Paro en Uruguay: El derrame, la aspiradora y la desigualdad
El martes 22 de agosto hubo paro general parcial de la central única de trabajadores PIT-CNT bajo la consigna: “Basta de humo. Contra el modelo de la desigualdad”. Y también contra la privatización de las empresas públicas y la defensa de la educación pública, laica y gratuita.
En Montevideo la concentración fue a las 10.00 en la explanada de la Universidad de la República (Udelar), desde donde salió una movilización por la avenida 18 de Julio -la arteria principal de la capital- hasta la sede del Ministerio de Economía y Finanzas. 
El presidente de la central sindical, Marcelo Abdala, estuvo a cargo de la oratoria y planteó una “plataforma amplia” con algunos puntos principales. Uno de ellos es la Rendición de Cuentas, en la que “lo que está sobre la mesa es cero para atender las necesidades de las y los trabajadores de todas las ramas de actividad”.
Otro de los puntos fue la postura de la central sindical en contra de las “políticas del gobierno de privatizar las empresas públicas” como OSE (agua), UTE (electricidad) y Ancap (combustibles). El PIT-CNT también se pronunció en la defensa de la educación pública y sobre otros aspectos.
“Es clara la posición del PIT-CNT. Nosotros vamos por empleo, por trabajo, pero no cualquier trabajo, tiene que ser trabajo de calidad. Es lo que necesitan trabajadoras y trabajadores para vivir dignamente. Se necesita una mayor redistribución de la riqueza con mayor justicia social, que es lo que no nos está sucediendo y lo que no está pasando a trabajadoras y trabajadores”, expresó Elbia Pereira, secretaria general Federación Uruguaya de Magisterio-Trabajadores de Educación Primaria (FUM-TEP) y secretaria general del PIT-CNT.
En relación a la decisión del PIT-CNT de promover un plebiscito contra algunos aspectos de la reforma de la seguridad social, la secretaria general dijo que “esto recién comienza”. “Esto es un proceso que se está llevando adelante para unificar efectivamente en una papeleta lo que el PIT-CNT entiende en esto regresivo de una reforma jubilatoria”, expresó.
Plataforma
El discurso de Marcelo Abdala fue de temas generales a los particulares, de cuestiones globales, internacionales y regionales hacia cuestiones nacionales y particulares. Luego se centró en el esquema desigualdad versus trabajo; la reducción de la jornada laboral; ajuste fiscal encubierto y la defensa de las empresas públicas.
“Estamos en la calle planteando una perspectiva que es de lucha y de esperanza. Naturalmente en momentos extremadamente complejos, en donde en cada momento se pone en tela de juicio la convivencia democrática y cuando aparecen algunos personajes en Europa occidental vinculados al fascismo, a la extrema derecha o más cerca: Donald Trump, Jair Bolsonaro o ahora Javier Milei, como falsos profetas que tienden a intentar sintetizar las contradicciones, los problemas de las necesidades de nuestra sociedad, de cambios estructurales”, apuntó Abdala.
“Ojo al gol, compañeras y compañeros, desde nuestro más profundo respeto y modestia de clase, también coadyuvan a que prosperen estos falsos profetas, cuando la sociedad pide transformaciones estructurales de fondo y los proyectos de cambio se quedan a medias tintas o hacen un acuerdo con el FMI, o no terminan de diversificar la matriz productiva, ni distribuir la riqueza, ni profundizar la Democracia.
Es decir, decepcionan y se quedan a medias tintas, también estos procesos con sus límites terminan alimentando a fuerzas oscuras y fascistas, donde nadie debe llamarse a engaño porque traen más explotación, más represión y más miseria para nuestros pueblos en América Latina”, afirmó.
Desigualdad versus trabajo
“Nuestro PIT-CNT planteo al actual Poder Ejecutivo la necesidad de impulsar un sistema de compras públicas para promover puestos de trabajo de calidad y aquí mismo, en el MEF se le dijo a la delegación obrera y si no que se me desmienta, que el gobierno no tenía equipo para hacer de locomotora de un proyecto de este tipo, que genera puestos de trabajo de calidad en la industria manufacturera, porque tienen esa concepción del Estado mínimo, del mercado y nada más, de la falta de inversión , de preocuparse si y solo si del llamado déficit fiscal despreciando el déficit humano que generan estas políticas que han extremado la desigualdad en nuestro país, porque es eso lo que viene predominando”, advirtió Abdala.
Lo que plantea Abdala se da en un contexto en el que el PBI ha aumentado y está por encima de los niveles de 2019, pero el salario real ha descendido, creció la pobreza en general pero sobre todo la pobreza infantil. Son más de 100.000 las personas que ganan menos de 25.000 pesos uruguayos y que engrosan las lista de 550.000 uruguayos y uruguayos que sobreviven mes a mes con sueldos de hambre.
Es decir, el país crece, las exportaciones son récord mes a mes, pero la teoría del derrame parece que no funciona, es un mito o el cuento del tío. Parece que más que derrame es la teoría de la aspiradora, aspirar de arriba hacia abajo, la transferencia de recursos de abajo hacia arriba. El anverso de esta realidad, la otra cara de la luna son los más de 3.000 millones de dólares en depósitos en bancos extranjeros por parte de empresarios. El país crece pero no hay distribución.
Jornada laboral
Entonces, si existen estas ganancias, ¿no hay forma de que haya trabajo para todos y a su vez se paguen salarios dignos más aún con el avance tecnológico? ¿O la oligarquía uruguaya seguirá empachándose hasta que en algún momento se rompa la cuerda?
“Esta causa no admite la menor demora y como un primer paso le hemos puesto el apellido de aspirar a la semana laboral de 40 horas semanales con pago de 48 horas para el conjunto de la población trabajadora. Desafiamos al debate público que sea necesario para que nuestro pueblo tenga todos los fundamentos claros de lo que consideramos es la principal ley laboral para aprobar en el futuro inmediato y nos pone en una ruta civilizatoria para una mejor calidad de vida de nuestro pueblo”, agregó Abdala.
Ante estos planteos, la derecha, ni lerda ni perezosa, lanzó a sus peones para oponerse a dicha reforma. El Ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres presentó un informe sobre la reducción de jornada laboral plagado de falsedades e inexactitudes. El diario El País lo publicó en portada mostrando que las conclusiones del informe “eran muy negativas”.
Ajuste fiscal
“Esta reforma jubilatoria del gobierno del gran capital es hasta ahora la principal y más brutal reforma de ajuste a los derechos, a los ingresos y a la vida de las grandes mayorías del pueblo trabajador. En caso contrario alguien nos debería explicar porque un asunto que nace en pretendidas dificultades de financiación en el BPS, cuando en 
versiones anteriores de sus gobiernos metieron a la comadreja al cuidado de las gallinas. Me refiero al capital financiero en las AFAP, en un escenario donde no deberían estar como la seguridad social que es un mecanismo de protección social y no de lucro”, resaltó Abdala.
“Nuestro PIT-CNT ha definido que vamos a utilizar mecanismos de democracia directa que nos permite la Constitución de la República, para no solo dar por tierra con esta reforma jubilatoria, sino para establecer una jubilación mínima para quien estuvo toda la vida trabajando, donde nos vamos a poder jubilar con 60 años o menos y vamos a erradicar el lucro y las AFAP de un sistema donde no deberían estar, como es la Seguridad Social. Y así abrirle el camino a una Seguridad Social para las grandes mayorías”, afirmó ante el aplauso de los presentes.
Si seguimos sumando: el aumento del costo de vida, la reducción del salario real, el crecimiento del empresariado pero que no se traduce en la vida cotidiana de las mayorías, hay que agregarle que la masa trabajadora uruguaya tendrá que trabajar 5 años más de su vida.
Defensa de las empresas públicas
“Rechazamos de manera contundente la privatización del portland. Rechazamos el decreto que cambia el mercado mayorista de la UTE, y lo vamos a pagar nosotros en la elevación de los precios de las facturas de la luz. Además, respaldamos a los compañeros de FFOSE (trabajadores de OSE) en medio de una crisis hídrica por falta de inversión del Estado, cuando le falta 1.000 trabajadores”, afirmó Abdala.
Abdala también envió el apoyo del movimiento sindical para los trabajadores y las trabajadoras de Acodike, afirmando que si así se decide van a presentar el caso de persecución sindical ante la OIT.
El desguace de las empresas públicas se inició a la par del nuevo gobierno en el 2020. A apenas quince días de asumido el nuevo gobierno, hacía gala de su proyecto y emitió un decreto que ajustaba el presupuesto estatal asignado para ese año en un quince por ciento.
Para muestra falta un botón y recientemente el Poder Ejecutivo firmó otro decreto donde habilita a que los privados se vendan energía entre sí, dejando de lado a la empresa estatal UTE.
Hoy en día, con la tercerizaciones (también aplicadas en el progresismo frenteamplista), desfinanciar las empresas, recorte, ajuste y no renovar plantillas, son formas más sutiles y menos agresivas para desmantelar las empresas públicas en vez de privatizarlas directamente como se quiso implementar en la década de los 90, donde por esas casualidades, el padre del actual presidente estaba al mando de ese proceso.
Hoy las intervenciones son más quirúrgicas, veladas y en privado. Cuando salgan a la luz…
Sobre la mesa
El 10 de agosto por la Mesa Representativa del PIT-CNT definió ir a un plebiscito para colocar vía enmienda constitucional, tres principios fundamentales en la Carta Magna. En los hechos, demuestra de modo concreto, la independencia y autonomía política del movimiento sindical.
Lo interesante del plebiscito sobre la reforma de la seguridad social y la reducción de la jornada laboral, coloca sobre la mesa y obliga al debate público a contrastar ideas sobre temas centrales y el núcleo del sistema capitalista: la contradicción capital-trabajo. Un debate que hace largo y tendido se ha esquivado, se ha postergado, se ha descartado.
Hoy retoma, vuelve y será cuestión de la clase trabajadora organizada traccionar para que se alcancen las mayores conquistas para el pueblo uruguayo ante el modelo de desigualdad planteado por el gobierno de Luis Lacalle, donde sus consecuencias (lamentablemente) trascenderán a su quinquenio de gobierno.
* Licenciado en Psicología, Universidad de la República, Uruguay. Miembro de la Red Internacional de Cátedras, Instituciones y Personalidades sobre el estudio de la Deuda Pública (RICDP). Analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)