El proceso de la instrucción pública

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No alcanzó José Carlos Mariátegui a vivir 50 años; empero, su personalidad y pensamiento no se puede obviar en el estudio del desarrollo de las ideas solialistas y el desenvolvimiento de las corrientes marxistas en América Latina. El escritor y periodista –fundemantalmente ensayista– y dirigente político peruano nace en Moquegua en 1894 y fallece en la misma localidad en 1930. Se consideran sus Siete ensayos de interpretación de la realidad peruana, de 1928, como la estructura principal de su obra.

Muy joven obtiene una beca –suerte de ostracismo encubierto, forma más o menos común de los gobiernos latinoamericanos de la época para librarse, al menos temporalmente, de opositores molestos de cierta estatura intelectual, que los demás eran metidos en prisión o asesinados; con el paso de los años la derecha arrojaría al dep´çosito de los desperdicios esa delicadeza y los matará sin más.

En Italia casó con Anna Chiappe y participò en la ocupación de las fabricas en Turín y en el Congresos del Partido Socialista Italiano, donde se produce la escisión histórica y se conforma el Partido Comunista de ese país. Es en este período que  asume el marxismo como método de interpertación de la sociedad. Son los días del ascenso de Musolini, y Mariátegui piensa que el facismo alfrente del gobierno es el precio a pagar por las contradicciones de la izquierda.

En 1923 regresa a Lima. Retoma el contacto con Víctor Raúl Haya de la Torre, futuro líder del APRA y viaja a México en calidad de exiliado. Posteriormente rompe con el APRA. En 1924 debió amputarse una pierna; en 1926 fundó la revista Amauta (en quechua sabio o maestro). Fue puesto en prisión en 1927 durante el proceso contra los comunistas, pero luego le dieron arresto domiciliario.

En febrero de 1930 Eudocio Ravines es elegido Secretario General del Partido Socialista del Perú, en remplazo de Mariátegui que se aprestaba para ir a Buenos Airespara intervenir en las delberaciones del Consejo General de la Liga Antimperialista y buscar remedio a sus males de salud. La muerte lo alcanza antes de emprender ese viaje.

Sobre educación, dice:
"Tres influencias se suceden en el proceso de la instrucción en la República: la influencia o, mejor, la herencia española, la influencia francesa y la influencia norteamericana
(…)
"La historia de la instrucción pública en el Perú se divide así en los tres períodos que señalan estas tres influencias. Los límites de cada período no son muy precisos. Pero en el Perú éste es un defecto común a casi todos los fenómenos y a casi todas las cosas. Hasta en los hombres rara vez se observa un contorno neto, un perfil categórico. Todo aparece siempre un poco borroso, un poco confuso.
(…)
"La educación nacional, por consiguiente, no tiene un espíritu nacional: tiene más bien un espíritu colonial y colonizador. Cuando en sus programas de instrucción pública el Estado se refiere a los indios, no se refiere a ellos como a peruanos iguales a todos los demás. Los considera como una raza inferior. La República no se diferencia en este terreno del Virreinato".

El libro, por cortesía de la Biblioteca Logos lo encuentra
aquí, donde también encontrará enlaces a otros del autor.

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