La propiedad intelectual no debería ser un obstáculo para acceder a medicamentos, pero…
El embajador noruego Dagfinn Sørli, Presidente del Consejo de los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual (Adpic) de la Organización Mundial de Comerio (OMC), subrayó que la propiedad intelectual no debería ser un obstáculo para el acceso a los medicamentos, y que los gobiernos deberían poder permitir que los fabricantes que puedan y estén preparados para producir vacunas contra la Covid-19 comiencen a producir sin preocuparse por una patente.
Si bien reconoció con pesar que los miembros no pudieron llegar a un consenso sobre una recomendación sustantiva a la Conferencia Ministerial, dijo que seguía convencido de que una solución de avenencia pragmática estaba al alcance de la mano si había voluntad política. Los Miembros del Consejo de los Adpic compartieron la opinión común de que la OMC no puede permitirse perder el impulso que se está acumulando en los debates entre las delegaciones, con miras a encontrar una solución pragmática y tangible basada en el consenso sobre esta cuestión.
Sørli anunció, además, que celebraría consultas en los próximos días y semanas con los miembros para ayudar a facilitar la participación continua y con miras a encontrar un consenso sobre una solución sustantiva. Esto incluye la convocatoria de consultas en grupos pequeños y, cuando fuera necesario, reuniones abiertas a todos los miembros a los efectos de la transparencia y la inclusión.
Los miembros también acordaron mantener abiertas en el orden del día del Consejo de los ADPIC las dos propuestas que están sobre la mesa, a saber, la propuesta de la India y Sudáfrica en la que se solicita una exención de determinadas disposiciones del Acuerdo sobre los ADPIC para la prevención, contención y tratamiento de la Covid-19, y la propuesta de la Unión Europea para un proyecto de declaración del Consejo General sobre el Acuerdo sobre los ADPIC y la salud pública en circunstancias de pandemia.
El objetivo de mantener abiertos estos puntos del orden del día es permitir la reanudación de la convocatoria del Consejo de los ADPIC con poca antelación cuando haya indicios de que los miembros estén más cerca de encontrar una zona de aterrizaje. Se han reservado salas de reuniones para el 10 de diciembre y el 16 de diciembre para volver a convocar al Consejo, en caso de que ello sea apropiado, como resultado de los nuevos acontecimientos.
El embajador Sørli pidió a los miembros que no cedieran, ya que ahora más que nunca se necesita una respuesta práctica y tangible de la OMC a la pandemia, en un momento en que sigue desafiando el sentido de estabilidad del mundo.
Sin bien los miembros han apoyado el enfoque sugerido por el Presidente para mantener abiertos los dos puntos del orden del día, reiteraron sus diferencias fundamentales sobre cuestiones como si una exención es la forma adecuada y más efectiva de abordar la escasez y la distribución inequitativa de vacunas y otros productos relacionados con la Covid-19. También se expresaron diferencias con respecto al inicio de negociaciones basadas en textos.
¿Qué se entiende por derechos de propiedad intelectual?
Los derechos de propiedad intelectual son aquellos que se confieren a las personas sobre las creaciones de su mente. Suelen dar al creador derechos exclusivos sobre la utilización de su obra por un plazo determinado.
Habitualmente, los derechos de propiedad intelectual se dividen en dos sectores principales:
(i) Derecho de autor y derechos con él relacionados.
Los derechos de los autores de obras literarias y artísticas (por ejemplo, libros y demás obras escritas, composiciones musicales, pinturas, esculturas, programas de ordenador y películas cinematográficas) están protegidos por el derecho de autor por un plazo mínimo de 50 años después de la muerte del autor.
También están protegidos por el derecho de autor y los derechos con él relacionados (denominados a veces derechos «conexos») los derechos de los artistas intérpretes o ejecutantes (por ejemplo, actores, cantantes y músicos), los productores de fonogramas (grabaciones de sonido) y los organismos de radiodifusión. El principal objetivo social de la protección del derecho de autor y los derechos conexos es fomentar y recompensar la labor creativa.
(ii) Propiedad industrial.
Conviene dividir la propiedad industrial en dos esferas principales:
- Una de ellas se caracteriza por la protección de signos distintivos, en particular marcas de fábrica o de comercio (que distinguen los bienes o servicios de una empresa de los de otras empresas) e indicaciones geográficas (que identifican un producto como originario de un lugar cuando una determinada característica del producto es imputable fundamentalmente a su origen geográfico). La protección de esos signos distintivos tiene por finalidad estimular y garantizar una competencia leal y proteger a los consumidores, haciendo que puedan elegir con conocimiento de causa entre diversos productos o servicios. La protección puede durar indefinidamente, siempre que el signo en cuestión siga siendo distintivo.
- Otros tipos de propiedad industrial se protegen fundamentalmente para estimular la innovación, la invención y la creación de tecnología. A esta categoría pertenecen las invenciones (protegidas por patentes), los dibujos y modelos industriales y los secretos comerciales.El objetivo social es proteger los resultados de las inversiones en el desarrollo de nueva tecnología, con el fin de que haya incentivos y medios para financiar las actividades de investigación y desarrollo.Un régimen de propiedad intelectual efectivo debe también facilitar la transferencia de tecnología en forma de inversiones extranjeras directas, empresas conjuntas y concesión de licencias.
La protección suele prestarse por un plazo determinado (habitualmente 20 años en el caso de las patentes).
Si bien los objetivos sociales fundamentales de la protección de la propiedad intelectual son los indicados más arriba, cabe también señalar que los derechos exclusivos conferidos están por lo general sujetos a una serie de limitaciones y excepciones encaminadas a establecer el equilibrio requerido entre los legítimos intereses de los titulares de los derechos y de los usuarios.
Dime quien te financia y te daré una cierta idea de la justicia
El sociólogo suizo Jean Ziegler advertía en 2002 que “habitamos un mundo donde es infinitamente más grave violar una regla de Comercio Internacional que un derecho humano. La OMC es sin lugar a dudas la máquina de guerra más eficiente en manos de los depredadores”
Partiendo de estas ideas, la OMC representa una parte fundamental del poder que existe en el mundo meramente capitalista. La concepción de que la organización exprese claridad en sus actos no es más que una forma de ocultar la realidad. Desde el momento en que la OMC obtuvo poder para establecer leyes sobre el comercio, se produjo un giro trascendental en el aumento de las desigualdades en diferentes ámbitos como la salud, la alimentación , y la economía.
En realidad lo que parecía nacer como una iniciativa para lograr regularizar el comercio desde el punto vista racional y seguro -en 1947 después de la Segunda Guerra Mundia-, se ha convertido después de la creación en 1995 de la OMC, en una de las organizaciones mas antidemocráticas, controladoras y clasistas del panorama internacional.
Desde la creación de la OMC, las multinacionales han sido las grandes financiadoras de la organización, recibiendo a cambio facilidades y ventajas en los mercados con respecto a las pequeñas y medianas empresas. Estas actúan como verdaderos patrocinadores que financian sus actividades, como Coca Cola, Microsoft Corporation, o Eads-Telecom, empresa que constituye diversos sistemas de armas vendidos a países mal desarrollados o la empresa estadounidense Xerox, uno de los principales distribuidores de impresoras de tóner del mundo.
Por lo tanto la OMC tiene como patrocinadores a multitud de empresas de todo el mundo, de los que consigue financiamiento para realizar sus proyectos, simposios y demás acciones. De la misma manera, podíamos agregar a los países con mayor peso en la economía mundial que son los que más dinero han aportado a la organización instalándose una situación de privilegio con los mismos.
Mientras tanto, a nivel global, las políticas de la OMC han dictaminado unas normas de comercio que dieron como resultado situaciones de pobreza en muchos de los países miembros afectados por estas condiciones de desventajas.
Podemos concluir que la voluntad política actual sigue siendo secuestrada por el principio de acatamiento de las leyes naturales del mercado, por lo tanto, preservar el futuro de la humanidad con los ojos puestos en el presente, bajo la presión enceguecedora de la urgencia económica son los riesgos de esta realidad.
Todo quehacer político que ignore esta tragedia no tiene futuro y, por supuesto, tampoco justificación. Seguimos hipotecando el futuro de una gran parte de la humanidad en nombre del liberalismo económico y el sacrosanto mercado, en un mundo de promesas rotas, de informes que se suceden y realidades que no cambian, entre el conglomerado egoísta de patentes… y sin vacunar… mientras surgen nuevas cepas.
*Periodista uruguayo acreditado en la ONU- Ginebra. Analista asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)