GOLPE DE ESTADO EN TURQUÍA
Centenares de muertos, miles de heridos y prisioneros, son los efectos más inmediatos y directos del fallido golpe de estado en Turquía. Sus causas, son contradictorias y difíciles de precisar, en parte porque las duras y oscuras políticas del actual Presidente han acumulado enemigos en diferentes capillas internas e internacionales. El actual gobierno es aliado de occidente y es una de las bases más fuertes del ISIS (Ejército Islámico) que está prohijado por países occidentales que dicen combatirlo.
El actual Presidente, RecdepTayyip Erdogan logró dominar la situación y personalmente parece salir más fortalecido. Al día siguiente de reasumir el gobierno destituyó a 2745 jueces y ordenó el arresto de 9 miembros del Supremo Tribunal de Justicia. Es posible que ahora intente un cambio constitucional, que no pudo lograr por la vía de las urnas, para pasar del actual régimen parlamentario a otro presidencialista.
De todas maneras no son pocos los observadores que estiman que lo que está ocurriendo dejará huellas muy profundas en las fuerzas armadas de Turquía, numéricamente la segunda fuerza militar de la NATO. El apoyo al ISIS y la larga confrontación con el pueblo kurdo que brega por su independencia las ha ido desgastando. De allí que el futuro sea incierto y que el actual fortalecimiento de Erdogan habrá que ver si se consolida con el paso del tiempo.