Los dioses no quieren irse

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A pesar de la noticia de la “muerte de Dios”, que a gritos proclamaba el loco en el mercado, los grupos evangelistas, entre otros, han venido experimentando una impresionante resurgencia en las Américas, particularmente en Brasil y Estados Unidos, en donde han logrado configurar una fuerza política capaz de influir en la elección de presidentes y representantes políticos, que no es poca cosa.

Según el Instituto de Investigación de Religión Pública de Estados Unidos los evangélicos son los grupos más prejuiciosos del país. En el índice de racismo obtienen el 78% y postulan una cosmovisión que pone a los cristianos por encima de las otras religiones, a los hombres por encima de las mujeres y a los blancos por encima de toda otra etnicidad. Las otras denominaciones no están demasiado lejos de este modelo.120 años de la muerte de Nietzsche, el profeta de la muerte de Dios

¿Por qué mantenemos a los dioses en lugar de abandonarlos? Los estudios bioculturales de la religión sugieren que la tendencia de los humanos a presuponer “agentes sobrenaturales” cuando se enfrentan con hechos sorprendentes es lo que contribuyó, en gran medida, a la cohesión, mejoramiento de la cooperación y la competitividad de los primeros grupos humanos.

Las investigaciones en campos tan diversos como las ciencias cognitivas, la biología evolutiva, la arqueología, la psicología experimental y la antropología cultural han venido mostrando que las concepciones de agentes sobrenaturales surgen y se trasmiten fácilmente en las mentes humanas como resultado de características seleccionadas naturalmente en la era del paleolítico.

Desde los últimos 70 mil años hemos sido portadores de dioses como resultado de la integración de mecanismos cognitivos heredados que nos predisponen a sobre detectar formas similares a las humanas en el entorno natural. Cuando la sobrevivencia dependía de la rápida percepción de depredadores o de presas, estos mecanismos fueron una enorme ventaja en la lucha por la existencia. Esta hipersensibilidad a formas o fuerzas intencionales similares a las humanas ayudaron a la rápida detección de enemigos y amenazas.

Ejemplos de Antropomorfismo y Concepto -【 Ejemplos.cc 】Según el antropólogo Stewart Guthrie, el antropomorfismo es la falsa interpretación de un fenómeno ambiguo al que se le da una forma o fuerza similar a la humana. El antropomorfismo religioso, la atribución de cualidades humanas a los dioses, surge primariamente debido a la atribución de cualidades humanas al mundo.

La incertidumbre perceptual y la necesidad de encontrar agentes relevantes en el ambiente son los progenitores de todas las religiones, no importa la diversidad de creencias y prácticas que puedan tener. Las recientes investigaciones de las ciencias cognitivas han apoyado estas hipótesis agregando un mayor conocimiento a la complejidad y poder de los sistemas inferenciales que conducen a la detección de dioses.

Nuestros ancestros constantemente se encontraban en situaciones en las que no había tiempo para reflexionar. La rapidez era una cuestión de vida o muerte, de comer o ser comido. Uno de los sistemas cognitivos más conocido y probado que dotó al ser humano con una importante ventaja en el paleolítico fue el “dispositivo hipersensible de detección de agencia”. En la época de la caza y recolección esta hipersensibilidad para detectar peligros claramente fue un mecanismo que proveyó una ventaja selectiva.

Este dispositivo es el que proyecta la “agencia” a fenómenos ambiguos tales como sombras, formas, movimientos, ruidos inesperados, sueños, enfermedades, anomalías climáticas o cualquier cosa difícil de explicar. Automáticamente lleva a inferir que un agente oculto en ellos, sea el espíritu desencarnado de un animal o un antepasado, es el responsable de sus acciones.

Una vez que el humano imagina que ha detectado un agente, inmediatamente teoriza que éste tiene estados mentales y emocionales similares a los humanos. Las recientes investigaciones transculturales sugieren que estas diversas tendencias cognitivas predisponen la mente humana hacia las creencias religiosas que siguen un orden particular. Primero la mentalización, luego el dualismo de la mente y el cuerpo, seguido finalmente por la teleología. Qué es la teleología? - La Mente es Maravillosa

La promiscuidad antropocéntrica sirvió bastante bien a nuestros antepasados en la preservación y evolución de la especie. Las investigaciones bioculturales indican que el compromiso cooperativo dentro de las coaliciones sociales en el paleolítico mejoraron inmensamente gracias a la intensificación de estas creencias compartidas y al compromiso ritual con dioses potencialmente punitivos.

El lado oscuro de la cohesión social del grupo, sin embargo, ha sido hasta hoy el antagonismo con los que poseen una identidad diferente.

¿Tiene todo esto algo que ver con las crisis ecológicas, económicas y sanitarias que hoy estamos viviendo? La detección de agentes súper naturales ciertamente ayudó a las civilizaciones humanas a emerger y mantenerse unidas, pero ahora pareciera que es el momento de cuestionar estos valores si queremos adaptarnos a las condiciones que el Antropoceno nos presenta.

Si un gran número de la población creyente tiende a pensar que los huracanes y las sequías son actos de Dios o que no necesitamos máscaras ni vacunas para protegernos de la pandemia porque la fe en El Todopoderoso nos inmunizará, ellos pondrán menos atención y tenderán a descalificar los reportes de las investigaciones científicas.

En una entrevista de la revista New Scientist el renombrado naturalista y biólogo E. O. Wilson expresó que el pensamiento religioso nos está tirando hacia abajo y que, en aras del progreso, lo mejor sería disminuirlo o eliminarlo.

La religión y el estilo de vida europeo • José Antonio MarinaLa religión, ciertamente, ha ayudado a mantener unidas a las sociedades, ha proporcionado un sentido de la vida a las personas y ha fomentado la producción de grandes obras artísticas. Pero, al mismo tiempo refuerza los prejuicios que conducen constantemente a interpretaciones erróneas de los fenómenos naturales y fomenta el antagonismo hacia los grupos externos.

En los últimos años los estudiosos del cambio climático, por ejemplo, han venido dirigiendo su atención cada vez más a la relación entre religiosidad, afiliación religiosa e ideas religiosas especificas y las actitudes y comportamientos hacia los informes sobre los desafíos y peligros ecológicos.

Según las investigaciones de Morteux y Barnet, publicadas en Global Enviromental Change, cuando a los habitantes de las islas Tuvalu se les preguntó porqué no habían emigrado debido al aumento del nivel de las aguas, consistentemente respondían que de acuerdo a la historia bíblica de Noé, Dios no iba a permitir más inundaciones en el futuro.

En un reporte del 2013 acerca del papel de las religiones en la Amazonia brasileña, publicado en Journal of Rural Studies, Otsuki concluye que una de las consecuencias de la popularidad de la Iglesia Pentecostal de la Asamblea de Dios en las zonas rurales fue el mensaje cristiano de disfrutar de la prosperidad terrestre convirtiendo la foresta en municipalidades y participando en la promoción de la acumulación capitalista.Autoridades cubanas confiscan iglesia pentecostal en La Habana

La evidencia experimental sugiere que la gente menos religiosa y más analítica tiende a ser más crítica frente los prejuicios religiosos. En una encuesta que examina la relación entre el apego al lugar, las creencias ideológicas y las actitudes al cambio climático, Devine-Wright y sus colegas encontraron que los con más apego global son mayormente mujeres, jóvenes y sin creencias religiosas.

Hope y Jones en un estudio comparado de cristianos, musulmanes y seculares publicado en el 2014 en Technology in Society, encontraron que la falta de urgencia en la percepción de la crisis ecológica entre cristianos y musulmanes se debía a las creencias en la vida después de la muerte y la intervención divina.

Los participantes seculares que carecían de estas creencias, en cambio, mostraron un mayor foco en la responsabilidad humana y en la necesidad de acción. Igualmente las resistencias durante la actual pandemia a usar máscaras y a las medidas sanitarias recomendadas por los servicios de salud provienen mayoritariamente de los grupos evangélicos, especialmente en EU y Brasil.

Si un gran número de personas interpreta los fenómenos naturales como la desaparición de forestas, el aumento de la temperatura o el deshielo polar como actos divinos inevitablemente pondrán menos atención a los informes científicos acerca del cambio climático…

La Segunda Venida y El Cielo: La Tierra Nueva, Un Lugar Real - Parte 2 ¿Para qué angustiarnos por esto si Dios, de todas maneras, va a crear una nueva tierra? ¿Para qué preocuparnos acerca de la desigualdad económica y la explotación de los países en desarrollo si Cristo retornará a la Tierra en el día del Juicio Final y los pecadores y herejes serán despachados al infierno?

Esta política basada en la fe exhibe el espíritu vengativo del Antiguo Testamento, la interpretación literal de la Biblia y el antisecularismo pluralista. Ciertamente se podría decir que no todos los creyentes creen en estas fantasías. Muchos de ellos están profundamente preocupados por el cambio climático y el consumo capitalista y su concepción de Dios no promueve la superstición ni la segregación.

Las investigaciones sicológicas transculturales, sin embargo, indican que no importa lo que la elite intelectual y la clase sacerdotal puedan decir: la vasta mayoría de los creyentes regulares naturalmente sigue los prejuicios dirigidos hacia la detección de espíritus, santos y fuerzas intencionales.

Las creencias en dioses y agentes incorporales súpernaturales proveyeron una ventaja en la sobrevivencia de nuestros ancestros junto con la mantención de complejas sociedades iniciándose en el Neolítico y siguiendo en las sociedades posteriores. Hoy día, junto con el capitalismo corporativo, ellas están contribuyendo a la degradación del ambiente global del que todos dependemos.

Kant, al igual que los humanistas renacentista, decía que la religión, a menudo, le impide al ser humano alcanzar su máximo potencial al mantenerlo en la inmadurez y en la dependencia sacerdotal, en los autodenominados guías espirituales y en los políticos de todo tipo que instrumentalizan estas creencias.

E. O. Wilson en su libro El Sentido de la Existencia Humana argumenta que la vida humana puede ser más simple de lo que pensamos. No hay predestinación, no hay misterios insondables de la vida. Los demonios y los dioses no compiten por nuestra lealtad. Lo cierto es que nosotros nos hacemos a nosotros mismos, independientes, solos y frágiles.

Eterna Cadencia - La cultura y la muerte de DiosUna especie biológica adaptada para vivir en un mundo biológico. Lo que cuenta para la supervivencia a largo plazo es la autocomprensión inteligente, basada en una mayor independencia de pensamiento que la que hoy toleramos, incluso en las sociedades democráticas más avanzadas.

¿Seria posible eliminar la fe religiosa? Probablemente no. La anunciada “muerte de Dios” ha tenido bien poco efecto en la trayectoria sacerdotal. Los silogismos tienen mucho menos fuerza que los lazos emocionales.

Lo que al parecer puede ocurrir es que los compromisos imaginativos con los dioses lentamente empiecen a disolverse a medida que las nuevas generaciones encuentren, poco a poco, que no es necesario el uso de estas estrategias adaptativas. Abandonar a los dioses puede predisponernos a la construcción de hipótesis más plausibles y estrategias axiológicas más factibles.

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