Reunión de los pueblos. – LAS MUJERES Y LOS TRATADOS DE »LIBRE» COMERCIO
Sin alterar un estilo cuasi coloquial, pero fuerte en sus contenidos y apegado a la realidad, el taller Las mujeres dicen no a la tiranía del libre comercio, representantes de diversos países latinoamericanos y europeos desnudaron en Lima la situación real y cotidiana que viven en sus países. El taller fue organizado por las organizaciones Marcha Mundial de las Mujeres (MMM), Red de Mujeres Transformando la Economía (REMTE), las mujeres de la Vía Campesina, la Agencia ALAI y Jubileo Sur.
Helena Pinto, de la Marcha Mundial de las Mujeres de Portugal, señaló que los acuerdos económicos entre la UE y América Latina reflejan una estrategia política de apertura de los mercados de la UE, como una forma de desregulación de los servicios en un marco provisto por el neoliberalismo, cuya expresión máxima es la precarización del trabajo y la reducción de los derechos laborales y ciudadanos.
«El discurso oficial de la Unión Europea de defensa del medio ambiente y respecto a los derechos humanos –dijo– debe ser deconstruido, ya que en realidad se destruye el medio ambiente y avanza en la perdida de derechos».
La delegada de REMTE Chile, Angélica Álvarez, informó acerca del impacto que significa sobre diversas actividades los acuerdos de libre comercio aprobados por su país, haciendo hincapié en que las consecuencias más nefastas es el deterioro de los servicios públicos que provocó la privatización de los entes públicos y la posterior fusión de las empresas resultantes. No olvidó, además que como producto de la firma de esos tratados se amplía un marco de represión a las dirigencias sindicales y la persecución y minusvalorización de las mujeres.
No menos sólidos fueron los argumentos de Leonor Aida y Maria Atilano de REDGE y MMM de México, país que como consecuencia del TLC –que lleva vigente más de una década– ve desaparecer su agricultura de medianos y pequeños campesinos, reemplazada por un sistema de agroindustria que imposibilita la soberanía alimentaria. México en la actualidad importa más del 60% de los alimentos que requiere su población –y que podría producir.
Preocupa, en el caso mexicano, el aumento del proceso migratorio a EEUU, producto de la precarización del trabajo y las condiciones de vida.
Las las mujeres aseguraron que seguirán resistiendo al modelo neoliberal por cuanto profundiza¡ la desigualdad y aumenta el poder de las transnacionales; llamaron a movilizarse y no caer en la trampa de intentar negociar cláusulas dentro de los acuerdos con el objetivo de que atenúan los impactos que producen, ya que ello es a todas luces imposible.
Se ha dado un paso significativo para la articulación de los movimientos femeninos entre América Latina y Europa.
———————————–
Más información se puede encontrar en: