Interrogantes. – CHAVEZ CONSOLIDA EL GOBIERNO Y AVANZA EL PROGRAMA

933

Aparecida en la revista Piel de Leopardo, integrada a este portal.

I – DOCTRINA DE CHÁVEZ
SOMETE A TODOS LOS PODERES PÚBLICOS

La información del diario argentino InfoBae, del primero de febrero de 2007, refleja una óptica. Es crítica. Se reproduce textualmente:

El venezolano recibió autorización para legislar por decreto. El paquete de leyes que prepara pretende devastar las libertades individuales. «Los nuevos dictadores están reinventando el fascismo», dijo el analista internacional Carlos Montaner.

www.infobae.com.

fotoEn una sesión realizada ayer en la Plaza Bolívar, frente a la sede de la legislatura, la Asamblea Nacional, un parlamento unicameral integrado totalmente por oficialistas, aprobó por unanimidad la denominada Ley Habilitante.

La nueva norma faculta a Chávez a legislar por decreto en 11 áreas claves, desde la reestructuración del Estado hasta la estatización de empresas de servicios públicos.

El analista internacional José Vicente Carrasquero explicó los problemas a los que se enfrentará ahora el pueblo venezolano tras la decisión de Asamblea. «Los cambios le permitirán legislar en cualquier ámbito, será un socialismo autoritario», sostuvo.

«Habrá un recorte democrático y limitará la capacidad de discutir de los ciudadanos, de hacia dónde se quiere llevar al país. Cortará las libertades individuales, entre otras cosas «, explicó el analista en declaraciones a Radio10.

«De esta forma, el Poder Ejecutivo tiene sometido al resto de los poderes públicos. Chávez gobernará sin limite alguno durante los próximos meses», agregó Vicente Carrasquero.

En sintonía, el analista internacional, Carlos Montaner, habló por Radio10 de los personajes que pretenden introducirse como los líderes en este comienzo de siglo. Encabezados por el bolivariano Hugo Chávez, «los nuevos dictadores están reinventando el fascismo», sostuvo.

Las áreas en las que Chávez podrá legislar por decreto son: reestructuración del Estado; participación popular; ejercicio de la función pública; económica, financiera y tributaria; seguridad ciudadana y jurídica; ciencia y tecnología, y ordenamiento territorial.

También podrá hacerlo en materias de seguridad y defensa; infraestructura; transporte, y servicios y energía.

Una segunda información dice:

Temen que se expanda el chavismo por América

El intelectual Carlos Alberto Montaner* dijo en Radio 10 que las medidas polémicas tomadas por el presidente de Venezuela van a «afectar a todo el continente». Calificó a Chávez como «el vecino navajero y alcohólico».

El escritor y periodista advirtió que «Cuba y Venezuela» van a «reemplazar a Moscú» en el impulso del socialismo en el siglo XXI, y destacó que Hugo Chávez tiene la aspiración de ser el «nuevo Fidel Castro» ya que el dictador cubano «está agonizando».

Asimismo, reconoció que el polémica presidente venezolano «va a radicalizar el modelo político y económico», por lo que «va a arruinar a ese país».

Por otra parte, cuestionó la «ofensa tremenda» que Chávez realizó sobre el titular de la OEA, José Miguel Insulza, al llamarlo «pendejo», un calificativo es «como decir estúpido, pero de manera muy despectiva».

«Chávez es como un vecino navajero y alcohólico. Me he enterado que tiene cierto nivel de popularidad en la Argentina. Es una cosa tremenda y asombrosa», reflexionó el escritor y periodista.

«Venezuela creó 20 bases militares en Bolivia. Eso tiene otra posibilidad de creación de conflicto», consignó Montaner, tras lo cual reconoció que «Chávez es una pésima noticia para América Latina y nadie se va a poder salvar de las consecuencias de este hombre».

* Carlos Alberto Montaner (La Habana, 1943), escritor y periodista. Reside en Madrid.

fotoII – EL POLÍTICO INVENCIBLE

Desde una óptica objetiva –aunque de indudable simpatía por el proceso venezolano– el autor intenta explicarse y explicar al lector algunos aspectos de la personalidad política y humana del presidente:

Desde que Chávez se lanzó por primera vez al ruedo electoral, muchos se han preguntado qué tiene este líder político, que parece invencible, si nos ajustamos a los resultados de los procesos electorales en los últimos ocho años en Venezuela.

Edison Barría*

Ciertamente Chávez parece haber encontrado la fórmula para mantenerse en el poder, por la vía democrática, derrotando de manera contundente a todos los que han osado enfrentársele en la arena política.

Por otra parte, sus niveles de popularidad son tan elevados (75%, según ultima encuesta Latinobarómetro ) que no existe precedente en la historia democrática de Venezuela de algún mandatario que, luego de tanto tiempo gobernando, continuara siendo la primera opción en todas las encuestas, a la hora de formular la pregunta «¿quién quiere usted que sea el próximo presidente de nuestro país?». En la reciente elección presidencial del 3 diciembre del 2006, logró el 65% de los votos.

Ahora bien, ¿será que esto lo ha logrado Chávez por arte de magia?, ¿cuáles son los elementos que conforman la fórmula de su triunfo constante?, ¿qué factores han permitido que ninguno de los que lo han enfrentado pueda siquiera representar un peligro regular?, ¿cómo es que su popularidad ha logrado superar golpes de Estado, paros petroleros, y cualquiera otro de los intentos antidemocráticos que han procurado sacarlo de Miraflores?

Para dar respuesta a estas preguntas, debemos revisar algunas de las características particulares de Chávez, que en su condición de candidato lo diferencian de los demás.

Sintonía con el pueblo

La primera de ellas es la impresionante sintonía que tiene con el pueblo venezolano. Cuando hablamos de sintonía, no nos referimos simplemente a que hable y se exprese como habla la mayoría de la gente común, sino a que conoce la idiosincrasia del venezolano desde las entrañas.

Pocos políticos venezolanos tienen el conocimiento genuino que tiene Chávez de la historia de Venezuela, de su folklore, de sus costumbres, de su geografía. Se sabe de memoria poemas enteros de los autores más representativos de las letras venezolanas. Canta con ganas las canciones de nuestros compositores. No hay pueblito grande o pequeño que no haya visitado, al menos una vez, y no ahora que es Presidente, sino desde su época de soldado. Se ha aprendido a Venezuela desde niño, desde sus colores, sus sabores y sus olores.

Mientras otros se conocían de memoria Miami, la calle 8, Fort Loderdale o Boca Ratón, Chávez se metía en las entrañas de Venezuela y eso le permite, hoy en día, hablarle a la gente desde su propia realidad, desde el conocimiento tangible de lo que es el país. Y cuando Chávez habla, la gente siente, en el fondo de su corazón, que sabe lo que está diciendo, porque lo ha vivido.

Tener un proyecto

A pesar de que parecería lógico que cualquiera que pretenda aspirar a un cargo tan importante como la presidencia de la república debería, por lo menos, tener un proyecto, insólitamente hemos escuchado a algunos de los que se inscribieron para estas próximas elecciones presidenciales declarar, sin ningún sonrojo, que esto no es necesario.

También hemos escuchado a otros, menos osados pero igual de ignorantes, confundir proyecto con acciones. Entonces los vemos ofreciendo que van a repartir dinero a diestra y siniestra a cada familia venezolana, manipulando desvergonzadamente el discurso de la justicia social, para convertirlo en una vulgar repartición de torta. Estúpidamente no se dan cuenta que el pueblo ya los ha visto durante años, quedándose con la mejor parte de esa repartición, como aquellos que parten y reparten.

Ahora bien, un proyecto de país es una cosa muy distinta a una carta al Niño Jesús, y tampoco tiene que ver con ofrecer que se va a repartir esto o aquello. Un proyecto de país tiene que estar fundamentado en principios, en filosofía, en ideología, en visión a largo plazo.

Cualquiera podrá decir que no le gusta la forma de gobernar de Chávez, pero jamás se podrá argumentar que no tiene un proyecto. Además, él ha venido hablando de dicho proyecto desde el primer día en que anunció que sería candidato a la presidencia, allá por 1997.

Desde entonces, está hablando de la convocatoria a una Asamblea Constituyente, con la finalidad de darle poder al soberano, es decir, al pueblo, para que se pudieran cambiar las leyes, en función de adelantar un proceso revolucionario con fundamentos bolivarianos. En otras palabras, Chávez plantea las bases de sus propuestas desde la visión filosófica de lo que es su concepción del país y del rol del gobierno y del Estado dentro de un sistema democrático.

Vivir lo que se predica

Cuando Chávez habla de lo que es su visión de país, lo hace desde las entrañas. Él no se para delante de la gente a echarle un cuento que le contaron o que los publicistas le recomendaron para ver si subía un puntito en las encuestas, sino que habla desde su propio ser, de lo que cree con la sangre y por lo que está dando la vida. Habrá quien piense que está loco, equivocado o lo que sea, pero nadie dudará de que él cree cada una de las palabras que le dice a la gente, que considera, desde el fondo de su alma, que es lo que se debe hacer.

Vivir lo que se predica trae dos consecuencias indispensables para la credibilidad de un político: la coherencia y la pasión. Si un candidato se para delante de la gente a hablarle de algo que él mismo no cree, se le nota rapidito. La gente lo siente, lo percibe, lo huele. Y por eso no les cree. En cambio, cuando Chávez habla, habrá quien lo juzgue, pero no quien dude de que habla desde el corazón.

Sin embargo, hay otros que asumen el compromiso de la presidencia desde la humildad. Desde la convicción de que es necesario servir a los demás. Desde el convencimiento de que el poder no es un fin en sí mismo, sino un instrumento para hacer el bien.

La sintonía con el pueblo, el tener un proyecto de país, el vivir lo que se predica y las ganas de servir son tan sólo cuatro de las características que hacen que Chávez sea un candidato diferente y que lo han convertido, también, en un presidente diferente.

La gente humilde ha sentido la diferencia. Los privilegiados también. Por eso los primeros lo aman y los últimos financian acciones golpistas, que por más que quieran, nunca podrán. Este es el invencible, el Hugo Chávez que gana todas las elecciones y líder del nuevo Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que nace de la unidad de todos los partidos y movimientos que lo vienen apoyando desde el año 1998. Este es el Chávez que al igual que su inspirador Simón Bolívar dice «maldito y muerte al soldado que dispara contra su pueblo».

————————————

* Integra el Secretariado Internacional y la Comisión de DD.HH. del Partido por la Democracia de Chile.

foto
III – DOBLE FILO

O

Convengamos que la (¿auto?)denominada «gran prensa» a través de revistas, diarios, radios y televisoras suelen entusiasmarse más con el análisis anti que pro Chávez; la información que procede de Venezuela tampoco es todo lo amplia –en el sentido de cobertura, no de posiciones– que debería ser. De hecho ignoramos muchísimo más de lo que sabemos sobre la realidad el gobierno bolivariano, sus éxitos, demoras y fracasos.

La opinión de un militante.

JotaDobleVe*

Si quieres elevarte a la categoría de hombre digno, procura ser, además de honrado y virtuoso, humilde y respetuoso
(Simón Bolívar)

Es interesante escuchar los comentarios de algunos camaradas después de cada Alo Presidente o cualquiera alocución del comandante Chávez. Yo entiendo que los gaznápiros de la oposición traten de tergiversar los conceptos expresados.

Así vemos al chulo de Bárcenas quien después del presidente decir que no se renovaría la concesión, decía con todo desparpajo que el presidente «no especificó a que emisora (¿?) se refería», que él estaba tranquilo, porque su permisería estaba «vigente hasta el siglo XXV». Eso es de esperarse, así como también sería lógico escuchar de boca de La Piro Piro que él perdió tan solo por una vainita.

Pero por Dios, como es eso que los camaradas comiencen a interpretar lo que dice el comandante, a los cinco minutos de dicho, buscándole un piquete que los favorezca. ¿Ejemplo?… Bueno, como ejemplo clásico el de los sueldos:

El comandante dijo que habían unos suelos groseros en la administración pública, que él consideraba que un margen tope de salarios, debería ser de unos «doce salarios mínimos»; o sea seis y algo de millones de bolívares al mes –y que consideraba que un funcionario con todos los gastos pagados debería estar en los tres millones y que él mismo se fijaría ese sueldo.

Bueno, eso fue lo que yo escuché; no sé que escucharon ustedes.

Pero no pasado dos días, unos ilustres funcionarios, quienes cobran la bicoca de 30 millones de bolívares mensuales, pero que además de eso, se adjudican a si mismos doce meses de sueldo como aguinaldo a fin de año, que da como resultado una media de entrada de 60 millones de bolívares por mes; salen diciendo que se rebajarán el sueldo.

Estos señores salen, como parto de monte, diciendo que harán el «sacrificio» de reducirse el sueldo a la mitad. Estos ilustres funcionarios, quienes además de carro asignado, chóferes, guardaespaldas y pago de dietas especiales, cobran también otra boloña de billetes, se rebajaran el sueldo a la miserable suma de 15 millones ¿mas los otros 15 de aguinaldo? Esta reducción de sueldos planteada, además de grosera, es inmoral.

Estos señores, si tienen un mínimo de moral revolucionaria, deberían poner sus cargos a disposición de la Asamblea (o a quien le corresponda) y dejar que esa autoridad los ratifique –o no– y les fije las tasas salariales; luego estos señores estarían en toda la libertad de aceptar o no el cargo.

Este domingo, en Aló Presidente, Chávez dictó una clase magistral de socialismo, con ejemplos didácticos, interactuando con muchos de los que participaron en el programa. Trató de explicar lo que es la producción social, la propiedad de la tierra, poder popular, poder comunal, el trabajo cooperativista o comunal etc. Vimos mucha gente del pueblo perdida; es normal, son gente que oye estos conceptos, muchas veces, por primera vez, pero también vimos muchos altos funcionarios totalmente perdidos en los conceptos que el presidente vertía en su charla. Tanto así, que el presidente tuvo que intervenir varias veces para indicarles que «estaban más perdidos que el hijo de Lindbergh». ¡Sin comentarios!

Y así lo de las camaroneras, y muchas otras obras que han sido un barril sin fondo del erario público y su intención de hacerle pagar a los responsables sus culpas. Me ha extrañado el silencio de estos días de los camaradas que se expresan públicamente en los medios; se puede decir que han guardado un silencio cómplice ante esa denuncia que viene, nada más y nada menos, que de boca de nuestro líder; los más tratan de desviar las culpas a la gobernación del Zulia, que no es que no merezca una investigación, sino que no es la única.

Otros han hablado de asuntos climáticos «casualísticos» etc. Y no es que pueda ser, sino que hacemos un papel ridículo tratando de minimizar la gravedad de las denuncias de nuestro máximo líder.

Camaradas, la sanidad de la revolución está en la ética revolucionaria que podamos mostrar, en la sinceridad de nuestras afirmaciones, y sobre todo de saber interpretar los fines y metas de la Revolución Bolivariana y de su líder por voluntad de los dos tercios de los venezolanos.

* J. Wekker.
Sus textos suelen publicarse en distintos medios digitales e impresos en Venezuela. También es posible acceder a ellos directamente en su bitácora Simón Bolívar.

También podría gustarte
Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.