Chile hacia el holocausto final. – JUAN MEDINA, EL ACOSO
Hermanos y hermanas
Compañeros y compañeras:
Nos dirigimos a ustedes porque no podemos, no queremos, ni vamos permanecer callados frente a la violencia, frente a la mentira, frente a la cobardía y frente al abuso desplegado por parte del gobierno y los poderosos de este país, en contra de quienes hoy, levantan las banderas irrenunciables de la solidaridad, explicita y honesta, hacia los que luchan por la defensa de derechos usurpados.
Queremos manifestar nuestro pleno respeto y solidaridad activa, hacia el compañero, amigo y hermano Juan Medina quien por estos días es rehén de la judicialización criminal y el montaje comunicacional amparado por el gobierno y los medios de comunicación oficiales.
Producto de lo anterior Juan se encuentra recluido e incomunicado en la Cárcel El Manzano de Concepción separado de su familia y seres queridos sometido a un régimen carcelario que busca por todos los medios acallar la voz de protesta legítima de quienes hoy solidarizan con las justas demandas reivindicadas por el Pueblo Mapuche.
Los hechos nos demuestran que en Chile existe la prisión políticay que con ella ninguna democracia puede arrogarse el nombre de tal.
Que esa prisión política en Chile no está solamente siendo aplicada a los actores directos que protagonizan hoy, ejemplos de lucha consecuente contra el orden de cosas impuesto por el dinero; sino que también esta siendo aplicada a quienes intenten desplegar iniciativas de solidaridad efectiva con estos sectores.
Compañeros y compañeras, hoy en Chile; el gobierno, este mal gobierno, ha hecho de la solidaridad un delito; pero sin embrago, respalda abiertamente la represión y las ejecuciones extrajudiciales en zonas de conflicto.
Quienes conocimos y conocemos a Juan manifestamos la plena inocencia de los cargos que se le imputan y por lo mismo sabemos que su ejemplo de lucha y entereza no serán doblegadas ni menos acalladas tras los muros y barrotes de una cárcel.
Hacemos un llamado a todos los sectores de la sociedad civil organizada y no organizada, al comunero, al poblador, a la dueña de casa, a los trabajadores y a los estudiantes a no caer en esta sucia estrategia policial e intimidatoria desplegada por el gobierno y los medios de comunicación cómplices de estas y otras injusticias.
Por lo anterior y desde ya informamos a la opinión pública que la voz de Juan Medina y las demás victimas de esta guerra sucia es también la nuestra, que no están solos y que su ejemplo es ahora nuestro objetivo
Nunca más solos
(firman)
Amigos y compañeros de Juan Medina
Taller de autoformación de trabajadores, Concepción.
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