Políticos y demás gente de mala vida
Alejandro von Rechnitz.*
Los políticos profesionales se parecen a las vacas en que pueden ser comprados, vendidos, prestados o cambiados. Es más, podemos ordeñarlos, destazarlos y hasta cortarles los cuernos. Nueve caracterizaciones de tan extraño animal.
– Hasta un político malo es preferible a un político profesional.
– Hay políticos profesionales peores que otros, pero sólo por comparación.
– El ideal del político profesional es: mente sana en puerco sano.
– El político profesional siempre tiene magníficas y certeras críticas para el poder que ejerce otro.
– Lo malo de que el político profesional duerma es que se despertará todavía más “fresco”.
– El político profesional alaba la bondad de otro ser humano sólo cuando esa bondad le permite hundirlo.
– El político profesional sólo se parece al agua en que se adapta a todo.
– La fuerza del político profesional está fundamentada en las debilidades de otros.
– El político profesional es incalumniable; todo lo que digas de él es verdad.
* En www.panamaprofundo.org