Apto para todo público, no solo para periodistas: cuando los periodistas se salen del guión
Ernesto Carmona.*
El oficio del periodismo es peligroso por cuanto los periodistas suelen dejar el pellejo (ya en pos de una información, ya porque se convierten en "daño colateral" consumado, ya porque se los bales a la salida del trabajo o cuando llegan a su casa); hay otros riesgos, menores que perder la vida, pero presentes y constantes: quedar sin trabajo e en "listas negras". O excribir o decir algo inconveniente para la "libertad de prensa" medida desde la empresa.
El despido de la periodista mexicana Carmen Aristegui como conductora del noticiario estrella de la cadena de radio MVS (FM 102.5 en el DF de México) por presiones del gobierno de Felipe Calderón revela que los grandes medios y los gobiernos de América Latina castigan a los periodistas que se salen del libreto, tal como ocurre en países desarrollados como Estados Unidos y el Reino Unido. Al fin de cuenta, los gobiernos otorgan a los empresarios la concesión para explotar ondas de radio y televisión como ese lucrativo negocio propio llamado libertad de expresión.
Los chicos malos de la guerra de Iraq, José Bodes Gómez, Editorial Prensa Latina, 2008, 200 pp.
* Periodista y escritor.