Educación y redes sociales
Desde hace algunos años es un lugar común deplorar la velocidad con que se transforma nuestro cosmo, por motivos técnicos. El mundo de hoy es tecnológico. Actualmente, la explosión de conocimientos es tan amplia y veloz, que no se puede redactar un gran volumen sobre una materia científica o humanística, porque cuando lo finalizas, está fuera de tiempo: recientes datos, nuevos descubrimientos, lo harán inoperante. Es decir, que ahora la ciencia depende de los artículos periodísticos, de internet y las redes sociales, no solo de los libros. La educación es una obra de largo aliento.
Si bien es cierto que las modernas tecnologías y redes sociales, pueden abrir un mundo diferente en el proceso de la enseñanza-aprendizaje, el primer obstáculo a superar, es la relación profesor-alumno que da la educación presencial. La cual está enmarcada dentro de una larga tradición, desde hace casi mil años.
La educación a distancia, indudablemente puede cumplir la función de impartir conocimientos, pero solo la instrucción supervisada y presencial puede dar cuenta de su capacitación y de su progreso, dándole cierto grado de seguridad y confianza en su poder de de observación.
La tecnología no es solamente la aplicación de métodos y técnicas modernas a la enseñanza, es un cambio radical de sistemas, para el cual, los profesores no han sido capacitados. Ellas forman parte de un proceso complejo que se ocupa del análisis, la planificación y la adaptación de esos conocimientos y destrezas. Con la tecnología educativa el pedagogo, debería, además, de enseñar, analizar programas y evaluar los medios educativos.
En términos generales, si la educación a distancia piensa coexistir con la educación presencial, el profesor tiene que recibir entrenamiento en el uso de las modernas tecnologías, para que pueda ser más agradable en el proceso de enseñanza-aprendizaje, sin los obstáculos y limitaciones que tenemos actualmente y por cierto son muchos Las tecnologías, jamás podrán sustituir al maestro, por más que las tendencias recientes traten de dirigir los esfuerzos en la dirección opuesta.
Hoy en día, la tecnología ha revertido sobre la educación un avance a pasos agigantados. El hecho de que llegue a la educación con tanta fuerza, es el resultado de una sociedad dependiente a todos los niveles de los diferentes avances técnicos.
Las redes sociales han ganado un espacio importante en los ámbitos laborales, personales e incluso en lo educativo, por esta razón no podemos dejar de lado su influencia hacia los estudiantes, el objetivo es volverse un agente activo y no pasivo de estos medios, es decir, que cada uno de los alumnos que acceden a estas plataformas lo vean como un espacio de aprendizaje o de biblioteca digital que ayude a fomentar y distribuir información de manera responsable, esta labor se debe realizar con los profesores y la familia ya que sin el apoyo de cada uno de los entes es imposible obtener un cambio en el uso de las mismas.
El profesor, J. M. Pérez-Barco, en su artículo publicado en el diario ABC en 2013, ¿A qué edad hay que regalarle el primer móvil a un niño? señala lo siguiente: «Los niños españoles tienen en sus manos estos dispositivos a edades muy tempranas y de forma generalizada». Y es que en datos del Instituto Nacional de Estadística de España, 2014, tres de cada diez niños de 10 años poseen un celular. A los 12 años disponen de esta herramienta el 69%, y a los 14, el 83%.
Normalmente, explica J.M Pérez-Barco, “el motivo por el que el niño recibe el smarphone es debido a la presión social que reciben en el aula. A los doce años, el paso de la primaria a la secundaria supone una revolución. A esas edades se forman grupos de amigos en el Whats App (el servicio más utilizado por los adolescentes). Si el chico no tiene móvil está fuera de ese canal de comunicación”.
Pero esto entraña algunos riesgos: que el alumno dedique demasiado tiempo al móvil dejando de lado el estudio y a riesgo de incumplir las actividades diarias. Aunque lo peor es ser víctima del ciberbulling, imágenes comprometidas, entre otras amenazas.
-En definitiva, -afirma-, hoy en día la educación viaja de la mano junto a la tecnología camino de una sociedad inmersa en las herramientas electrónicas para realizar cualquier acción aunque, para los padres responsables del uso de estas tecnologías supone una gran responsabilidad dadas las consecuencias negativas que pueden provocar en el contexto social del alumno”.
El siglo XXI, está considerado como la “era digital”, de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación, han influenciado notablemente los procesos de enseñanza-aprendizaje.
El aprendizaje pasa de ser un proceso individual, a ser uno social, mediante el uso de las herramientas colaborativas, tales como:
El blog cuyas aportaciones a la educación son descritas por el profesor Fernando González Santamaría, en su trabajo: “Herramientas colaborativas para la enseñanza, usando tecnologías web y redes sociales”, publicado en 2014, señala entre otras ventajas:
- Son excelentes herramientas para la alfabetización digital, ya que permiten la familiarización con todos los componentes de un blog (blocgroll, categorías, trackback ).
- Aportan distintos niveles de redacción y escritura, si se toman como si fueran una redacción periodística.
- Permiten valorar nuevas formas de aprender, con lo que algunos autores han llamado la lecto-escritura.
- Son herramientas colaborativas asíncronas que potencia la cohesión del grupo y la interacción profesor-alumno.
- Permiten disponer de un espacio para encontrar fuentes documentales (web grafías y bibliografías) para el área de conocimiento.
- Facilitan la actualización de contenidos constante mediante la sindicación (RSS/ATOM). De esta manera, el profesor puede tener acceso a todas las actualizaciones de los alumnos, tanto las nuevas como las más antiguas.
Wikis: son sitios web que permiten la construcción colectiva del aprendizaje, en los cuales los participantes pueden editar la información creada por otros, ver el historial de las participaciones y construir colectivamente un documento.
“Twitter en el aula”, El profesor Ramón Besonias, 2008, describe en su blog algunas de las potencialidades del uso de Twitter en el aprendizaje.
Periscope: La BBC Mundo, en 2015, escribe un artículo de cómo tener un recurso para la modalidad presencial o a distancia, haciendo un streaming de vídeo disponible para los usuarios y sus contactos.
El proyecto Facebook, en educación, nace de la idea de realizar un programa de ayuda, en el cual se estudia una plataforma, que permita la participación entre estudiantes. Como resultado de este análisis se elaboraran textos escritos y trabajos audiovisuales. Dentro de los objetivos, se resalta el experimentar con nuevos proyectos de enseñanza-aprendizaje dirigido al trabajo participativo, generar conocimiento de forma colectiva, y estimular las habilidades tanto técnicas como sociales de los participantes, las cuales son necesarias en la sociedad actual.
Ning: es otra plataforma para la creación de redes sociales, según el Informe Horizon Edición Iberoamericana 2010. Es un entorno en el cual se integran comunidades de docentes e investigadores en áreas especializadas y de desarrollo profesional.
Para que las redes sociales tengan una finalidad pedagógica es necesario que tengan la posibilidad de crear redes cerradas, conformadas por grupos que pueden convertirse en comunidades de práctica, o aprendizaje.
Bibliografía consultada
J. Pérez Barco. 2016. “A qué edad hay que regalarle el primer móvil a un niño”. 2016
Fernando González Santamaría. 2014 “Herramientas colaborativas para la enseñanza usando tecnologías Web, redes sociales”.
Ramón Besonias. 2008. “Twitter en el aula, Blog.”
BBC Mundo: 2015
Piscitelli, A; Adaime, I. 2010 “El proyecto Faceboock y la pos Universidad Madrid. Fundación Telefónica.”
Gómez, Rosas y Farías. 2010 “El uso académico de las redes en universitarios”. Revista científica de Eudocomunicación.