Chile a la derecha, Haití ocupado, política económica de Venezuela: nublado con amenaza de tormentas
Néstor Francia.*
Estados Unidos ocupó de facto, prepotente y militarmente Haití sin escuchar los reclamos internacionales: impidió el aterrizaje de un avión hospital; Chile eligió un presidente de derecha como castigo a la Concertación; en Venezuela Chávez toma al toro por los cachos: ministros a terreno para oír al pueblo y especuladores quizá a a cárcel.
El anuncio de Chávez aumentando el salario mínimo en 25% es una señal de cómo se manejará la difícil situación económica, en medio de la crisis mundial del capitalismo, para el año 2010. El gobierno revolucionario hará un gran esfuerzo por salvaguardar los intereses de los más pobres, y eso es parte de las medidas económicas y una de las principales razones del establecimiento del cambio dual. No solo se quiere privilegiar las principales necesidades del pueblo (alimentación, salud, educación) con el dólar a 2,60, sino también obtener más ingresos para seguir apoyando el área social y el bienestar general de los desposeídos. Es la impronta de nuestro gobierno y lo que garantiza que se mantenga el apoyo popular a la revolución.
Otras declaraciones de interés ha dado Chávez, una de ellas reivindicando los valores marxistas: “El marxismo es, sin duda, la más avanzada propuesta hacia el mundo que Cristo vino a anunciar hace más de 2.000 años. Es el reino de la paz, del amor, el reino humano”. Es parte de cómo elpresidente ha venido transformando su pensamiento desde aquellos tiempos en que hablaba de la inexistente Tercera Vía. Solo acotamos que el marxismo es ciertamente una propuesta, pero sobre todo un método para analizar la historia y la sociedad: el materialismo histórico.
Por otra parte, nos alegra que el presidente ratifique opiniones nuestras que hemos vertido en estos informes apenas despuntaba el año. El 12 de enero señalamos que son necesarias “…leyes más severas, que castiguen duramente el acaparamiento, la especulación y todas las manifestaciones delictivas del comercio donde solo impere el afán de lucro. Que un comerciante tenga que pensarlo dos veces antes de ponerse a robar a los consumidores. Que ese tipo de delitos contemplen penas que pudieran significar la cárcel o la ruina para los especuladores y los acaparadores. Frente a estas manifestaciones de los acendrados vicios capitalistas no se puede ser débil”.
El presidente ha dicho: “No podemos esperar que los comerciantes capitalistas suban los precios, eso tenemos que frenarlo y eso lo frenamos con el modelo socialista. Estoy leyendo una propuesta de ley para expropiar a los comerciantes inescrupulosos, aún no me convence, yo lo que quiero es una espada. Nada de multas, eso es una tontería, porque es un robo al pueblo. Samán, yo no quiero seguir con esto de clausurado por un día. Vamos a expropiar para que tu veas que se acaba ese problema”.
También dijimos el 14 de enero: “Hay que cambiar el estilo verticalista y burocrático. Hay que incrementar la participación de las organizaciones populares en la evaluación de las situaciones y en la búsqueda de soluciones. El pueblo anda ‘pateando’ las calles, sin escoltas, sin aparato, así que puede contribuir enormemente con el conocimiento que tiene de su propia sensibilidad”. Chávez hizo un llamado a sus ministros a salir de la oficina, dejar el aburguesamiento y “coger calle con la gente”:
“Señores ministros, vamos al ataque. Vamos a formar los Concejos o Comités de Justicia Socialista y a trabajar en un área, a buscar todas esas anormalidades. Por eso es que es importantísimo, que trabajemos junto al pueblo, porque esa información la tiene el pueblo, no las computadoras en las oficinas”
Haití ocupado por Estados Unidos
Las cosas hay que llamarlas por su nombre: se ha producido una invasión de Haití por parte del imperialismo norteamericano, tomando como excusa el devastador terremoto. Ya nuestro Presidente criticó la “ayuda” estadounidense y exhortó a los yanquis a enviar médicos en lugar de marines: “Obama, manda médicos, medicina, comida, no militares, chico…Estados Unidos se aprovecha de lo que dejó el terremoto para ocupar Haití”.
Por su parte, el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, acusó a Estados Unidos de aprovechar la tragedia que vive Haití tras el terremoto del pasado martes para instalar sus tropas en el país: “A mí me preocupa seriamente lo que está aconteciendo en Haití”, porque “se está manipulando un drama para instalar tropas norteamericanas en Haití, que ya han ido tomando el control militar del aeropuerto en Puerto Príncipe y esto es preocupante…Parece que no son suficientes las bases militares y quieren aprovechar esta tragedia del pueblo haitiano para instalarse en Haití y yo quiero denunciar esto”
Los primeros soldados de la 82ª División Aerotransportada de Estados Unidos se desplegaron el viernes en el principal aeropuerto de Haití. Ante esto, continuó diciendo Ortega: “No tiene ninguna lógica que tropas norteamericanas estén desembarcando en Haití. Si lo que Haití está pidiendo es ayuda humanitaria, no está pidiendo tropas. Sería una locura que todos empecemos a enviar tropas a Haití…Espero que retire las tropas, porque al ocupar Haití está ocupando Estados Unidos territorio latinoamericano y caribeño”
El Pentágono anunció que unos 10.000 efectivos serán movilizados en Haití en los próximos días, aunque muchos permanecerían en una flota de naves de la Marina cerca de la costa y comandada por el portaaviones USS Vinson.
Los soldados de Estados Unidos se desplegaron en el principal aeropuerto de Haití el viernes, desatando escenas de ira cuando intentaban controlar a una desesperada muchedumbre que buscaba abandonar el país. “Atrás, atrás. No quiero ser grosero, pero usted tiene que apartarse”, gritó un soldado mientras un oficial francés intentaba conducir a un grupo de ciudadanos franceses hacia la terminal aérea.
“Sólo pasaporte estadounidense, sólo pasaporte estadounidense”, repetía en francés un frustrado funcionario del Departamento de Estado, mientras los refugiados haitianos se comenzaban a agolpar en una zona dispuesta para los ciudadanos estadounidenses que podían esgrimir el excluyente pasaporte azul. Los soldados se instalaron en el aeropuerto y tomaron control de la entrada a la terminal, donde comenzaron a filtrar a los portadores de pasaportes estadounidenses de entre la multitud de cientos de frustrados refugiados que pedían salir.
Hubo confusas y en ocasiones enojadas escenas de diplomáticos no estadounidenses que buscaban extraer a sus propios ciudadanos de la multitud para conducirlos a aviones de rescate que esperaban en la pista. Al principio, tropas estadounidenses y funcionarios del Departamento de Estado hicieron retroceder a diplomáticos franceses que intentaban llevar a 64 nacionales al primero de los tres aviones destinados a sacarlos del país. “Sólo estamos estableciendo puntos de control”, explicó el sargento Kelab Barrieau, quien además indicó, con prepotencia imperial, que “Estamos preparados para permanecer por el tiempo que sea necesario, probablemente 60 días, pero si se requiere más tiempo, estaremos allí para ayudar”
Ante esta situación, Francia protestó oficialmente ante Estados Unidos sobre la gestión del aeropuerto de Puerto Príncipe, donde se impidió aterrizar a un avión hospital francés, según declaró el sábado el secretario de Estado francés para la Cooperación, Alain Joyandet.
También la Comunidad del Caribe (CARICOM) presentó una protesta tras la imposibilidad de que llegara a Haití una misión humanitaria de esa organización de los estados caribeños no hispanoparlantes. La misión, encabezada por varios jefes de Gobierno de la región y el Secretario General de CARICOM, no obtuvo permiso imperial de aterrizaje en el Aeropuerto de Puerto Príncipe. Igualmente Brasil protestó por el manejo arbitrario que Estados Unidos ha hecho del control del aeropuerto haitiano.
Tras el terremoto, reuniones (pero excluyentes)
Entre tanto, el ministro de Relaciones Exteriores canadiense Lawrence Cannon, indicó que países donantes para la reconstrucción de Haití se reunirán el próximo 25 de enero en Montreal: “La reunión en Montreal será una oportunidad para evaluar la situación en Haití y asegurarse de que Naciones Unidas pueda centrar sus esfuerzos en la mejor manera de ayudar al pueblo haitiano a enfrentar los desafíos y prepararse para una estabilización y reconstrucción a largo plazo”.
Venezuela es también donante y deberíamos exigir nuestra presencia en esa reunión, y desde allí denunciar la invasión norteamericana a Haití y exigir el retiro de las tropas. Ante la real situación de ingobernabilidad y de grandes dificultades que presenta Haití después del desastre, se podría presentar propuestas concretas y alternativas, como que el control del aeropuerto lo tome la misión de estabilización de la ONU en Haití (MINUSTAH), desplegada en 2004 y actualmente formada por 6.000 militares y 2.200 policías de 16 países. Eso sería un mal menor, tomando en cuenta que el pueblo haitiano necesita repuestas rápidas y en esa situación podríamos hacer algunas concesiones momentáneas, y además impedir que Estados Unidos establezca esa cabeza de playa en el Caribe, lo cual es su verdadera intención.
Chile, cabeza de playa de la derecha internacional
El derechista Sebastián Piñera resultó electo presidente de Chile. La derecha internacional ahora refuerza su contingente latinoamericano constituido básicamente por México, Panamá, Costa Rica, Honduras, Colombia, Perú y Chile.
Lo de Chile demuestra que el pueblo no se conforma con las migajas de la socialdemocracia. El gobierno de Bachelet, como todos los de la Concertación, aplicó políticas neoliberales excluyentes, manteniendo vivos todos los principios de la decadente democracia representativa. El del pueblo chileno fue un voto castigo.
* Analista de asuntos políticos.