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Con pancartas, banderas indígenas y música, miles de campesinos y obreros encabezados por el presidente Evo Morales iniciaron en Caracollo, poblado a más 4.000 metros de altura, una marcha de siete días y 200 kilómetros para expresarle al poder político una nueva Constitución.
Morales que busca impulsar su proyecto constitucional con el que ofreció "refundar Bolivia”, caminó unos tres kilómetros en un hecho histórico que refuerza su alianza con las clases populares.
En el discurso brindado a los más de 15 mil participantes, sostuvo que los campesinos e indígenas consideran que en la nueva Constitución tienen un papel crucial que desempeñar, tras años de exclusión.
“Esta marcha es una marcha por la refundación de Bolivia, no es un concurso de marchista, es un sacrificio para persuadir a ese pequeño grupo de opositores que no permiten la transformación del país”, afirmó Morales.
En tanto, Fidel Surco, presidente de la Coordinadora Nacional para el Cambio (CONALCAM), organizadora de la manifestación, señaló que la idea es partir con al menos 10.000 y paulatinamente llegar a 20.000 o más.
Surco también instó a los parlamentarios y a prefectos opositores que faciliten la consulta, vía más democrática para aceptar o rechazar el actual proceso de cambio. “Esa caminata será una muestra para el país, América Latina y el mundo del sentir de la mayoría de los bolivianos”, expresó
Bolivia se encuentra confrontada por el proyecto constitucional de Morales, que otorga mayor representatividad a la mayoría indígena de los Andes y consolidar la nacionalización de la economía, con la oposición de derecha que impulsa a contramano procesos autonómicos de cuño liberal.
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