Buenos Aires – Luanda: «Gracias Lanata, gracias»
Según el periodista Jorge Lanata, la Argentina no debería vender nada a Angola. El conductor de un programa de TV del grupo Clarín, hace exhibición de la pobreza existente en el país africano e intenta demostrar que, tan necesitado, no puede comprar nada a la Argentina. Angola, empero, tiene relaciones comerciales normales con la Unión Europea y otros Estados.| LUIGI LOVECCHIO.*
Para convalidar la idea, visita una feria en un barrio pobre de la ciudad, al tiempo que muestra —allá, a lo lejos, por contraste— las zonas más lujosas de Luanda, capital del país.
Acompaña el recorrido con comentarios sobre la escasez de productos para el consumo de los angoleños.
Siempre dirigiéndose a las cámaras comenta que todo es importado en Angola. Interroga a la vendedora:
—¿La carne es importada?
—Sí …—le responde
—¿Los pollos?
—Los pollos, los huevos —responde la señora.
—¿Los huevos también, de donde?
—De Holanda, de Francia, de Inglaterra —le responde a cada objeto que levanta como muestra.
Se comprende que a Angola le venden de toda Europa y Estados Unidos; todo el mundo hace sus negocios de momento que el país no tiene producciones propias, pero sólo en la Argentina los medios locales insinúan que vender a ese país es un ejercicio sin sentido.
Lanata, en su afán para poner en negativo una iniciativa de gobierno, descuida su relato y, de manera involuntaria, de pronto está explicando las mejores razones para las cuales Argentina le debe vender sus producciones a Angola.
El espectador, a su vez, puede comprender que es sumamente importante que nuestro país compita en los mercados con los proveedores europeos para comercializar sus productos. La Argentina tiene los precios más convenientes por sobre los costos en euro de las producciones industriales de de Europa, casi seis veces más onerosas comparándolas con el peso, la moneda argentina.
En cuanto a la argumentación sobre régimen dictatorial y derechos humanos, queda claro que los negocios no conocen necesariamente esas fronteras. Ángela Merkel, Sarkozy y otros dirigentes políticos del orden internacional visitaron Angola y estrecharon lazos comerciales con el hombre que rige los destinos de ese país.
Deberíamos decir, entonces, gracias Lanata por ilustrar —incluso con su carga de odio a cuestas cuando habla de este gobierno— las profundas razones que ponen al país a competir con los mejores proveedores internacionales.
Argentina saca ventaja en función de una política monetaria acertada. Ni el canal oficial del estado, Canal 7, hubiese sido tan eficiente en la difusión de tantas ventajas comerciales que tienen nuestras relaciones con Angola.
Gracias Lanata, gracias.
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* Periodista.
En Los Buenos Vecinos. El programa a que se hace referencia se emitió el 20 de mayo de 2012.
Juan, con todo respeto,
a Angola viajaron para negocios Angela Merkel de Alemania, Sarkozy, de Francia, Lula de Brasil, El presidente de portugal que no recuerdo el nombre, Hilary Clinton de EEUU, eso sí, no es presidenta.
Efectivamente Angola no es la peor dictadura, hay otras que se llaman «democracias» e invaden países mintiendo las razones, matando millones de personas inocente para apropiarse de sus bienes. Hay que considerar a Angola como un Estado que debe fortalecer sus estructura sociales y para eso, sacarlas del tremendo sub desarrollo. Todos los países arriba mencionados van para sacar plata y hacer negocios, excepto la Argentina que junto al intercambio comercial le insegna a los angoleño a producir por su propia cuenta lo que ahora compran por necesidad. Saludos.
Lo que se resalta, ante todo, es el doble discurso que el gobierno presenta.Cristina en 2008 recibió al presidente de Guinea Ecuatorial, un tipo que, «casualmente», lleva la misma cantidad de años en el poder que el presidente de Angola. En esa ocasión Cristina le dijo que dicho país cuenta con una cantidad abundante de recursos hidrocarburíferos, pero… que también tienen una política en materia de DDHH que deja mucho que desear (palabras más, palabras menos, eso fue lo que dijo CFK). No es el caso de, por ejemplo, Brasil, que tiene un discurso bien marcado (sobre todo durante la presidencia de Lula). Y, para terminar, basta con citar los dichos del canciller golpista, Héctor Timerman que, el lunes, en 678 [un programa periodístico y de análisis en la TV abierta argentina] dijo que «Angola no es la peor dictadura, es ridículo». Sobran ejemplos del doble discurso en cuanto a este tema, con respecto a este gobierno. Pero bueno, la información hay que saber interpretarla.
Y voy a acotar algo más.¿Qué presidente viaja a un país para cerrar acuerdos de intercambio comercial? ¿Usted conoce alguno? Que yo sepa, para eso están los ministros , secretarios de cartera, etc. Vamos, somos gente grande….saludos.
Muy buena la nota. El final, muy gracioso. Terminar dando las gracias a Lanata, me pareció genial.
La brilantez de este comentario, breve y conciso, de Luigi Lovecchio avergonzaría a cualquiera, Menos eso sí, a Lanata y otros varios ‘clarinistas’ dasaforados. Aníbal.