Londres: el riesgo de una olimpiada inmóvil
Los trabajadores del Ministerio del Interior de Gran Bretaña dispusieron una huelga total de actividades el próximo jueves, cuando se produzca el pico de llegadas de turistas a las principales terminales aéreas y portuarias del país, previo al inicio de los Juegos Olímpicos. La urgentes negociaciones del fin de semana no habían dado frutos, se informaba en la madrugada de (hoy) lunes.| Sur y Sur
Los trabajadores de las oficinas de Inmigración, en los aeropuertos, los puestos controladores de migraciones en los puertos y toda terminal de acceso con turistas del exterior, no realizarán horas extras del 27 de julio al 20 de agosto, el período durante el cual decenas de miles de personas desbordarán el tránsito turístico por la gesta deportiva.
Al paro se sumaron los conductores de ferrocarril, que deben atender el transporte de decenas de miles de personas. Por su parte el sindicato de taxistas de Londres se plegaría tamabién al paro de los funcionarios del Ministerio del Interior.
Los trabajadores reclaman por prometidos y no entregados aumentos de salario, mejoras en las condiciones de trabajo y el rechazo por el despido de 8.500 empleados.
250.000 trabajadores suspenderán tareas.
Las autoridades de gobierno han repudiado la medida gremial aduciendo la responsabilidad que tienen los trabajadores de mantener al mejor nivel los servicios de migraciones, ante la imagen que la situación dará al mundo y las eventuales consecuencias sobre la comodidad de decenas de miles de turistas que han comenzado a llegar para los Juegos Olímpicos.
El primer ministro David Camerón, enfatizó en tal sentido que “los Juegos Olímpicos estarán sanos y salvos” más allá de cualquier medida sindical. La ministra del Interior, Theresa May, dijo que era “vergonzoso” lo que hacían promotores del paro, “en los días más cruciales para los Juegos”.
El sindicato que agrupa a los trabajadores del Ministerio del Interior, alcanza a 250.000 trabajadores públicos asociados, que se suman a la medida