Legitimar a una organización financiada por EU, como Reporteros Sin Fronteras, devela la obediencia obnubilada de Camila Vallejo, vocera del autodenominado gobierno “izquierdista” de Boric, a los mandatos de Washington. (1)
En relación al revuelo generado por el resultado de las elecciones presidenciales efectuadas hace un mes en Venezuela, dando por vencedor a Nicolás Maduro, versión impugnada por la oposición de ese país, la diputada Carmen Hertz formuló un comentario afirmando: «En Venezuela hay una libertad de expresión bastante más grande que acá. Allá hay diarios de oposición, cuestión que aquí no lo hay. Aquí los medios son hegemónicos, con una sola línea editorial».

La Ministra Secretaria General de Gobierno Camila Vallejo, compañera del mismo Partido político que Carmen Hertz, impugnó públicamente tales declaraciones afirmando lo siguiente en los canales de la televisión: «Podemos mirar además a nivel internacional los organismos de derechos humanos que también hacen informes críticos de la situación de la libertad de prensa. La libertad de expresión de Venezuela y comparativamente también hablando con Chile, pero si solo miramos el ranking de libertad de prensa de Reporteros sin Fronteras, no se condice con la afirmación de la diputada, así que desconozco en base a qué se señala aquello», cerró Vallejo.
Obviamente, los canales de televisión chilenos, se dieron un festín con esta controversia pública entre dos militantes de un mismo partido político. Vi en CNN entrevistas a numerosos parlamentarios, todos criticando severamente a Carmen, sin que jamás le otorgaron espacio a ella misma. Carmen no ha dicho ninguna mentira. La situación de la prensa y televisión en Venezuela no pueden compararse con la nuestra. Está a años luz por encima de nosotros, digan lo que digan las versiones de las entidades internacionales al servicio de los grandes consorcios internacionales.
El agravio público cometido contra ella por la Ministra Vallejo es imperdonable, además de incurrir en una flagrante mentira, solo avalada por las mismas fuentes de información que permanecen silenciosas, por ejemplo, ante los múltiples asesinatos de periodistas, cometidos hoy en día por el ejército de Israel en la martirizada franja de Gaza.
Para nosotros militantes comunistas hace ya casi 80 años, este episodio nos resulta inconcebible, representativo de la necesidad de recuperar los Principios y las Normas que nos han permitido sobrevivir a tantas situaciones adversas en nuestra historia.
1) Nota del editor: Desde el golpe de 2002, Reporteros sin Fronteras, de la mano del hoy fallecido secretario general Cristophe Deloire, intentó establecer un cerco mediático contra el gobierno -entonces- de Hugo Chávez
Los comentarios están cerrados.