Diez millones de personas habrían muerto por Covid, mientras sigue el negocio de las vacunas
El número real de muertes por coronavirus es dos o tres veces superior a los 3,4 millones de decesos notificados hasta ahora: es decir, las cifras reales de fallecidos podrían estar entre los seis, ocho o hasta 10 millones de personas. No se trata de una especulación periodística sino de datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La pandemia “está lejos de terminar”, dijo el director general del organismo multilateral, Tedros Adhanom Ghebreyesus, y observó que “solo el jueves 20 (de mayo) más de 13 mil personas de todo el mundo perdieron la vida a causa de la Covid-19, nueve cada minuto. Hoy la cifra será similar. Y mañana, y al día siguiente”.
Una base para ese cálculo “real” es que al 31 de diciembre de 2020 las estimaciones preliminares sugirieron que el número total de muertes mundiales atribuibles a la pandemia el año pasado fue de al menos tres millones, lo que representa 1,2 millones de muertes más que los 1,8 millones entonces notificados oficialmente. El informe de la OMS recuerda que el coronavirus afecta de manera desproporcionada a las poblaciones vulnerables, y corren mayor riesgo de contraerlo quienes viven en entornos superpoblados.
Lo cierto es que solo 51 por ciento de los países incluyen datos desglosados en sus informes estadísticos nacionales. Ghebreyesus admitió que “El rápido despliegue de las vacunas contra la Covid-19 es un triunfo de la ciencia, pero su distribución desigual es un fracaso para la humanidad”.
De acuerdo con estadísticas de la universidad estadounidense Johns Hopkins, se han reportado 166 millones 260 mil casos de Covid en el mundo, con casi tres millones y medio de decesos. Casi 90 por ciento de todas las vacunas administradas en el mundo se han aplicado en países del Grupo de los 20 (industrializados y emergentes) y “para acabar con la pandemia todo el mundo ha de tener las herramientas para detenerla”, dijo el funcionario.
El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, sumó su voz y dijo “seamos claros, estamos en guerra con el virus. Tenemos que tratar nuestras armas con reglas de economía de guerra, y todavía no estamos ahí (…) A estas alturas, Covax debería haber entregado 170 millones de dosis en todo el mundo. Pero debido al nacionalismo de las vacunas, a la limitada capacidad de producción y a la falta de financiación, esa cifra es de sólo 65 millones”.
Covax es una alianza de agencias de las Naciones Unidas, gobiernos, oenegés, fundaciones y empresas para tratar de que este año cada país reciba y aplique vacunas suficientes para inmunizar al menos al 20 por ciento de su población.
Vacunas, el gran negocio de cinco empresas
A casi dos años de conocido el virus en la ciudad china de Wuhan, 711 millones de personas ya han recibido por lo menos la primera dosis de la vacuna y esto supera el 10% de la población mundial. Si bien técnicamente la inmunización de más del 93% de la población mundial podría llegar este mismo año, la solución al problema está atravesada tanto por los bolsillos de las distintas poblaciones y Estados, como por la disputa entre las principales industrias farmacéuticas por sacar ventajas económicas y una mejor tajada en esta crisis sanitaria.
En el cálculo de dosis cada 100 habitantes, La consultora Airfinity estimó que países como Estados Unidos (EU) y algunos de Europa llegarán a la inmunidad (70 % de la población vacunada) en julio. Aunque gran parte de Latinoamérica, África y Asia no alcanzarán la inmunidad colectiva antes de 2022. De hecho Sudamérica -con 301 casos por millón de habitantes- encabeza la lista mundial de contagios de Covid-19
La producción tanto de vacunas como de medicamentos hace mucho tiempo es un negocio a escala mundial. En 2019, un año antes que se desatara la Covid-19, el 90 % de las ventas de vacunas estaban concentradas en 5 grandes multinacionales: Pzifer, Merck y Gilead Sciences (EU), GlaxoSmithKline GSK (Reino Unido) y Sanofi (Francia).
Ese mercado había facturado 33.000 millones de dólares, como resultado de 5.500 millones de dosis comercializadas, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Cinco empresas concentran el 77 % de las dosis que se aplicarán este año a más del 90 % de la población mundial, según el Deutsche Bank dado que 12 planes industriales están en condiciones de producir en conjunto este año alrededor de 15.000 millones de dosis que alcanzaría para inmunizar a toda la población mundial.
En ese grupo de fabricantes están: el laboratorio británico AstraZeneca quien producirá 3.000 millones de dosis más 1.000 unidades en conjunto con la farmacéutica india Serum. Pfizer y su socio BioNTech de origen estadounidense, prevén distribuir también 3.000 millones de dosis.
Le siguen el grupo Johnson & Johnson, también de EU, la china Sinopharm, la india Bharat BioTech y Moderna (todas con 1.000 millones de dosis), la rusa Sputnik V (500 millones de dosis) y otras iniciativas más pequeñas como la india Zydus Cadilla (100 millones) y la china CanSino (100 millones).
Además hay 193 proyectos de vacunas en estado preclínico desde octubre de 2020, según la OMS. Pero son este grupo reducido de empresas quienes ya están comerciando su vacuna y podrán inmunizar a la gran mayoría de los habitantes del planeta.
El desarrollo de las vacunas para combatir el coronavirus convirtió en multimillonarios a nueve personas. La organización Oxfam informó que el presidente de Moderna, Stéphane Bancel, encabeza la nómina con 4.300 millones de dólares, seguido por el presidente y cofundador de BioNTech, Ugur Sahin, con 4.000 millones.
La escala sigue con dos de los inversores de Moderna, el inmunólogo Timothy Springer (2.200 millones de dólares) y el científico Robert Langer (1.600 millones de dólares), el presidente de esta compañía biotecnológica estadounidense, Noubar Afeyan (1.900 millones de dólares), así como el director general de una empresa con un acuerdo para fabricar y envasar la vacuna de Moderna, Juan López-Belmonte (1.800 millones de dólares).
Los cofundadores de la empresa china CanSino Biologics completan la lista: Zhu Tao (1.300 millones de dólares), Qiu Dongxu (1.200 millones de dólares) y Mao Huihua (1.000 millones de dólares), también cofundador.
* Periodista chilena residenciada en Europa, analista asociada al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)