Si quieres comunicar, te silencian. Los privilegios del poder
Rivera Westerberg.
En octubre de 2007 el gobierno chileno anunció que, finalmente, se tomaban medidas en apoyo a la tarea cultual y de educaciòn popular que realizan las radios comunitarias. Para ello se teatralizó en uno de los patios de La Moneda el funcionamiento de una emisora. Dijo entonces Bachelet que una ley a discutirse en el Congeso "va a permitir entregarle un apoyo fundamental a las radios comunitarias, de manera de poder avanzar en su tarea". En agosto de 2009 se puede escuchar, más abajo, algo distinto.
En la oportunidad también señalo que la iniciativa buscaba "apoyar esta valiosa tradición de radiodifusión comunitaria, que durante muchos años trabajaron fuertemente, pero escuché muchas veces las quejas, bajo severas restricciones en términos de cobertura y, además, de sostenibilidad". Explicó, en este contexto, que la idea de este proyecto de ley "es hacerse cargo de esta situación y reparar condiciones desmedradas que muchos han tenido".
Y pese a que la presidente dijo que el gobierno mantendrá los programas de apoyo a los medios de comunicación, especialmente en regiones, hoy las radios comunitarias están bajo fuego. Quizá la aseveración de la primera quincena de octubre –Bachelet vestida de tan coqueto como discreto color rosa– en el sentido de que "Este año hemos más que duplicado el Fondo de Medios, superando el millón de dólares para proyectos comunicacionales, donde más del 60% está dirigido, efectivamente, a la radiodifusión", se perdió en cuanto a sus alcances, devoradas sus intenciones por la todo pderosa ARCHI, asociación que nuclea a la radioemisión comercial.
Al respecto una información del tres de agosto corriente del periodista Rcrdo Salazar, de Radio Universidad de Chile:
Procedimientos policiales han suspendido las transmisiones de emisoras de locales y de mínima cobertura en Valparaíso, Santiago y Lota por querellas presentadas por la ARCHI. Los afectados acusan ataque a la libertad de expresión por parte de empresarios del dial (…) Por esta vía ya se ha cerrado Radio Autónoma Sin Tierra de Villa La Reina y dos emisoras en Lota.
“Interpretamos que en esta nueva acción represiva, las policías actúan por mandato de privados. Rechazamos la criminalización implícita que conlleva un procedimiento policial contra ciudadanos. Reivindicamos nuestro derecho a entregar comentarios, noticia, luchando contra el monopolio de los medios de comunicación que niegan espacios de identidad y libertad. Llamamos a nuestros auditores, a los comunicadores audiovisuales a no dejarse amedrentar. Denunciamos el reprochable actuar de ARCHI y anunciamos a la comunidad, que resistiremos el embate de las policías por acallar la señal”, manifestaron desde Radio Placeres de Valparaíso.
En el Diario Oficial se publicó una resolución de la Subsecretaría de Telecomunicaciones, que oficializa la exclusión de localidades en los próximos concursos de radiodifusión sonora, principalmente para las regiones de Valparaíso, de O´Higgins y del Bío Bío. Es decir, no habrá posibilidad de optar a una concesión radiofónica de mínima cobertura en estas zonas.
“Las principales ciudades del país, particularmente Valparaíso y Santiago, tienen copada su capacidad de emisoras en el espectro radioeléctrico. Es decir en el dial no se encuentra más espacio para que pueda entrar una nueva emisora sin generar interferencias o algún tipo de efecto nocivo con las que ya existen. Además, está la obligación legal a evitar que se produzcan interferencias”, argumentó (con poco donaire, decimos) el subsecretario de Telecomunicaciones, Pablo Bello.
El texto completo se encuentra aquí.
Quienes hacen posible la existencia de Radio Placeres, de Valparaíso, emitieron un comunicado previo a su paso a la misma clandestinidad en que las radios comunitarias operaban cuando la dictadura; tiene una duración de 4.19 minutos y se lo encuentra Aquí.
Como corresponde a gente interesada en la democratización integral de la vida social, los candidatos "top" de la farandulizada política criolla no han dicho esta boca es mía.
Addenda
Para mayor abundamiento, ve en este portal el articulo de la periodista Paulina Acevedo Chile: las radioemisoras comunitarias son el enemigo.