Venezuela: se investiga golpe de Estado de 2002
El fiscal encargado, Danilo Anderson, interrogó a los directivos del canal de noticias Globovisión para conocer sobre una supuesta reunión en la que se había definido la política informativa del nuevo gobierno.
El presidente de Globovisión, Guillermo Zuloaga, reconoció haberse reunido con Carmona el 13 de abril de 2002, pero negó que se definieran allí estrategias, «la política informativa de los medios privados no la fija el gobierno» aseguró.
En aquel momento dijimos que no considerábamos que un propietario, socio o dueño de un medio de comunicación debe ser ministro, sino alguien que no estuviera comprometido con un medio».
La víspera acudió el director del canal, Alberto Federico Ravell, quien dijo a los medios su versión sobre el encuentro que se investiga.
«Allí no se trazó ningún tipo de política informativa. No es costumbre de los medios de comunicación privados democráticos de Venezuela recibir instrucciones de gobierno alguno», enfatizó Ravell.
Testigos, por ahora
El fiscal que encabeza la investigación, Danilo Anderson, aclaró que hasta ahora no hay acusados por el caso sino testigos, pero que podría haberlos en los próximos días. «Si se está declarando como testigo no hay ninguna imputación de ningún hecho punible (…) No hay elementos probatorios ni de convicción que arrojen la necesidad de una imputación».
En el transcurso de la semana deberán comparecer los directivos de los canales Radio Caracas Televisión y Venevisión, y los editores de los diarios El Nacional y El Universal.
Esta semana también empezó la citación de al menos 400 personas que firmaron el decreto único del gobierno de Carmona Estanga. Se espera que la mayoría sea acusada del delito de rebelión civil.
Historia revuelta
El 11 de abril del 2002, una nutrida marcha opositora fue agredida cuando se aproximaba al palacio presidencial de Miraflores, en el centro de Caracas. 21 personas murieron. Aunque se desconoce aun la identidad ni la filiación política de los francotiradores, un sector de la Fuerza Armada Nacional pidió la renuncia del presidente Hugo Chávez, a quien responsabilizaron por la masacre.
Tras varias horas de incertidumbre y desinformación la madrugada del 12 de abril, el Gral. Lucas Rincón anunció en cadena de televisión que «ante la gravedad de los hechos» se le había solicitado la renuncia de su cargo al presidente «la cual aceptó».
Pedro Carmona Estanga, entonces jefe de la patronal Fedecámaras, se encargó de un «gobierno de transición», gobierno que habría de durar menos de 48 horas. El propio Carmona comprometió su estabilidad con el único decreto que pudo emitir. En él suspendió la Asamblea Nacional, al Fiscal y Contralor General, y a los alcaldes y gobernadores.
Los analistas interpretan que Carmona se salió del marco constitucional, lo que catalizó la acción de fuerzas que se enfrentaban, entre la opinión pública y en los cuarteles.
En las calles, cada vez más partidarios del presidente Chávez exigían «pruebas» de la renuncia, o en caso contrario su regreso al poder. En el sector militar, un grupo se opuso al gobierno «inconstitucional» de Carmona y eventualmente logró reponer al gobierno depuesto.
Muchos analistas creen que el Gral. Lucas Rincón debería ser citado a declarar por la fiscalía sobre el caso, pues fue él quien oficializó la supuesta renuncia del presidente.
———————————
Publicada en: http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/latin_america/newsid_3718000/3718810.stm