La oposición en Venezuela: ¡qué ganas de embarrar la cancha!
Néstor Francia.*
No hace falta abundar en la evidente manipulación de la canalla política y mediática en torno al suicidio de Franklin Brito. Todo está a la vista. Eso sí, es bueno estar alerta el día de hoy —cuando se realizará el sepelio en Río Caribe— pues es posible que haya algún plan guarimbero en esa localidad.
Por otra parte, la oposición necrofílica debe estar lamentando que la muerte de Brito se produjo bastante antes del 26-S, y que no pueden momificar su cadáver para poder exhibirlo como aquella macabra exposición de cuerpos humanos disecados (“Bodies Revealed”) que nuestro Gobierno prohibió con toda razón.
En todo caso, el comunicado de nuestro gobierno no solo aclara con lujo de detalles la verdad jurídica del caso, sino que pone los puntos sobre las íes en cuanto al cariz político del tema, cuando establece:
“Estamos obligados a rechazar el fariseísmo de la canalla mediática, de la oposición electorera, de las autoridades de la Iglesia católica, que alentaron la decisión extrema del Sr. Brito con el único fin de lograr un muerto para sus sucias banderas…No tienen ellos ni ellas la valentía para hacer sacrificio propio, sino que se aprovechan de la tragedia de un ser humano y su familia para intentar ganar votos y desestabilizar a un gobierno legítimo y democrático…Ninguno de ellos y ellas, que hoy lloran hipócritamente ante las cámaras de televisión bien dispuestas para el espectáculo macabro, hicieron nada para salvarle la vida. Al contrario como aves carroñeras deseaban y esperaron su muerte…
"El pueblo venezolano sabrá imponer su esperanza y su alegría sobre los que quieren llenar a la Patria de muerte, odio y desaliento…El sabio pueblo venezolano, que tantos mártires tiene en su lucha por encontrar el camino revolucionario que hoy transita, sabe dónde está la verdad” ¿Qué más podemos agregar?
La oposición, sospechosamente, sigue tratando de lanzar un velo de dudas en torno al venidero proceso electoral. Ayer señalábamos las declaraciones del escuálido ex rector del CNE, Ezequiel Zamora. Para hoy se anuncia una rueda de prensa del rector actual Vicente Díaz, también representante de la oposición, para denunciar los presuntos abusos que se han cometido durante la campaña electoral.
Aquí seguramente se referirá a la participación de Chávez en la campaña ¿Quién los entiende? Si Chávez es hoy tan impopular como ellos dicen y la gente ya no lo quiere, deberían estar felices de que acompañara a nuestros candidatos. Pero lo cierto es que nuestro Presidente sigue siendo el único gran líder en nuestro país y una vez que se asoma a la campaña, comienza a reafirmar el fervor y el cariño que le depara el pueblo, sobre todo el pueblo pobre y mayoritario.
Están locos por que Chávez se esconda y deje de patear la calle, como lo viene haciendo desde que fue liberado de la prisión de Yare, cuando se aceleró el proceso de cambios que venía gestándose con más fuerza desde el 27 de febrero de 1989.
Dentro de los planes opositores para enturbiar las elecciones no es de menor importancia la participación de factores de la derecha internacional. El ultraderechista Partido Popular (PP) de España aseguró ayer que participará como observador internacional en las elecciones parlamentarias del 26 de septiembre porque fue invitado por sectores de la derecha venezolana. Así lo manifestó el coordinador de Relaciones Internacionales del PP, Jorge Moragas.
El Partido Popular no fue invitado por el Consejo Nacional Electoral, único órgano rector con potestad legal de decir quiénes serán los observadores nacionales e internacionales que pueden participar en los comicios, como lo establece el artículo 3 de su reglamento, el cual indica:
“Las actividades de los acompañantes internacionales se ajustarán a los principios establecidos en el ordenamiento jurídico venezolano sobre la materia, en particular, a los principios de supremacía constitucional, legalidad, soberanía, integridad e inviolabilidad territorial, autodeterminación de los pueblos, no injerencia, imparcialidad, transparencia y respeto a las normas y autoridades electorales”.
Pero llama poderosamente la atención el carácter injerencista de las declaraciones de Moragas, quien aseguró que su presencia supuestamente “garantizará que en el 2012 haya una alternativa real al gobierno de Hugo Chávez” y agregó: “Queremos que Chávez abandone por la vía democrática y pacífica sus responsabilidades políticas”.
No podemos desvincular esas declaraciones del representante del PP de las vertidas por el opositor radical Herman Escarrá, claramente subversivas: “Si no se produce la representación esperada, se abrirán caminos distintos al electoral, que es el camino de la protestas, movilizaciones y de la denuncia continuada que terminará al final en la famosa marcha sin retorno… Creo en la unidad que está dirigida a que este régimen dure el menor tiempo posible”.
* Analista de asuntos políticos.