El reptil volador de mayor tamaño que existió en la historia de la Tierra que dominó los cielos durante la era de los dinosaurios”, expresaron desde el área Cultura y Patrimonio de la provincia de Río Negro. Hace unos días, paleontólogos e investigadores del Laboratorio de Anatomía Comparada y Evolución de los Vertebrados del Conicet anunciaron de esta manera el descubrimiento del reptil volador Azhdarchidae Pterosauria que vivió hace 100 millones de años y es el más antiguo de América del Sur.

Los restos fósiles fueron hallados a orillas del embalse Ezequiel Ramos Mexía, a unos 1.235 kilómetros al sudoeste de la Ciudad de Buenos Aires, en la zona de El Chocón, en el límite entre Neuquén y Río Negro. El hallazgo consiste en una vértebra del cuello descubierta en rocas de la Formación Candeleros, de 90 a 100 millones de años de antigüedad. A diferencia de otras especies, señalaron en el comunicado, la vértebra encontrada representa un animal con una envergadura de, aproximadamente, cuatro metros, semejante a la de un cóndor.

Durante 2022, en la localidad de Malargüe (Mendoza), un equipo científico de la Universidad Nacional de Cuyo (UNCUYO) había presentado a Thanatosdrakon amaru, conocido como “dragón de la muerte”. Se trataba de una especie de reptil volador, de entre 250 y 66 millones de años de antigüedad y de 9 metros de largo que, según los investigadores, se trataba del más grande de nuestro continente hasta ese momento. También se conocieron otros azdárquidos, como el Aerotitan sudamericanus, también de Río Negro, pero mucho más reciente (70 millones de años de antigüedad).