El gobierno venezolano lo calificó de una “amenaza temeraria y grave” contra el país. “Asume que el petróleo, tierras y riquezas mineras de Venezuela son de su propiedad (…) pretende imponer de manera absolutamente irracional un supuesto bloqueo militar naval con el objetivo de robarse las riquezas (…)”. El texto llama al “pueblo de los EE UU y a los pueblos del mundo” a “rechazar” esta “extravagante amenaza que devela una vez más las verdaderas intenciones de Trump de robarse las riquezas” de Venezuela.
La vicepresidenta Ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, zseñaló que “los buques petroleros vinculados a las operaciones de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) continúan navegando con pleno aseguramiento, respaldo técnico y garantías operativas”. «Se les cayó la careta, la verdad verdadera es que quieren el petróleo sin pagar un centavo», añadió. “Si quieren nuestro petróleo tienen que pagarlo”, insistió.
El Gobierno de Venezuela afirmó que la industria petrolera
mantiene sus operaciones de exportación de crudo “con normalidad”, mientras la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) se pronunció en rechazo a las nuevas sanciones emitidas por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos en conjunto con la Unión Europea y el Reino Unido. «Estas burdas maniobras no hacen más que fortalecer nuestras convicciones de dignidad, honor y autodeterminación… No seremos plataforma para la dominación. Somos territorio de paz»; se lee en el comunicado.
El Departamento de Estado de EE.UU. había negado dos días atrás que el petróleo haya desempeñado un papel fundamental en el envío por parte de las fuerzas estadounidenses de más de una docena de buques de guerra y 15.000 soldados a la región caribeña, o que el petróleo esté detrás de las advertencias del presidente Donald Trump de que podrían producirse ataques terrestres inminentes y de que los aviones deben evitar el espacio aéreo venezolano, y afirmaba que sus amenazas militares forman parte del esfuerzo de EE.UU. por detener los flujos de migrantes indocumentados y drogas ilegales procedentes de Venezuela.
Aunque la principal justificación para la ofensiva estadounidense contra Venezuela ha sido la lucha contra el narcotráfico, hace mucho tiempo que Trump ha declarado públicamente su interés por apropiarse de las reservas petroleras de Venezuela.
Es célebre su discurso de 2023, cuatro años después de fracasar en su primer intento de derrocar a Nicolás Maduro, en el que dijo: “Cuando me fui, Venezuela estaba a punto de colapsar. Nos habríamos apoderado de ella, habríamos conseguido todo ese petróleo, habría estado justo al lado”. Y agregó: “Hubiera sido justo. Pero ahora compramos petróleo a Venezuela. Estamos haciendo a un dictador muy rico. ¿Pueden creerlo?, nadie puede creerlo”.
La mayoría de la gente asocia las grandes reservas de petróleo con Medio Oriente o Texas, pero Venezuela cuenta con una enorme reserva de 303.000 millones de barriles de crudo, lo que supone una quinta parte de las reservas mundiales, según la Administración de Información Energética de Estados Unidos. Se trata de la mayor reserva conocida de crudo del planeta. El potencial de Venezuela supera con creces su producción actual: produce un millón de barriles de petróleo al día, que solo representa alrededor del 0,8 % de la producción mundial de crudo.
Estados Unidos produce crudo ligero y dulce, que es bueno para fabricar gasolina, pero no para mucho más. El crudo pesado y ácido, como el de Venezuela, es crucial para determinados productos que se fabrican en el proceso de refinado, como el diésel, el asfalto y los combustibles para fábricas y otros equipos pesados. El diésel escasea en todo el mundo, en gran parte debido a las sanciones impuestas al petróleo venezolano.
Las sanciones
La campaña de Trump contra Maduro también está enfocada en el petróleo
En público, la Casa Blanca dice que se enfrenta a Venezuela para frenar el narcotráfico (el país no produce drogas), pero Trump ha hecho patente su interés por el acceso al 17 por ciento de las reservas mundiales de petróleo conocidas, casi cuatro veces la cantidad que tiene Estados Unidos.
Agradecida por ser galardonada con el Premio Nobel de la Paz, María Corina Machado hizo su presentación por video en directo en una conferencia empresarial en Miami a la que asistieron ejecutivos y políticos, entre ellos el presidente Trump. “Estoy hablando de una oportunidad de 1,7 billones de dólares”, dijo en inglés , tras destacar las enormes reservas de petróleo y gas de Venezuela: “Vamos a abrir todo, upstream, midstream, downstream, a todas las empresas”, así como su infraestructura minera y energética, dijo. tras resaltar el “infinito potencial” de su país para las empresas estadounidenses en un pódcast presentado por el hijo mayor del presidente, Donald Trump Jr.
América Latina no puede seguir siendo objeto de este tipo de burdas agresiones que solo buscan saquear sus riquezas naturales pasando sobre el derecho internacional y el dolor y el sufrimiento de los pueblos.
Resumen de los anuncios clave:
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó el “bloqueo total de los petroleros sancionados” que entren
y salgan de Venezuela. El mandatario republicano ha despejado este martes las pocas dudas que podían quedar sobre el interés de su país en el petróleo venezolano como parte de la ofensiva contra el Gobierno de Nicolás Maduro, que venía justificando únicamente como una guerra como el narcotráfico. Trump ha argumentado en un mensaje en su red social que el fenomenal despliegue militar estadounidense en el Caribe continuará “hasta que [el chavismo] devuelva a los Estados Unidos de América todo el petróleo, las tierras y demás activos que nos robaron”.
Este nuevo paso tiene una sola lectura: es una manera de asfixiar las vías de financiación de Venezuela, que depende de la venta de petróleo a varios países -entre ellos China- para sortear las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos que asfixian la economía venezolana.
El gobierno de Venezuela calificó las palabras de Trump de una “amenaza temeraria y grave” contra el país. “Asume que el petróleo, tierras y riquezas mineras de Venezuela son de su propiedad (…) pretende imponer de manera absolutamente irracional un supuesto bloqueo militar naval con el objetivo de robarse las riquezas (…)”. El texto llama al “pueblo de los EE UU y a los pueblos del mundo” a “rechazar” esta “extravagante amenaza que devela una vez más las verdaderas intenciones de Trump de robarse las riquezas” de Venezuela.
Unos 18 petroleros bajo sanciones del Departamento del Tesoro de Estados Unidos, completamente cargados de petróleo, se encuentran en aguas venezolanas y están siendo monitoreados por Washington. Ocho de ellos están clasificados como buques de carga de gran tamaño, similares al Skipper, que fue incautado por Washington la semana pasada. El gobierno de Donald Trump planea decomisar esos petroleros si llegan a adentrarse en aguas internacionales.
Las compañías recién sancionadas por el Departamento del Tesoro estadounidense son propietarias de petroleros con banderas de las Islas Marshall, Panamá, Hong Kong o las Islas Cook, señalados por Washington de valerse de prácticas engañosas para ocultar su ubicación, ya sea omitiendo su ubicación o transmitiendo una falsa. Son los llamados buques fantasma que continúan transportando petróleo venezolano, sobre todo, a Asia. En referencia a uno de estos barcos, el H. Constance, el Departamento del Tesoro señala que “ha manipulado repetidamente sus transmisiones para ocultar su ubicación y carga de petróleo venezolano”.
El Departamento del Tesoro anunció sanciones contra seis superpetroleros que, según documentación interna de PDVSA y datos de seguimiento marítimo, cargaron crudo recientemente en Venezuela. Estados Unidos ejecutó más de 20 operaciones armadas en el Caribe y el Pacífico en los últimos meses, con un saldo superior a 80 muertos en acciones que constituyen ejecuciones extrajudiciales. Sin prueba alguna,, Washington sostuvo que actuó contra organizaciones narcotraficantes calificadas como terroristas.
«El ilegítimo régimen de Maduro está utilizando el petróleo de estos yacimientos robados para financiarse, así como para el narcoterrorismo, la trata de personas, el asesinato y el secuestro”, continúa el mensaje del mandatario estadounidense. “Por el robo de nuestros activos y por muchas otras razones, incluyendo el terrorismo, el narcotráfico y la trata de personas, el régimen venezolano ha sido designado como o extranjera. Por lo tanto, hoy ordeno un bloqueo total y completo de todos los buques petroleros sancionados que entren o salgan de Venezuela”.
El agravamiento de la tensión en torno a Venezuela podría conllevar consecuencias imprevistas para todo el hemisferio occidental, según advirtió este miércoles el director del Departamento de América Latina del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Alexánder Schetinin. «Esperamos que los responsables de la tensión actual que se está generando en torno a Venezuela logren evitar que la situación siga empeorando, lo que podría tener consecuencias impredecibles para todo el hemisferio occidental, y que no cometan ningún error», afirmó .
Asimismo, el gobierno español ha asegurado que si bien apoya la prioridad de combatir el narcotráfico y la delincuencia organizada con instrumentos jurídicos y policiales, apuesta por un enfoque «colectivo y multilateral» y de respeto al derecho internacional.
*Sociólogo y analista internacional, Codirector del Observatorio en Comunicación y Democracia y analista senior del Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)
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