Trump salió de la “cueva” y conmovió a la dirigencia mundial
Donald Trump está culminando su primera y prolongada gira internacional. Ella fue cuidadosamente planificada y refleja los aspectos centrales de la actual política internacional de los Estados Unidos. En ella, además de lo político, se mezclaron aspectos religiosos, militares y económicos. En lo religioso, visitó a los sitios claves de las tres grandes religiones monoteístas. Estuvo, con los musulmanes en Arabia Saudita, en Israel con los judíos y con el Papa católico en Roma. En lo militar participó, en Bruselas, en la reunión de la alianza militar occidental de la OTAN. Sobre la cuestión económica, tomó parte del G 7 en Sicilia, allí estuvieron representantes de los 7 países más industrializados.
Hay que destacar que la gira empezó con Arabia Saudita –un reino islámico- y determinante para el surgimiento del ISIS, cuyo aniquilamiento fue una de las bases de la campaña de Trump. Siguió en Israel su más fiel aliado internacional y el “hogar del pueblo judío”. Además de su alianza política con el Estado de Israel el sabido el poder que ejercen miembros de esa comunidad en las finanzas de los Estados Unidos y de todo el mundo. De su reunión con el Papa expresó: “No olvidaré lo que dijo”. En la OTAN criticó a los líderes europeos porque no cumplen con su compromiso de aportar el 2% del PBI al gasto militar, pidió que Europa pague por los gastos militares porque los contribuyentes norteamericanos no pueden seguir cargando con los mismos. En Sicilia en la reunión del G 7 reculó en su defensa del proteccionismo económico y aceptó firmar una declaración contra el mismo.
Juan Guahán