Venezuela, el salvamento del cardenal, UNASUR y dos ministros colombianos
Néstor Francia.*
Ante la evidente ventaja política que sacó la Asamblea Nacional tras la reunión con un Urosa Savino a la defensiva, la oposición movió rápidamente a una de sus fichas tratando de minimizar el daño (probablemente con la condescendencia del cardenal). El diputado por Podemos, Juan José Molina, aseguró que Urosa no reveló nada de lo ocurrido “porque es un caballero y ostenta dignamente la figura del cardenal”, pero que se le acusó adentro de traidor y mentiroso por presuntamente avalar lo ocurrido en abril de 2002 y criticar al Gobierno.
Como sabemos, el propio Urosa declaró que el trato de la AN fue cordial y respetuoso, y que la reunión había sido serena ¿Enmendará ahora la plana al escuálido de Podemos u otorgará callando? Con gente como está uno nunca sabe a qué atenerse.
Entretanto, factores opositores tratan de rescatar la matriz de la comida descompuesta, ante los errores que han cometido en el caso del conflicto con Colombia y la pálida comparecencia del cardenal ante la AN. Un pequeño grupo de activistas de Voluntad Popular, el movimiento derechista de Leopoldo López, se apostó ante la Fiscalía General de la República tratando de poner de nuevo sobre el tapete este asunto, mientras El Nacional dedicó su principal titular al tema. Usando un lenguaje ofensivo contra el ministro Rafael Ramírez, el minúsculo grupo contó, por supuesto, con la proyección de la canalla mediática.
Las elecciones parlamentarias los tienen agitados ante la presunción de una derrota.
En vísperas de la reunión de Unasur, la derecha paraguaya se suma a la campaña gringo-colombiana en torno a las “pruebas” de presencia guerrillera en nuestro país. Ahora el diario derechista ABC de Asunción ha mostrado unas fotos donde aparecen el presidente Fernando y nuestro canciller Nicolás Maduro al lado de supuestos personajes vinculados al incipiente EPP, movimiento guerrillero paraguayo, por lo cual habría vinculaciones en ese sentido.
El gobierno de Lugo ha dado rápida respuesta a la calumnia: “Rechazamos tajantemente. Este gobierno ni su presidente tienen vinculación alguna. Advertimos sobre el peligro que significa hacer acusaciones poniendo en tela de juicio la honestidad y la inocencia de las personas”, dijo el ministro del Interior Rafael Filizzola.
Por su parte, el gobierno de Colombia trata de salir del atolladero de descreimiento general ante la patraña que quiso montar en la OEA, y de paso intenta rescatar algo de iniciativa, después de que Venezuela anunciara un plan de paz que presentará hoy en la reunión de Unasur en Quito. Álvaro Uribe informó ayer que el canciller Jaime Bermúdez presentará en la reunión de Quito “un plan de paz” basado en la desmovilización o rendición de los guerrilleros que presuntamente están establecidos en Venezuela. La discusión de hoy en Ecuador promete estar interesante, estaremos pendientes.
Juan Manuel Santos ha anunciado ayer los nombres de los titulares de los importantes ministerios de Interior y Justicia, y de Defensa. En la cartera del Interior estará el ex candidato presidencial Germán Vargas, furibundo antichavista. Mientras, el designado en Defensa, Rodrigo Rivera, anunció que continuará impulsando la “política de seguridad democrática” emprendida por el saliente presidente Álvaro Uribe, orientada a combatir frontalmente a las guerrillas izquierdistas de las FARC y el ELN:
“Asumo este reto a partir del próximo siete de agosto con la idea de darle continuidad y consolidar las políticas de seguridad democrática que tan brillantemente han sido aplicadas en los últimos ocho años por el gobierno del presidente Álvaro Uribe”. El futuro ministro destacó, por cierto, el papel que en la aplicación de esa política tuvo Santos, quien durante dos años fue titular de Defensa, cargo que dejó en mayo de 2009 para lanzar su candidatura presidencial.
La cosa no pinta nada bien para la posibilidad de paz en Colombia.
* Analista de asuntos políticos.