La trama del dibujo que se dibuja contra Venezuela

Néstor Francia.*

El periodista español Pascual Serrano pone los puntos sobre las íes. Los medios de la derecha nos ocultaron verdades sobre el informe de Unicef; mientras, Hillary Clinton suma su voz en la orquesta contrarrevolucionaria y surge un interrogante: ¿hay sabotaje en el tema de energía eléctrica?

El director del portal Rebelión (www.rebelion.org), Pascual Serrano, ha dado el clavo en torno al auto de la Audiencia Nacional española que pretende vincular a Venezuela con la organización vasca ETA y con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia. Según Serrano, se aspira a criminalizar al presidente Hugo Chávez, y a su gobierno, para ubicarlo en una especie de “Eje del Mal” y legitimar cualquier eventual intervención en el país.

Además, opinó que esta pretensión también entra en la pelea interna de la derecha, a través de la cual el opositor Partido Popular (PP) usa a Venezuela y a Cuba como munición contra la administración de Rodríguez Zapatero. Aclara también la procedencia del juez Eloy Velasco:

“Es un juez claramente situado política e ideológicamente en el ámbito del Partido Popular (PP), que encontró la oportunidad vulnerando cualquier principio de fundamentación jurídica, de acusar al Gobierno de Venezuela y facilitar al PP un argumento con el cual atacar al Gobierno español y, por todo ello, con una amplia cobertura de los medios de derecha que quieren agredir a Venezuela”.

Dentro de esta campaña contra Venezuela, los medios de la derecha llegan a confundirnos con su doble acción de invención y también ocultamiento de informaciones. Ayer hablamos del informe de Unicef donde se establece que más de 80.000 niños trabajan en Venezuela. Lo que omitieron esos medios es que, según el mencionado informe, Venezuela es el país en América Latina que registró las más bajas tasas de actividad laboral entre niños y niñas.

Es decir, se asoma una cifra y se oculta una verdad de notable importancia con relación a la misma.

Esta campaña contra Chávez y la Revolución Bolivariana fue comparada por nuestro presidente con la actuación de una orquesta. Por cierto, uno de los principales intérpretes de esa orquesta dejó escuchar su voz ayer en Brasilia. La secretaria de Estado gringa expresó:

“Esperamos (del gobierno Chávez) un nuevo comienzo, para restaurar la democracia, la libertad de prensa, la propiedad privada, la economía de mercado… Nos preocupa la conducta del gobierno venezolano, a la que consideramos improductiva en lo que se refiere a la relación con sus vecinos”.

Está muy bien, las cosas se van aclarando. Es evidente que los enemigos de Venezuela lo son, sobre todo, del socialismo, de manera que se define cada vez más el fondo del asunto. Lo que defiende la Clinton es el neoliberalismo, con la cháchara sobre la “propiedad privada” y el “libre mercado”. Los sabelotodo que viven anunciando que hablar de derechas e izquierdas es anacrónico, deberían aprender de lo que ocurrió ayer en la reunión del Consejo Permanente de la OEA, donde se armó un bloque de gobiernos de derecha, conformado por Estados Unidos, Canadá y Panamá, para defender las barrabasadas de la CIDH.

La energía eléctrica

En otra perspectiva, preocupa que mientras mucha gente del pueblo, incluidas personas de las clases media, hace grandes sacrificios para ahorrar energía eléctrica, grandes empresas que están entre los principales consumidores la despilfarran, como el CCCT y otros centros comerciales, en una acción que despierta razonable suspicacia ante la posibilidad de premeditación y sabotaje. Ya lo dijo Chávez ayer: “Hay que investigar a las empresas que incrementaron su consumo hasta en cien por ciento, esto es algo sumamente grave, esto podría tratarse de un sabotaje”. Ojalá nuestro organismos de seguridad tomen en serio esta instrucción y la lleven a la práctica.

Mientras tanto, los zamuros de La Barrosa saltan de inmediato contra esta denuncia del presidente. El director ejecutivo de la Cámara de Comercio de Caracas, Víctor Maldonado, expresó su “preocupación” por lo que denominó la pérdida de foco del gobierno en el tema energético y rechazó que a comercios e industrias se les acuse de estar interesadas en el fracaso de las metas de ahorro, mientras culpó a la falta de inversiones y mantenimiento, y al descuido de “un gobierno insensato” de la crisis energética.

Es otra vez la impenitente acción de los sectores conspiradores y golpistas tratando de generar condiciones para la subversión de la democracia, y la restauración del esquema de sumisión al Imperio y la instrumentación de las políticas neoliberales.

* Analista de asuntos políticos.