La libertad de expresión en crisis (II)

Aparecida en la revista Piel de Leopardo, integrada a este portal.

A 18 años del crimen de José Carrasco Tapia, el último periodista asesinado por la dictadura de Augusto Pinochet, reaparecieron en Chile las amenazas de muerte contra la gente de prensa. Mónica Guerra, reportera de El Mercurio, y Francisco Martorell, director del quincenario El Periodista, recibieron un correo electrónico anónimo que les «notifica» la pena máxima «por atentar contra la comuna de Quilicura y pretender dañar el trabajo municipal».

Las amenazas contra la vida de periodistas reintrodujeron en el país suramericano una práctica corriente en la región, Asia, África y el oriente de Europa. En Iraq, Filipinas, Rusia, Bangladesh, Skri Lanka, Bosnia y numerosas otras naciones se amenazan y asesinan periodistas con frecuencia. De 14 asesinatos de comunicadores sociales ocurridos en América Latina y el Caribe en 2004, 13 están asociados a mafias ligadas a poderes políticos y económicos locales.

El origen de la amenaza
y el medio empleado

Quilicura es una comuna de los suburbios de Santiago donde los informadores amenazados investigaban presunta corrupción en el poder municipal; la jefa municopal es Carmen Romo Sepúlveda, del partido Demócrata Cristiano (PDC). El contenido de la amenaza revela que ambos periodistas fueron vigilados ilegalmente para establecer sus domicilios, y que los que les enviaron el correo tienen los números de las placas de sus automóviles, conocen las respectivas rutinas hogareñas y la vida cotidiana de sus hijos.

Según investigaciones preliminares independientes, el mensaje habría sino enviado desde una cuenta de correo electrónico denominada Moriran Periodistas, creada en un computador con conexión a la internet de una empresa -ajena a los hechos- ubicada en pleno centro de la capital chilena. La dirección física corresponde a un edificio construido en los años 60 del siglo XX, que sirviera como sede del PDC y vendido con posterioridad parcialmente a terceros.

La empresa que actualmente ocupa la mayor parte del inmueble aseguró que investigará si uno de sus empleados utilizó algún computador para emitir la amenaza. La Policía de Investigaciones deberá establecer quien fue el autor del mensaje y las razones de su emisión.

fotoUn municipio oscuro. No es la primera vez que surgen amenazas de muerte vinculadas a Quilicura. La periodista Jacmel Cuevas también fue amenazada en 2002 mientras investigaba otros actos de corrupción en el mismo municipio por cuenta del portal de noticias Terra.cl.

Esta «condena a muerte» evoca los fatídicos comunicados que hacía circular la Triple A en la Argentina de los años 70, cuando era presidenta Estela (Isabel Martínez de Perón y José López Rega se había constuituido en el hombre fuerte detrás del trono.

La amenaza. El siguiente es el texto de la amenaza intimidatoria contra Guerra y Martorell, reproducida con las faltas de ortografía del original:

—– Original Message —–
From: moriran periodistas
To: nacional@mercurio.cl ; prensa@orbe.cl ; prensa@upi.com ; comercial@elperiodista.cl ; info@elmostrador.cl

Sent: Wednesday, September 01, 2004 3:26 PM
Subject: periodistas chilenos condenados a muerte

Por atentar contra la comuna de Quilicura y pretender dañar el trabajo municipal de nuestra comuna han sido condenados a muerte los siguientes periodistas.

1) Francisco Martorell de el Periodista.
2) Mónica Guerra del Mercurio.

cuidense por que nadie se mete en quilicura, pretender intervenir y sale sin ningun daño. esto que le sirva de advertencia a cualquier otro imbecil que se las quiera dar de periodista investigador y piense que no se puede averiguar la direccion de su casa, la patente del vehiculo o la direccion de hijos, sobre todo si son separados.

Estos huevones sensacionalistas les va a pasar algo muy feo, ojala los demas aprendan.

Gente de Quilicura.

fotoAsesinados por el poder local

Las amenazas y asesinatos de periodistas que denuncian corrupción en el poder local constituyen «el pan de cada día» en los municipios, prefecturas, ayuntamientos, gobernaciones o como se llamen las instancias del poder local, no sólo de América Latina sino en todo el mundo, incluida Rusia. Sólo en este mes de septiembre dos periodistas latinoamericanos fueron asesinados por esa lógica de los sindicatos del crimen amalgamados por la corrupción, el tráfico de drogas, la usurpación de tierras y otros «negocios» del poder local. Un asesinato ocurrió en Venezuela y el otro, en República Dominicana.

Según fuentes de la Comisión Investigadora de Atentados a Periodistas (CIAP) de la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP), en los casi nueve meses transcurridos de 2004 se han registrado 14 asesinatos de periodistas en América Latina y el Caribe, prácticamente todos asociados a denuncias periodísticas sobre corrupción y abuso de poder local en medios locales. La única excepción es el periodista español Ricardo Ortega, baleado en Haití mientras cubría la ocupación de ese país por las tropas extranjeras que desalojaron del poder a Bertrand Aristide.

Este año han ocurrido hasta dos crímenes el mismo día o en la misma semana y en el mismo país, con más de una muerte por mes y sin que exista ninguna guerra en la región. El periodismo radiofónico es uno de los más golpeados, en particular las emisoras locales y radios comunitarias. Por primera vez se asesinó a un periodista en Honduras y también se puso término a la vida de una reportera de 33 años de un país «tranquilo», como se considera a Costa Rica, una suerte de Suiza latinoamericana sin fuerzas armadas.

fotoLos asesinatos de 2004

14-09-2004: Juan Andújar, hombre de radio y corresponsal del Listín Diario de República Dominicana, murió asesinado al salir de la emisora donde trabajaba, en Compostela de Azúa, 120 kilómetros al oeste de Santo Domingo. Los sicarios hirieron a su colega Jorge Luis Sención, de Radio Enriquillo, que perdió una mano destrozada por impactos de escopeta. El informador Juan Sánchez, corresponsal de los diarios El Nacional y Hoy, fue amenazado de muerte por denunciar una ola de robos en la localidad, así como Domingo Corcino, Héctor J. Caamaño, Narciso Maríñez, Chistian Daniel Ramírez y Rafael Vargas.

01-09-2004: Mauro Marcano, 55 años, ultimado en la puerta de su casa de Maturín, estado Monagas, Venezuela. Marcano conducía un programa de opinión en Radio 1.080 AM, donde formulaba denuncias sobre el narcotráfico regional y sus vínculos con empresarios locales. También era dirigente político, concejal del partido Acción Democrática y presidente de la Comisión de Ejidos de la Cámara Municipal de Maturín.

31-08-2004: Francisco Arratia Saldierna, 55 años, muerto en Matamoros, estado Tamaulipas, México, escribía la columna Portavoz en El Imparcial, El Regional, Mercurio y El Cinco, periódicos regionales en que combatía el crimen organizado, la corrupción política y abordaba temas de educación.

12-07-2004: Jorge Lourenço dos Santos, periodista radiofónico, fue asesinado en su domicilio del municipio Santana do Ipanema, Halagaos, Brasil, a la vez sede de la radio comunitaria Criativa FM, donde formulaba frecuentes críticas a los líderes políticos y empresariales locales y de municipios cercanos.

22-06-2004: Francisco J. Ortiz Franco, codirector y periodista del semanario Zeta, de Tijuana, México, asesinado en presencia de sus hijos de 8 y 10 años, era reconocido por sus editoriales sobre temas políticos, de gobierno y asuntos cívicos, así como investigaciones y denuncias sobre corrupción y narcotráfico.

24-04-2004: José Carlos Araújo, 37 años, periodista radiofónico, asesinado frente a su casa de Timbaúba, estado Pernambuco, Brasil, denunció la existencia de grupos de exterminio y la participación de influyentes figuras locales en asesinatos en la región en su programa José Carlos Entrevista de «ádio Timbaúba FM.

21-04-2004: Alberto Rivera Fernández, presidente de la Federación de Periodistas de Ucayalí, Perú, y ex diputado, asesinado en Pucallpa, conducía el programa Transparencia, emitido todas las mañanas por la radioemisora Frecuencia Oriental, donde denunciaba frecuentemente a las autoridades locales y regionales implicadas en el tráfico de tierras ocupadas por habitantes pobres. El presidente regional de Ucayalí, Edwin Vásquez López, y el alcalde provincial de Coronel Portillo, Pucallpa, Luis Valdez Villacorta, fueron sindicados como autores intelectuales del crimen.

20-04-2004: Samuel Romã, 36 años, periodista radiofónico brasileño, muerto frente a su casa de Coronel Sapucaia, estado de Mato Grosso do Sul, era presentador y propietario de Radio Conquista FM de la localidad de Capitán Bado, situada frente a Coronel Sapucaia, en el lado paraguayo de la frontera. Era conocido en la región por sus frecuentes denuncias de actividades de los narcotraficantes y el crimen organizado en la zona fronteriza, a través de su programa A Voz do Povo (La voz del pueblo).

19-03-2004: Roberto Javier Vargas Mora, director editorial del diario La Mañana y editor de la revista North México Business, publicaciones de Nueva Laredo, Tamaulipas, México, fue asesinado de 26 puñaladas cuando llegaba a su domicilio de madrugada, tras escribir varios artículos que vincularon a la policía y a empleados gubernamentales con el Cartel del Golfo, una red regional de tráfico de drogas.

07-03-2004: Ricardo Ortega, reportero español del canal Antena Tres, herido por disparos, falleció en el hospital de Puerto Príncipe, Haití. Fue el último entre 9 informadores españoles caídos en frentes bélicos o conflictivos, tres en naciones de la región.

14-02-2004: Antonio de la Torre Echeandía, 43 años, de Radio Orbita, ciudad de Yungay, región de Ancash, Perú, fue asesinado a puñaladas, tras acusar al alcalde de la ciudad, Teodoro Vega Chávez, de nepotismo y abuso de autoridad.

10-02-2004: Carlos Guadamuz Portillo, de TV CDNN o Canal 23, de Nicaragua, fue asesinado de cinco balazos.

07-02-2004: Martín La Rotta Duarte, 51 años, informador de la radioemisora La Palma Estéreo de San Alberto, Colombia, fue muerto a apuñaladas.

04-01-2004: Oscar Alberto Polanco Herrera, 37 años, director y presentador de noticias de CNC TV, fue asesinado a balazos en Cartago, Colombia, cuando abandonaba el canal.

Otros crímenes

Otros crímenes recientes, ocurridos a fines de 2003, terminaron con la vida de tres periodistas: Ivania Mora Rodríguez, 33 años, asesinada el 23 de diciembre de 2003 en el tráfico de Curridabat, un suburbio de San José, Costa Rica; William Soto Cheng, asesinado el 18 de diciembre de 2003 en Buenaventura, Colombia; y Germán Antonio Rivas, gerente de la Corporación Maya Visión, Canal 7, de Honduras, asesinado de un tiro en la cabeza la noche del 26 de noviembre 2003, cuando estacionaba su vehículo en el canal.

En 2003 fueron asesinados 20 periodistas en América Latina y el Caribe. Hay más de 50 asesinatos de periodistas impunes desde 1995.

——————————–

* Periodista y escritor. Conejero del Colegio de Periodistas de Chile; Secretario Ejecutivo de la Comisión Investigadora de Atentados a Periodistas (CIAP) de la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP).

El artículo anterior puede leerse en www.pieldeleopardo.com/modules.php?name=News&file=article&sid=389.

También podría gustarte
Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.