La histeria parece general en diversos países: que el cometa Elenin se alineará con la Tierra y el Sol mañana martes (27 setiembre), y que ese fenómeno desatará terremotos. Y que hasta el mundo estará en peligro.
Lo cierto es que en otras ocasiones la —relativa— cercanía del cometa coincidió con sismos de envergadura.
Un astrónomo suramericano, sin embargo, Arturo Gómez, declaró a un medio chileno especializado en informaciones (Radio Bío Bío) que nada hay que temer, que el Elenin se desintegró en el espacio hace semanas.
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