U.S. Army: – EL HORROR Y EL ESPANTO DESBORDADOS
La Agencia de Noticias de las Fuerzas Armas estadounidenses –no es un misterio– opera como un boletín interno que procura mantener en alto el espíritu de combate de la tropa e informar a la prensa y opinión pública de la excelencia de la maquinaria militar para retroalimentar la moral de la soldadesca. La tarea no le resulta fácil.
Junto con la escasa efectividad de las acciones de famosas «unidades de elite», como «Rangers», «Seals», etc… y el empantanamiento de los legendarios «marines» (uno de cuyos bautizos de fuego ocurrió en Argelia África, en el siglo XIX), ese cuco que solía asustar a los pueblos y que los vietnamitas pusieron en su lugar iniciando su decadencia, cunde la desmoralización de esos «G.I’s.» que tan simpáticos se ven en las películas con las que Hollywood rinde culto a la voluntad imperialista de sus gobiernos.
Dijo el general Casey que se ha «ha perdido el equilibrio» y que agotan su «capacidad operativa tan pronto como la producimos». ¿Qué «agota» esa capacidad? La respuesta abre paso al patético desmoronamiento del «destino manifiesto» del país de América del Norte y su poderío basado en el complejo militar-industrial y la nada heroica saga de la «conquista» del Oeste.
«Seis años de guerra han tenido un (elevado) costo para los soldados del ejército, sus familias, sus equipos» abundó Casey. Contingentes de algo menos de 200.000 varones y mujeres –de un total de poco más de 520.000 uniformados/as que componen el ejército de tierra– han sido destacados en Afganistán e Iraq.
El triste papel de asesinos de familias, violadores, contrabandistas y malos soldados comienza a hacer trizas el último mito militar estadounidense: que su entrada en 1942 en la II Guerra Mundial fue determinante en la derrota de Alemania en Europa.
El flamante jefe del Estado Mayor del ejército de EEUU aseguró que para enfrentar el «terrorismo global y la ideología extremista que siguen siendo una amenaza a los ideales de EEUU (el ejército) debe ser una fuerza versátil, ágil y capaz de confrontar una era de conflicto persistente».
Lo dicho en medio de una discusión incesante una de cuyas expresiones es la duda que existe acerca del real rol de los aparatos de gobierno en el drama desatado durante la fatídica mañana del «11/9». Casey dijo que el Ejército debe «mantener su contingente mediante el reclutamiento (de nuevos voluntarios) y la retención (de soldados al término de sus contratos)».
El general no se refirió a la acción del ejército paralelo y mercenario desplegado por la empresa Blackwater en los territorios que ocupan (la información puede leerse en Piel de Leopardo
Casey tampoco se refirió al intercambio vía internet de imágenes escalofriantes de víctimas de la invasión, fotografías tomadas por ellos mismos, por acceso a sitios porno con los que disfrutan sus períodos de descanso.
Este atroz mercado de las tropas regulares estadounidenses en Afganistán e Iraq fue denunciado por el diario italiano La Repubblica en 2005, que identifica uno de esos portales (www.nowthatsfuckedup.com) en el que soldados norteamericanos en Afganistán y en Iraq son invitados –y aceptan la invitación– a subir esos materiales a cambio del acceso libre a diversas secciones «prohibidas» de «sexo duro».
Un aviso aparece –o aparecía– en la portada del sitio: «Si usted es soldado americano en Iraq, Afganistán, u otro teatro de guerra y desearía el acceso libre al sitio, puede publicar fotografías que usted y sus compañeros han hecho durante su servicio». El sitio se estructura como un foro, donde los usuarios intercambian el material aficionado, no cubierto por derechos de autor.
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Fuentes.
www.argenpress.info, otras agencias de noticias, prensa internacional y archivo de Piel de Leopardo.