SIGUEN LOS EFECTOS DE LA AGRESION INTERNACIONAL A EVO MORALES

El tema de la agresión de países europeos, promovida por Estados Unidos, a Evo Morales, vinculada a la situación de Edward Snowden, ex-agente de la CIA norteamericana, sigue produciendo efectos de muy diversa naturaleza.
Luego de la Reunión de Cochabamba, donde varios presidentes suramericanos se solidarizaron personalmente con su colega Evo Morales y condenaron esta insólita agresión, se produjeron otros pronunciamientos. Uno fue el de la OEA, condenando el hecho y pidiendo a los gobiernos europeos de España, Francia, Italia y Portugal que le den las explicaciones del caso al gobierno de Bolivia. España y Francia intentaron desligarse del hecho manifestando errores de funcionarios menores o malas interpretaciones. Italia se sintió ofendida porque el avión que conducía a Evo, no cumplió los horarios. En  fin…

En la reunión del MERCOSUR también se produjo una condena explícita a ese hecho y se anunció que llamaran a sus embajadores. Dicho sea de paso, esa reunión del MERCOSUR fue presidida por Venezuela, recientemente ingresada. Bolivia confirmó su ingreso y Ecuador avanzó en la misma dirección. Paraguay, en cambio, se podría reincorporar a partir de la asunción del nuevo gobierno el 15 de agosto, sin embargo el mandatario entrante cuestiona la presencia y presidencia de Venezuela. También se hizo un formal pedido de explicaciones al gobierno estadounidense por los casos de espionaje a los gobiernos de la región y el caso sería llevado al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.

En cuanto a la situación del ex agente de la CIA, Venezuela hizo lugar a su pedido de asilo, mientras se analiza de qué modo podrá arribar a Venezuela Snowden manifestó que acepta todos los ofrecimientos de asilo y que –por ahora- aceptará el de Rusia. Mientras tanto Robert “Bob” Menéndez, el senador norteamericano que preside el Comité de Relaciones Exteriores del Senado norteamericano amenazó con “serias implicancias políticas y económicas” a los países que ofrezcan asilo a ese ex agente de la CIA. El Presidente Barack Obama, de un modo más diplomático, dijo lo mismo.