hoy su dimisión.
El mandatario venezolano lo había anunciado: libraría una lucha frontal contra la corrupción pública y privada “caiga quien caiga”. Pero hasta ahora la impunidad parecía imponerse. Arné Chacón fue detenido este sábado 5 en horas de la tarde luego de presentarse en la sede de los Servicios de Inteligencia y Prevención (Disip), tras una orden de aprehensión dictada por un Tribunal de Caracas.
En las próximas horas también será presentada Milagros Vivas ante el tribunal de control respectivo. Vivas es directora suplente del Banco Real y será imputada por su presunta vinculación el caso.
El pasado viernes, la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, informó que fueron dictadas 10 órdenes de aprehensión y 19 solicitudes de prohibición de salida del país contra algunos directivos de las instituciones financieras Canarias, Banpro, Confederado y Bolívar Banco, intervenidos por el Ejecutivo Nacional el pasado 20 de noviembre, según anunciara el kministro de Economía y Finanzas, Alí Rodríguez.
El Tribunal 36° de Control de Caracas también acordó la ocupación de todas las empresas y compañías de las personas investigadas por su presunta vinculación con las instituciones financieras Bolívar, Banpro, Confederado y Canarias.
Frenando el relajo
El viernes el Ejecutivo Nacional intervino las entidades financieras Banco Real, Baninvest y Central Banco Universal, antes había tomado una decisión similar con el Banco Confederado y el Bolivar Banco. A todas estas entidades se las intentará rehabilitar para que vuelvan a funcionar.
En el caso del Banpro y el Canarias, fueron liquidadas y está vigente un cronograma de devolución de depósitos garantizados, que concluirá antes de las navidades. El mecanismo de devolución se realiza a través del Banco de Venezuela, recientemente nacionalizado, así como con otras entidades privadas.
Este domingo, el presidente Chávez anunció el nacimaiento del Banco Bicentenario, nueva institución financiera pública que creará el Estado venezolano, surgido de la unión de los bancos que actualmente rehabilita el Gobierno.
“Banco Confederado, Central Banco Universal y Banco Real, más Banfoandes como base estructural: esos cuatro componentes van a conformar un nuevo banco que se va a llamar Banco Bicentenario, en honor al bicentenario de la Independencia”.
En enero de 1994 la Junta de la Superintendencia de Bancos de Venezuela decidió intervenir el Banco Latino. Fue una medida tardía e interesada, que no detuvo la debacle: entre el 13 de enero y 15 de diciembre cayeron una docena de instituciones. Se evaporaron el 37% de los depósitos totales del sistema. Miles perdieron para siempre todos sus ahorros. Aún hoy, cada familia tiene un miembro, un conocido, un amigo, afectado por aquella debacle financiera.
Al recuerdo fresco de aquella debacle en tiempos de la cuarta república, los medios de comunicación opositores sumaron hoy en 2009 fronteras afuera y dentro de Venezuela la matriz de que las intervenciones del Estado buscaban en realidad acabar con los privados. “Chávez cierra bancos”, podía leerse, por ejemplo, en el matutino Clarín en Buenos Aires.
Lo cierto es que la instalación rápida del mecanismo de reintegro de depósitos garantizados y un esfuerzo encabezado -una vez más- por el propio presidente Chávez para explicar la situación desactivaron con éxito la renovada campaña del miedo.
El Banco Real y los nuevos empresarios
El avance de la investigación fiscal que el presidente Chávez debió reclamar públicamente la semana pasada, alcanza ahora al Banco Real, cuyo presidente es Arné Chacón. En la directiva figura también Alejandro Uzcátegui, presidente de Empresarios por Venezuela (Empreven), una agrupación que defiende las políticas económicas del gobierno bolivariano.
El Banco Real, intervenido ahora a puertas cerradas, había recibido depósitos de entidades de la banca pública, según consta en informes oficiales. Las políticas de colocación de dinero por parte de los bancos públicos ya había sido cuestionada por el presidente Chávez en su espacio de comunicación directa con la población, el “Aló Presidente”.
“Estaba revisando los bancos y me llamó la atención que Banfoandes tiene depositada una cantidad gigantesca de recursos en bancos privados”, remarcó Chávez. “No quiero sacar conclusiones tempranas, pero ayer precisamente yo estaba revisando algo y di una orden”, dijo el presidente.
“A veces uno nombra a alguien al frente de un banco del Estado y resulta que entonces esa persona termina haciendo con los recursos, que no son de él, en un banco del pueblo, lo que le parece a la directiva que él nombra”, dijo.
Expresó el líder bolivariano que el caso de los depósitos del Banfoandes le llama la atención y que “es uno de los bancos del Estado que más recursos tiene en la banca privada”. El presidente remarcó que en lugar de entregar créditos al pueblo, los recursos van a parar a una entidad financiera privada, para generar intereses.
“Eso es contrarrevolucionario, es una irregularidad administrativa y eso hay que combatirlo con todas las armas posibles”, acotó. Dijo que esas acciones son traición a la Revolución y al pueblo, por lo que llamó a denunciar situaciones de ese tipo y combatirlas.
La batalla contra la corrupción
La posición firme del presidente Chávez y una investigación que alcanza, también, a nuevos empresarios parece ser una noticia auspiciosa. Es la materialización del reclamo que el mismo presidente venezolano formuló varias veces, de que la batalla contra la corrupción debía realizarse “caiga quien caiga”.
La medida de investigar la acción de banqueros como el hermano de un ministro de confianza del presidente resulta un soplo de aire fresco, que sin duda generará confianza en las filas propias del bolivarianismo y contribuirá, quizás, también a acotar la desconfianza de los que quedan por convencer.
*Periodista