Teatro Colón de Buenos Aires: una masacre cultural de Macri&Cía.
Trabajadores del Teatro Colón
¿Quién gobierna Argentina? Pasamos por radicales, peronistas,desarrollistas, liberales, militares.. Pero, evidentemente nuestra historia sigue siendo diseñada en otro sitio. ¿Qué quedaba por destruir?: El Teatro Colón, con más de 100 años de historia cultural, escala obligada de todo artista lírico para confirmar su consagración mundial. Y en eso están el intendente municipal Mauricio Macri y su gente, denuncian los trfabajadores del centro cultural.
La historia argentina como país es indignantemente cíclica. Siempre nos encontramos con los “vende-patrias”, que
arruinan años de trabajo y perfeccionamiento argentino:
Nos quedamos sin trenes nacionales, sin sus talleres de producción, sin su mano de obra especializada,
bajo pretexto de ser deficitarios.
Nos quedamos sin nuestra aerolínea de bandera y sus rutas aéreas, con las consecuencias vergonzosas y carísimas que día a día pagamos. Nos quedamos sin petróleo, sin gas, para que España se enriquezca durante años: somos de los pocos países en el mundo que perdimos semejantes recursos sin disparar un solo tiro!
Actualmente con la vigencia de las leyes menemistas, las multinacionales canadienses y yanquis nos despojan del oro y la plata. Grandísimas extensiones de tierras patagónicas tienen dueños italianos, yanquis, ingleses y demás, incluyendo lagos, fuentes naturales de agua y glaciares.
El Colón es uno de los pocos sitios "sagrados" de la cultura, donde brillaron Richard Strauss, Nureiev, Ricardo Muti , Thomas Beecham, Galina Ulanova, Witold Malcunsisky, Claudio Arrau, Ana Pavlova, Alfredo Kraus, Plácido Domingo, Arturo Toscanini,G. Puccini, Fedor Chaliapin, Luciano Pavarotti, Darío Volonté Paloma Herrera, Julio Bocca y tantos otros.
Poco sobrevivió a la embestida privatista de los 90´, el Colón fue uno de los ejemplos, gracias a la decisión inalterable de sus cuerpos estables que impidieron su privatización, promovida entre otros por el Director Técnico de ese momento, Juan Carlos Greco.
Luego de una larga lucha devastadora, Greco fue expulsado de la institución, por decisión unánime de los trabajadores
Hasta que apareció el Proyecto Master Plan (2003) conducido por la arquitecta Silvia Farge, quien con la excusa de realizar una restauración edilicia, promovió una nueva estafa al pueblo argentino.
Esta restauración se tornó destructiva, a partir de la gestión de Mauricio Macri en la Intendencia de la ciudad, cuando se implementó la desintegración de las salas de ensayo, de los talleres de producción, desmantelamiento del escenario, entre otras atrocidades, con un presupuesto millonario que triplicó al original.
Hoy, en los distintos subsuelos que dicha sala posee, donde históricamente se desarrollaba la producción de los espectáculos líricos, nos encontramos con una enorme cantidad de escombros, semejante a un bombardeo.
Haciendo una breve proyección nos damos cuenta que la propuesta de Macri y García Caffi es muy "inteligente": como no pueden echar al artista lo mandan a realizar tareas que poco tienen que ver con su trayectoria profesional, lo que indica que en pocos meses se muere de tristeza, de infarto o renuncia.
De esa manera Macri y García Caffi (dos elefantes en una cristalería) hacen su brillante negocio y se ahorran el dinero del despido, sumado a que elimina de esa manera un cargo estable de la municipalidad ganado legalmente por concurso internacional! ¡Oh casualidad!, los dirigentes de los trabajadores, están entre los “nominados”.
¡Oh casualidad!, el gran asesor escenotécnico del
“Master Plan” es el Sr Juan Carlos Greco, el ex director técnico expulsado del Teatro Colón, que hoy, por lo visto se tomó una revancha privatista. Quedamos 808 trabajadores que todavía pertenecemos a este teatro o lo que queda de él. Nuestra condición actual es la siguiente:
Desde enero, el teatro está cerrado y tapiado y no podemos ingresar. Estamos en la calle. La programación de obras líricas a desarrollarse en otros lugares, como el Teatro Coliseo es mínima y no está confirmada.
No disponemos de una oficina de personal y fiscalización, donde constarían nuestras asistencias, no tenemos garantizados los sueldos.
No tenemos Director Técnico, puesto que el que recién había asumido renunció inmediatamente al argumentar que no puede trabajar por la desintegració n del personal de talleres de vital importancia en el desarrollo de la puesta escenotécnica.
No sabemos ni donde ni cuando debemos presentarnos a trabajar, estamos totalmente desprovistos de información, nos reunimos semanalmente en las veredas del Teatro, estamos en asamblea permanente pero las autoridades del gobierno de la ciudad no nos reciben.
Nuestro Director, el Sr. García Caffi, nos basurea públicamente diciendo que debe trasladar personal porque “el Colón no es un seguro de desempleo, y no puede apilar trabajadores en los pasillos del teatro”…
Nos despedimos con la convicción de seguir adelante solos, silenciados, más viejos y mucho más tristes, pero con la esperanza de que por lo menos sepan que hicimos todo lo posible por defender nuestro Teatro, nuestras familias, nuestra cultura……Y no nos daremos por vencidos, ¡ni aún vencidos!