Cultura chilena. – LA SECH: ESPACIO DE LIBERTAD RUMBO A SUS 75 AÑOS

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Aparecida en la revista Piel de Leopardo, integrada a este portal.

Alberto Romero fue uno de los fundadores de la SECh, en 1932. Como ha testimoniado Oreste Plath en su admirable libro El Santiago que se fue, el novelista, con la colaboración de Marta Brunet, se propuso «levantar la vida social y económica del escritor». Por ello, fue el promotor del Premio Nacional de Literatura y Arte, instituido por Ley No 7368, del 9 de noviembre de 1942 –promulgada en el Diario Oficial el 20 de ese mismo mes–.

Esta iniciativa “tuvo sus orígenes en la preocupación nacida en la Sociedad de Escritores por la orfandad social en la que vivían los escritores chilenos. Esta orfandad a la que aludían se refería básicamente a la incapacidad de vivir de sus derechos editoriales y de ser los únicos trabajadores que no estaban protegidos por las leyes previsionales y que no contaban con beneficios asistenciales”.

Con profundo sentido de identidad y del rol histórico que le cabe al escritor, se dejó constancia de la institucionalización del Premio Nacional como homenaje al centenario del Movimiento Literario de 1842, cuyos ciento sesenta y cinco años se conmemorarán también el próximo año 2007.

El mejor regalo que Chile puede hacer a sus escritores es la restauración de la entrega anual del Premio Nacional, con la presencia de sus correspondientes dos jurados como se estableció al momento de crearlo.

La Feria del Libro fue fundada por la Sech

Desde la recién nacida Sociedad de Escritores, Alberto Romero tuvo como objetivo primordial la difusión del libro y la lectura; es así como impulsó la Primera Semana del Libro Chileno, que se realizó entre el 9 y el 16 de septiembre de 1933. Este fue un espacio del libro libre, en plena calle, a disposición –sin la menor traba– de todos los ciudadanos.

Como recuerda el mismo Oreste Plath, para la Segunda Feria Nacional del Libro se designó una comisión compuesta por los escritores Samuel Lillo, Jerónimo Lagos, Januario Espinosa, Caupolicán Montaldo, Rubén Azócar, Chela Reyes, Benjamín Subercaseaux, González Vera, Efraín Szmulewicz y el propio presidente de la SECh. Esta feria funcionó en Santiago desde el 20 de diciembre hasta el 20 de enero de 1939, en la avenida Bernardo O’Higgins, entre las calles Ahumada y Bandera:

“Esta segunda feria nacional del libro fue una demostración viva de los esfuerzos con que un grupo de hombres desprovistos de alicientes trabajan por prestigiar la nacionalidad en el terreno puro de las ideas, mientras Europa juntaba cañones para destruir la civilización. Las editoriales chilenas montaron sus pabellones, el periodismo nacional exhibió una retrospectiva, desde la Aurora de Chile. Este pabellón estuvo bajo la égida de Camilo Henríquez y la tuición del Sindicato de Periodistas.

«Se efectuaron charlas de escritores, actos culturales, retretas. Los niños y los obreros encontraron elementos que los favorecieron. Se distribuyó gratuitamente entre los niños un romancero y la SECH, a la clausura de la feria, donó numerosas obras literarias a las instituciones obreras. Esta feria del libro fue una cooperación importante para el gobierno del Frente Popular”.

Es de esperar que la Feria del Libro del año 2007, cuyo motor es el Consejo Nacional del Libro y la Lectura, tenga un lema de homenaje y reconocimiento a la Sociedad de Escritores de Chile.

La SECh no descansaba tratando de estimular la creación, es así como fundó el Premio Sociedad de Escritores de Chile que obtuvo en 1940 Luis Oyarzún, brillante escritor que llegaría ser presidente de la institución.

El Premio Sociedad de Escritores de Chile fue la base del Premio Alerce que logramos recuperar en los años 1998-1999, pero que ha sido suspendido.

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Casa del Escritor: espacio de libertad

La sede de la SECh es la Casa del Escritor, ubicada en calle Almirante Simpson 7, es fruto del tenaz empeño de Ester Matte Alessandri. La que también fue presidenta del Sindicato de Escritores, sería electa con la más alta votación como directora de la SECh; aunque le correspondía la presidencia, apoyó con toda su generosidad a Rubén Azócar para que ejerciera ese cargo. Pero se propuso poner todo su empeño en conseguir una casa para la entidad, lo que gestionó con su tío, el entonces presidente de la república Jorge Alessandri: el resultado fue la actual Casa del Escritor. No debemos olvidar que esta casa nuestra fue obtenida gracias a su empecinado desvelo.

Como directora de la Revista Alerce, Ester Matte cumplió otro capítulo importante al servicio de la literatura nacional. Corresponde resucitar la Revista Alerce de la Sech, más tarde dirigida por Enrique Lihn, aporte considerable a las letras de Chile.

En cuanto los escritores fueron dueños de la hermosa Casa del Escritor, Pablo Neruda la visitó y se puso en campaña para dotarla de un digno lugar de esparcimiento: el resultado fue la taberna llamada Refugio López Velarde. Gracias al sustancial aporte de México, fue provista de mobiliario y vajilla con el logo correspondiente.

La SECh va a cumplir setenta y cinco años esperando se promulgue un decreto que le confiera el goce de un estipendio anual que le permita subvenir dignamente a sus gastos. Esto le evitará el desdoro de acudir, año tras año, a diversos estamentos, pidiendo recursos para sus necesidades.

Nutrida ha sido la trayectoria de esta entidad de los escritores chilenos. Por sobre mezquindades y rencillas ha prevalecido un espíritu solidario y de generosa entrega a la causa de la cultura. Durante toda la dictadura de Pinochet, la Casa del Escritor fue el espacio democrático abierto a las artes y las letras. Cupo ser presidentes en esas circunstancias a escritores destacados entre ellos: Luis Sánchez Latorre –Filebo—, Martín Cerda (1930-1991), Emilio Oviedo, Poli Délano y Ramón Díaz Eterovic impedir que la clausuraran las fuerzas represivas, acoger a la Agrupación de Pintores y Escultores de Chile y realizar incontables actividades de nuestros creadores a favor de la causa democrática.

Quien mejor ejemplifica esos momentos, según Ramón Díaz Eterovic, es “Martín Cerda que asumió la presidencia de la SECH en un período particularmente difícil, imprimiéndole un sello de amplitud y diálogo cuando todo a nuestro alrededor estaba signado por la oscuridad y el desencanto. Su labor como presidente de la SECH fue un grito rebeldía, necesario y oportuno en años en que era preciso defender la palabra y la dignidad del escritor”.

La SECH había sufrido una sangría irreparable con la dictadura. Lo vivido por los escritores dentro del país era un exilio interno. Para publicar había que tener autorización militar. Fue, por otra parte, grande el número de escritores víctimas directas de la represión. Por ello, luego de ratificarlo en la asamblea plenaria del Encuentro Nacional de Escritores, celebrada en su sede social el día sábado 10 de octubre de 1998, la Sociedad de Escritores de Chile cumplió el acuerdo de la sesión ordinaria abierta de directorio del 24 de agosto:

Por razones éticas, de oficio y gremiales, se hizo parte acusadora en la causa generada por la denuncia presentada por el Fiscal don Miguel Miravet Hombrados contra Augusto Pinochet Ugarte, Gustavo Leigh Guzmán, Rodolfo Stange Oelckers, Fernando Matthei Aubel y otros por los presuntos delitos de detención ilegal, secuestro, torturas, asesinato, terrorismo y genocidio, como entidad afectada por la detención ilegal, exilio, secuestro, desaparición, torturas y asesinato de importante número de poetas, narradores, ensayistas y dramaturgos.(11.10. 2001). Se adjuntó el listado de los poetas asesinados a fuerza de torturas, de víctimas de allanamientos, destrucción de bibliotecas, quema de libros a los escritores muertos en el exilio –baste de ejemplo lo vivido por Pablo Neruda antes de su muerte–, de más de un centenar de escritores obligados a exiliarse (1).

Ya es hora de que los escritores no sean tratados como indigentes. Merecen pensiones dignas. Corresponde presentar un proyecto de ley para otorgar pensión a todos los escritores que ya cumplieron edad de jubilación y carecen de ella, así como un reconocimiento material, en forma de premio, a escritoras y escritores eméritos que han dedicado la vida a la literatura y poseen recursos mínimos para vivir.

La Casa del Escritor, más que un remozamiento necesita una remodelación que implique la incorporación de un salón de actos. Urge cumplir la medida que dispuso en su informe un enviado del Cuerpo de Bomberos cuando la revisó y le halló alta peligrosidad –esta revisión que agradecemos a los Bomberos de Chile, se logró con ayuda a Sergio Gutiérrez Patri–. Según dicho informe es indispensable en la remodelación abrir una puerta lateral de escape.

Biblioteca

La Biblioteca Ester Matte Alessandri de la SECH fue refundada en 1998-99, con aporte sustancial del Consejo del Libro y la Lectura: dos proyectos con seguimiento, por un total de doce millones de pesos. Contamos con la colaboración de la profesora Ana Videla Lira, pintora y escritora, para transformar un saqueado depósito de libros en una biblioteca con su sala de lectura y catálogos de los libros existentes; ella se especializó en el programa Winisis y otros que permitieron catalogar unos seis mil volúmenes de todo el fondo de la Biblioteca, comprendidas revistas tan valiosa como toda la colección de Atenea desde su fundación; la colección de la revista Literatura Chilena en el Exilio, después llamada Literatura Chilena, Creación y Crítica, publicación que cumplió catorce años de edición ininterrumpida, en Los Ángeles, California, y en Madrid, donación de David Valjalo (1924-2005); las publicaciones literarias de los escritores en clandestinidad durante la dictadura, e irremplazables colecciones de las revistas sacadas por los escritores en plena dictadura, como Pirka, La Gota Pura, el 100-pies, La Castaña, El Gato sin Botas, Boletín Hoja X, Ojo y otros importantes documentos.

Fue posible restaurar y empastar libros valiosos en mal estado, y adquirir un fondo sustancial sobre todo de literatura chilena –premios nacionales en especial– y latinoamericana, premunir de mobiliario e iluminación adecuada a la sala de lectura.

Por desgracia quedó en agua de borrajas el convenio que la Biblioteca Ester Matte Alessandri firmó con la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, DIBAM, en 1999. Es de necesidad perentoria reactivar dicho convenio. Parte del presupuesto de la SECH se debe destinar a contratar a quien se encargue de ella y la atienda, previo arqueo de los libros existentes.

Hay que retomar contacto con CEDRO –organismo español de defensa de los derechos de reprografía de los autores– y ver todo el material que dejé luego de asistir a reunión internacional en Bolivia sobre esta materia, que implica sea pagado por el Estado un derecho de lectura de todo escritor consultado en bibliotecas (leyes vigentes en Suecia, Canadá, Francia, etc.).

Un refugio para el ocio creador

Un refugio para dedicarse a escribir con tranquilidad es un caro anhelo de los escritores. Estuvo a punto de cumplirse, gracias a Neruda que destinó los terrenos para construir la Fundación Cantalao que serviría a los escritores y sabios de América. De modo expreso, el poeta dejó a la SECh como corresponsable de este objetivo que hasta ahora ha sido escamoteado.

En su momento, acudimos a la ministra de Bienes Nacional al enterarnos de sus intenciones de destinar los terrenos fiscales de la precordillera de San José de Maipo a fines de interés social.

Le solicitamos nos indicara qué requisitos habríamos de cumplir para postular al terreno donde se elevaría. Le expusimos que nos resultaba estimulante saber que se podría contar con un verdadero santuario de la naturaleza para el ocio creador. Le solicitamos un sitio que se pudiera destinar a refugio de los escritores. Dicho refugio nos permitiría acceder a un sitio de recogimiento para la labor creadora en períodos de vacaciones o asueto.

El refugio nos obligaría a crear un mecanismo autogestor para implementarlo con las comodidades elementales que satisficieran los requerimientos de sus ocupantes. No descartábamos destinar un espacio a escritores venidos de países hermanos que quisieran pasar vacaciones en nuestro país, lo cual cumpliría dos objetivos: un aporte al financiamiento del refugio y una forma de estrechar vínculos.

La señora ministra no tuvo a bien respondernos.

La escritora Teresa Hamel legó un sitio en Reñaca para construir el refugio de los escritores. Este legado se materializó el pasado año 2005 cuando Andrés del Campo Hamel, hijo de Teresa, informó de la herencia. Ahora hay verdadero fundamento para obtener el apoyo del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y otras instituciones pertinentes que permitan construir el anhelado refugio.

Mausoleo

Como los escritores no perdemos la mala costumbre de morirnos, aceptamos con gusto una iniciativa de Rodrigo Moraga Guerrero, director de Asuntos de Gestión bajo la presidencia de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, para erigir un mausoleo de los escritores que sería diseñado por un arquitecto, yerno del presidente Frei.

Iniciamos los trámites con el escritor Walter Garib y fuimos en varias oportunidades al Cementerio General para elegir un sitio. Nos atendió don Esteban Iriarte, arquitecto, jefe del Departamento Técnico. Después que expusimos el proyecto, nos citaron para recorrer varios terrenos. Hay uno que está muy próximo al obelisco que se erigió sobre la tumba de don Andrés Bello y de su familia, muy cerca de donde yace Víctor Domingo Silva en tumba prestada. Nos pareció el lugar adecuado, por su digno entorno, para levantar el mausoleo.

El mausoleo contaría con columbario y un lugar para los dispersos restos de escritores en tumbas semi abandonadas. Corresponde ahora retomar esta gestión que por desidia fue dejada de lado.

En las vísperas del 75° aniversario de la SECh, nos corresponde a todos los escritores de Chile impulsar y materializar las iniciativas que ennoblecerán el ejercicio de la escritura.

(1) Por qué los escritores chilenos se hicieron parte del juicio contra Pinochet.

Luego de ratificarlo en la asamblea plenaria del Encuentro Nacional de Escritores, celebrada en su sede social el día sábado 10 de octubre de 1998, la Sociedad de Escritores de Chile cumplió el acuerdo de la sesión ordinaria abierta de directorio del 24 de agosto: por razones éticas, de oficio y gremiales, se hizo parte acusadora en la causa generada por la denuncia presentada por el Fiscal don Miguel Miravet Hombrados contra Augusto Pinochet Ugarte, Gustavo Leigh Guzmán, Rodolfo Stange Oelckers, Fernando Matthei Aubel y otros, fotocomo entidad afectada por los presuntos delitos de detención ilegal, secuestro, desaparición, torturas, asesinato, terrorismo y genocidio, la detención ilegal, exilio, secuestro, desaparición, torturas y asesinato de importante número de poetas, narradores, ensayistas y dramaturgos.

Detenidos desaparecidos

1. Máximo Antonio Gedda Ortiz, poeta, nacido en Temuco el 19 de diciembre de 1947, detenido desaparecido, arrestado en un microbús en Santiago, el 16 de junio de 1974, fue trasladado a un lugar secreto de torturas y ejecuciones ubicado en Londres 38, Santiago, donde fue visto por varios testigos. Su nombre apareció en la lista de “Los Ciento Diecinueve” chilenos supuestamente asesinados en Argentina por otros chilenos, montaje publicitario de los servicios de Chile y Argentina que se conoce como Operación Colombo y que forma parte de la llamada Operación Cóndor.

2. Carlos Bascuñán Mourgues-Dewett, poeta, su desaparición coincide con el paso de la Caravana de la Muerte; luego se halló muerto y congelado en la cordillera, el 5 de noviembre de 1973, a 225 kilometrosal sur de Copiapó.

3. Luis Eduardo Durán Rivas, poeta, fue arrestado en Santiago el 14 de septiembre de 1974 y desapareció.

4. Jorge Bernabé Yáñez Olave, primer premio del concurso municipal de poesía de Linares con Más allá de lo abstracto, arrestado el 16 de septiembre de 1973 en el camino de Chanco a Cauquenes; desaparecido.

5. Ariel Santibáñez Díaz, poeta antofagastino detenido desaparecido en Santiago,1974.

6. Ricardo Troncoso León, dramaturgo, autor de Revolución, Semillas y Otras Hierbas, detenido desaparecido, arrestado el 1º de octubre de 1973 en su domicilio de Chillán.

A estos casos hay que agregar los de los poetas

7. Víctor Jara detenido el 11 de septiembre de 1973 y asesinado en el Estadio Chile.

8. Homero Arce, poeta, por largos años secretario de Pablo Neruda, no aparece en las listas del Informe Rettig, pero fuerzas represivas lo detuvieron en una repartición pública, lo golpearon hasta dejarlo inconsciente y murió en el Hospital Barros Luco, el 6 de febrero de 1987; fue velado en la Casa del Escritor, sede de la SECH .

9. José Manuel Parada, poeta, degollado.

Escritores presos y torturados en las cárceles y campos de concentración de todo el país:

10. Hernán Valdés, en Tejas Verdes,
11. Rolando Carrasco, en Chacabuco,
12. Santiago Cavieres,en Chacabuco,
13. Jorge Montealegre, en Chacabuco,
14. Franklin Quevedo, en Chacabuco,
15. Floridor Pérez, en laisla Quiriquina,
16. Clodomiro Almeyda, en la isla Dawson,
17. Aristóteles España, en la isla Dawson,
18. Anselmo Sule, en la isla Dawson,
19. Sergio Vuskovic, ensayista, profesor de Filosofía, en la isla Dawson, antes había sido detenido y torturado en el buque escuela “Esmeralda”.

Otros presos
20. María Flora Yáñez (octogenaria)
21. Heddy Navarro
22. Bruno Serrano.
23. Jorge Soza Egaña.

Detenidos y luego expulsados del país
24. Omar Lara
25. Guillermo Núñez, pintor y escritor que fue dos veces detenido y torturado con varios mesesde ojos vendados día y noche.

Murieron en exilio

26. Guillermo Atías, ex presidente de la SECh
27. Armando Cassigoli, ex presidente de la SECh
28. Carlos Droguett, Premio Nacional de Literatura
29. Mahfud Massis, poeta
30. Julio Moncada, poeta
31. Fernando Rivas Sánchez, narrador
32. Osvaldo Rodríguez-Musso
33. Orlando Millas, ensayista
34. Gonzalo Santelices Quesada, poeta
35. Alfonso Alcalde después de haber retornado, se ahorcó

Exiliados, la mayoría de éstos exiliados tenía una “L” en el pasaporte, es decir, condena al destierro sin derecho a pisar el territorio nacional.

36. Isabel Allende
37. Antonio Avaria
38. Ligeia Balladares
39. Soledad Bianchi
40. Juan Cameron
41. Ernesto Carmona, editor de Morir es la noticia, obra colectiva que da a conocer cómo perdieron la vida 23 periodistas, 9 estudiantes de periodismo, 20 trabajadores de la comunicación (camarógrafos, reporteros gráficos, cineastas y otros), 28 obreros gráficos asesinados, torturados, desaparecidos máas 21 periodistas muertos en el exilio o como consecuencia del golpe militar de 1973.
42. Hernán Castellano Girón
43. Carlos Cerda
44. Jaime Collyer
45. Salvatori Coppola
46. Harold Durán –hermano del ya mencionado poeta Luis Eduardo Durán Rivas– Premio de Literatura de Escandinavia;
47. Eugenia Echeverría
48. Eduardo Embry
49. Juan Armando Epple
50. Luis Enrique Delano, fallecido después del retorno
51. Poli Délano
52. Luis Domínguez
53. Ariel Dorfman
54. Alonso Freire
55. Lorenzo González Cabrera
56. Ruth González
57.Sergio Infante
58. Hernán Lavín Cerda
59. Patricio Manns
60. Eugenia Neves, fallecida luego de retornar
61. Eduardo Labarca
62. Fernando Lamberg
63. Constanza Lira
64. Luis Alberto Mansilla
65. Luis Mizon
66. Héctor Tancredo Pinochet. fallecido luego de retornar
67. Omar Saavedra
68. Susana Sánchez y su marido el médico y escritor:
69. Juan León
70. Luis Sepúlveda
71. Antonio Skarmeta
72. Volodia Teitelboim
73. José Leandro Urbina
74. Armando Uribe Arce
75. José Miguel Varas
76. Ana Vásquez-Bronfman
77. Virginia Vidal
78. Juan Pablo Yáñez Barrios

Otros escritores que sufrieron el exilio –la lista aun no está completa–:

79. Raúl Barrientos
80. Hernán Barrios
81. Miriam Bergholz
82. Luis Bocaz
83. Roberto Bolaño, fallecido sin retornar
84. Pedro Bravo Elizondo
85. Roberto Brodsky
86. Javier Campos
87. Jorge Cancino
88. Marcelo Coddou
89. Jorge Etcheverry
90. Alfonso Freire
91. Claudio Giaconi
92. Jaime Giordano
93. Oscar Hahn
94. Pedro Lastra
95. Sergio Macías
96. José Maldavsky
97. Luis Maira
98. Ernesto Malbrán
99. Germán Marín
100. Bruno Montané
101. Silverio Muñoz
102. Naín Nómez
103. Jesús Ortega
104. Ana Pizarro
105. Guillermo Quiñones
106. Mauricio Redolés
107. José Rodríguez Elizondo
108. Miguel Rojas-Mix
109. Grínor Rojo
110. Raúl Silva Cáceres
111. Helvio Soto, cineasta y escritor
112. Bernardo Subercaseaux
113. Federico Schopf
114. Sergio Vesely
115. Cecilia Vicuña
116. Pedro Vicuña
117. Francisco Viñuela
118. Luis Vitale, ensayista e historiador, tras pasar por torturas y campo de concentración
119. Otilia Vargas de Pérez, a quien la dictadura le asesinó a cinco hijos:
Dagoberto (baleado en Malloco),Carlos Freddy y Aldo Gonzalo (detenidos desaparecidos) ylos mellizos Iván y Mireya (muertos al allanar su casa)

Una somera idea del significado de este destierro que afectó a más de un centenar de escritores y de la batalla del pensamiento contra toda censura la dan las escritoras Estela Aguirre Argomedo, Carmen Correa Silva y Sonia Chamorro Martínez en su bibliografía acerca del exilio chileno y la cultura: La mirada de lejos.

Libros y tesis escritos por chilenos desde el exilio. 1973-1989 (separata de la revista Ratón de Biblioteca, ARCIS, 1999). En este trabajo se refieren al quehacer literario de los artistas e intelectuales chilenos y clasifican casi mil cien libros editados en treinta y siete países, v.gr.: 170 en México; 154 en España; 89 en Francia; 55 en Canadá; 54 en los EEUU; 48 en Suecia; 45 en la RDA; 39 en Holanda; 39 en Venezuela; 33 en la RFA.

La ejecución de numerosos allanamientos y quema de libros, por parte de las fuerzas armadas tienen como el más triste ejemplo el allanamiento de la casa de Pablo Neruda en Isla Negra, sin respetar que el poeta estuviera enfermo grave en cama; la destrucción de La Chascona, inclusive la biblioteca, casa del poeta en Márquez de la Plata 0174; la destrucción total de La Sebastiana, casa del poeta en Valparaíso.

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* Periodista y escritora. Dirige el portal Anaquel Austral
(http://virginia vidal.com)
Anaquel Austral es una de las más importantes publicaciones digitales que en materia cultural se editan en América del Sur.

Nota
A la pesarosa nómina de escritores exiliados pueden sumarse los nombres de:
– Eulogio Joel Sánchez –poeta, fallecido tras su regreso; publicó en el exilio en Caracas–;
– Waldo Rojas –poeta, ha publicado en el exilio y ejerce el magisterio en Francia;
– Rodrigo Quijada –narrador y ensayista, Premio Municpal de Novela, Santiago, ha publicado en México;
– Amado Láscar –poeta, ha publicado en Estados Unidos; ejerce el magisterio–;
– Augusto Alvarado –narrador y ensayista, publicó en Buenos Aires, donde falleció–;
– Hugo Vera –poeta y editor de revistas, ha publicado en Buenos Aires–;
– Raúl Ruiz –cineasta, dramaturgo y ensayista, ha filmado y publicado en Europa–;
– Faride Zerán –periodista y escritora, vivió y escribió en Venezuela–;
– Patricio Guzmán –narrador y cineasta, filma en Europa–;
– Roberto Ferrés –narrador, publicó en Suecia–;
– Jorje Alejandro Lagos –narrador y poeta, ha publicado en México, Venezuela y la Argentina–.

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