Cancún, sede climática global con fuerte factura ecológica
Las bellezas de la ciudad oceánica mexicana de Cancún pueden haber sido una razón para elegirla como sede de la próxima cumbre mundial de cambio climático, pero nada indica que sea un modelo de adaptación a los rigores del recalentamiento.
Destrucción de manglares, exceso de basura y sobrepoblación hotelera son algunos de los problemas de Cancún, "olla de culebras", según uno de los varios significados atribuidos a su nombre maya.
"Cancún es una vergüenza. No me explico cómo la eligieron para la cumbre, es ejemplo de lo que no se debe hacer", dijo Guadalupe Álvarez, fundadora de la organización no gubernamental Cielo, Tierra y Mar.
Entre el 29 de noviembre y el 10 de diciembre se celebrará allí la 16 Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 16), en busca de un acuerdo global que reduzca la contaminación que está recalentando la atmósfera terrestre.
Destrucción de manglares, exceso de basura y sobrepoblación hotelera son algunos de los problemas de Cancún, "olla de culebras", según uno de los varios significados atribuidos a su nombre maya.
"Cancún es una vergüenza. No me explico cómo la eligieron para la cumbre, es ejemplo de lo que no se debe hacer", dijo Guadalupe Álvarez, fundadora de la organización no gubernamental Cielo, Tierra y Mar.
Entre el 29 de noviembre y el 10 de diciembre se celebrará allí la 16 Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP 16), en busca de un acuerdo global que reduzca la contaminación que está recalentando la atmósfera terrestre.