Venezuela: corregir, aprender, confiar en el pueblo
Néstor Francia.*
La impopularidad del racionamiento eléctrico, y particularmente de la manera en la que se instrumentó, era evidente. Afortunadamente Chávez lo notó pronto y no le tembló el pulso para echarlo atrás. La otra noticia relacionada me la describió un amigo con una metáfora un poco cruel, aunque también ingeniosa: al ministro Angel Rodríguez, Chávez le apagó la luz.
Pero los errores no solo hay que corregirlos, también hay que aprender de ellos. Algo parecido ocurrió con el tema del horario de los centros comerciales, problema que se hubiese evitado si se consulta antes y no después. En aquel caso, por cierto, tuve noticia de que hubo protestas inclusive de consejos comunales. Hay que cambiar el estilo verticalista y burocrático. Hay que incrementar la participación de las organizaciones populares en la evaluación de las situaciones y en la búsqueda de soluciones.
El pueblo anda “pateando” las calles, sin escoltas, sin aparato, así que puede contribuir enormemente con el conocimiento que tiene de su propia sensibilidad. Claro que también debe haber participación importante de expertos en los temas (¿Lo era Angel Rodríguez en el suyo?). De esa simbiosis de saberes surgirían mejores decisiones y se evitarían algunas contramarchas.
Esta idea nuestra es distinta a la que propuso Fedecamaras. Después de saludar la rectificación del gobierno, la cúpula empresarial planteó al Ejecutivo nombrar una comisión nacional de expertos, independientemente de su ideología política, que ayuden a encontrar una solución al problema. Por supuesto, por la mente de los oligarcas no pasa la idea de que en esa comisión estén presentes también los consejos comunales y otras organizaciones populares.
De todas formas, hoy contrastaban los titulares escandalosos de algunos periódicos criticando el racionamiento con aquellos que daban las más recientes y buenas noticias. Es positivo mostrar capacidad de rectificación y seguramente la gente lo agradece.
La trifulca de los opositores en dos municipios del Zulia (que incluyó violencia y heridos entre militantes de AD, UNT, COPEY y Primero Justicia, es una metáfora de la situación real de la “mesa de unidad”. Si así se baten por la elección de las directivas de los concejos municipales, que se puede esperar de la selección de centenares de candidatos a la Asamblea Nacional.
* Analista de asuntos políticos.