La vida pasada de Prigozhin, jefe del Grupo Wagner, como autor e ilustrador infantil

El líder del notorio grupo de mercenarios Wagner de Rusia, que cumplió nueve años de prisión por robo, interfirió en las elecciones estadounidenses y ha sido acusado de crímenes de guerra en Ucrania, no es alguien que se asocie habitualmente con la literatura infantil. Sin embargo, hace casi 20 años, Yevgeny Prigozhin, comúnmente conocido como el «chef de Putin» porque saltó a la fama al proporcionar servicios de catering al presidente ruso, escribió una divertida historia para niños. Con el título “Indraguzik”, un nombre inventado, el libro cuenta la historia de un niño pequeño y su hermana que viven con su familia dentro de un enorme candelabro de teatro.

Oficialmente, los autores de «Indraguzik» son los dos hijos de Prigozhin, Polina y Pavel. Sin embargo, el prefacio del libro, del que solo se imprimieron 2.000 ejemplares, afirma que la historia fue una colaboración entre Prigozhin, su hijo y su hija.

The Moscow Times adquirió una copia sobreviviente de «Indraguzik», que arroja una luz inusual sobre un hombre mejor conocido hoy en día por sus tácticas sangrientas en Ucrania, sus disputas con los principales generales rusos y, algunos especulan, sus ambiciones políticas. La historia en sí está ambientada en una tierra de «gente pequeña» que vive entre humanos comunes y sigue a Indraguzik mientras se cae de la lámpara de un teatro y trata de encontrar el camino a casa.

Según el prefacio del libro, Polina y Pavel sugirieron los nombres de los personajes principales y convencieron a su padre de “inventar una historia sobre un niño pequeño llamado Indraguzik y su hermana Indraguza”.

El Grupo Wagner de Prigozhin afirmó recientemente haber capturado la ciudad ucraniana de Bakhmut después de meses de sangrientos combates que costaron decenas de miles de vidas. En una entrevista a principios de este mes, Prigozhin, de 62 años, criticó amargamente al ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu, y a otros altos funcionarios, advirtiendo sobre una revolución al estilo de 1917 si la élite rusa no apoya con todo su peso la guerra en Ucrania.

Cuando «Indraguzik» fue publicado por la poco conocida editorial Agat en 2004, Prigozhin, quien pasó nueve años en prisión por cargos de robo en la década de 1980, dirigía un exitoso negocio de restaurantes en San Petersburgo. Entre sus clientes se encontraban Putin y otros futuros pesos pesados ​​de la política.

Dentro de su portada, el libro contiene una foto de un Prigozhin sonriente con sus hijos y su madre, Lyubov Prigozhina. Durante las aventuras de Indraguzik, mientras intenta encontrar el camino de regreso a la lámpara de araña, se encuentra con un elenco de personajes que incluye a otra «persona pequeña» llamada Gagarik, a quien se describe como un «hombre mayor con un pájaro y una gabardina hecha de tela áspera».

Gagarik cocina sopa para el niño, una posible referencia al negocio del restaurante Prigozhin. Eventualmente, Indraguzik termina en «Big City», donde se hace amigo de un niño humano, acertadamente llamado Big Indraguzik, que decide ayudar a su homónimo y encuentra un globo en el que puede volar de regreso a la lámpara de araña.

A lo largo del libro de 90 páginas, hay ilustraciones detalladas y atractivas que se atribuyen a Prigozhin, aunque no hay otra evidencia pública de las habilidades artísticas del líder de Wagner.

Más adelante en la historia, se descubre que el candelabro de la familia es mágico y capaz de agrandar a las personas pequeñas al tamaño de los humanos comunes. En una búsqueda para saber de dónde vienen, Indraguzik y sus amigos hacen un viaje a su tierra natal de Indroguzia, donde conocen a su rey.

En un intento por ayudar al rey, Indraguzik y sus amigos usan el candelabro para hacerlo más grande, pero calculan mal y se convierte en un gigante. “¿Cómo puedo gobernar a mi pueblo si es tan pequeño? Podría destruirlos por error. Por favor, hazme el mismo rey que fui. Solo un pequeño rey puede gobernar a los Indraguziks”, les dice el rey mientras suplica que lo devuelvan a su tamaño original.

Al final del libro, un breve poema describe la historia de las muchas aventuras de Indraguzik como «divertidas y extrañas».

Se cree que «Indraguzik» nunca se puso a la venta, sino que se entregó a los amigos y socios comerciales de Prigozhin como regalo. Los hijos de Prigozhin, con quienes escribió “Indraguzik”, aparentemente siguieron los pasos de su padre. Prigozhin ha dicho que su hijo Pavel, de 27 años, luchó por Wagner tanto en Siria como en el este de Ucrania.

Según los informes , su hija Polina, de 30 años, es propietaria de un hotel de lujo en San Petersburgo. Cuando se le preguntó sobre el abismo entre Prigozhin, el autor de libros para niños, y Prigozhin, el señor de la guerra, la psicóloga con sede en Moscú Karina Militonyan dijo a The Moscow Times que un hombre era capaz de «combinar todo tipo de personajes».

Algunos observadores creen que la crítica abierta de Prigozhin a los altos funcionarios significa que tiene ambiciones políticas y que podría reinventarse nuevamente como un líder civil.

El experto político ruso Konstantin Kalachev, que estaba familiarizado con “Indraguzik”, dijo que era una historia “bonita”. Describió a Prigozhin como alguien que ha evolucionado con el espíritu de la época en Rusia, pasando de convicto a autor de libros infantiles, amigo del presidente y líder mercenario.

“Es como un espejo de los tiempos”, dijo Kalachev.  “Es una persona diversa, que lucha por la autorrealización dentro de lo posible. Mientras ser bueno estuvo de moda, él era bueno. Pero luego llegó el momento del mal, y él se volvió malvado”.