En fin, en estos y otros episodios de nuestra política mundial advertimos que empieza a funcionar un lenguaje y una actitud francamente fascistas. Como en la segunda guerra mundial, ¿esperaremos que los nuevos hitler (con minúsculas) quieran tomarse los países que les representen algo? Porque para allá se orienta la acción.
¿Qué hacer frente a tales acciones? Me recuerda al poeta ecuatoriano Jorge Enrique Adoum (ya fallecido) quien decía, más o menos lo siguiente: “frente a tan descomunales dislates, lo importante es denunciarlas, protestar” (la frase no es textual) No importa que sea uno solo, en el mundo, pero que alguien proteste, denuncie.
* Periodista.
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