Nuevos paradigmas: La aventura de vivir en época de pandemia.

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Los meses de confinamiento obligados por una peste que recorre el planeta han servido para reflexionar sobre nuestro destino, la forma de vida en la que estamos inmersos, lo que hemos construido, lo que deseamos como personas y como especie humana. Cierto que es muy triste ver la muerte de seres queridos, la destrucción de empleos, las carencias estructurales en temas sanitarios en muchos países y los efectos económicos y sociales que aún no se dimensionan.

Por otro lado, la naturaleza ha recuperado parte de su espacio, se escucha el cantar de las aves en las ciudades limpias de contaminación. Las imágenes que llegan por la televisión nos han permitido ver animales salvajes caminado en grandes urbes. También hemos apreciado y valorado el trabajo de cientos de miles de funcionarios de la salud que han sido reconocidos espontáneamente con aplausos en muchos países y constatado el abandono de servicios públicos, como consecuencia de la ideología neoliberal que se ha apoderado de muchos gobiernos.

Se nace siempre en una cultura de la cual bebemos las experiencias que marcarán nuestra existencia. Nacer en un país desarrollado no es igual que nacer en uno en vías de serlo. Tampoco es igual crecer en una familia de ingresos medios o altos que en una pobre, sin educación, ya que ello determinará muchas cosas y sobre todo la forma en que nos relacionaremos con nuestros semejantes. La pandemia ha desnudado la fragilidad social de cada país, los lugares donde viven los migrantes, los sectores marginales, los de extrema pobreza y los medios disponibles para resistir el aislamiento social, la falta de ingreso y el hambre en los países en desarrollo.

Muchos señalan que el capitalismo como lo conocemos, es decir, basado en el consumo sin límites y naturalmente, la ganancia, deberá reformarse sustancialmente, no tanto por efectos de la pandemia sino por el cambio climático.  Tal vez estemos en los bordes de un cambio de paradigma y la realidad como la vemos hoy, mañana la veremos diferente. En los años sesenta, Thomas Kuhn, físico y epistemólogo estadounidense, en su conocido libro La estructura de las revoluciones científicas, explicó que los cambios que se producen en la ciencia se generan cuando comenzamos a ver el mundo con otros ojos, ante la evidencia que se expresa en diversas formas.

Señaló que, entonces, estamos ante un nuevo modelo, un paradigma que pasa a ser ampliamente aceptado.  Lo graficó en una frase: “Lo que, para el mundo científico antes de una revolución eran patos, pasaron a ser conejos”.

 El problema que tenemos es que muchos políticos siguen viendo patos donde los científicos ven masivamente conejos: el aumento de temperatura, el derretimiento de los polos, las sequías, los incendios y tantos otros ejemplos que chocan con la ceguera de quienes no quieren ver. El problema hoy es que se agota el tiempo. Si bien Kuhn circunscribió su teoría a la ciencia, podemos extrapolarla a la vida social.

Por ejemplo, se está produciendo un cambio de paradigma a nivel global con la irrupción de la mujer en todas las actividades humanas, lo que antes hubiese sido impensable. En algunos países ya es una realidad culturalmente aceptada y su avance será inevitable. Probablemente surgirán otros que aún no podemos prever, pero que con seguridad se están incubando.  Las nuevas generaciones, armadas de una tecnología y visión global, tienen ya la responsabilidad de enmendar los gruesos errores cometidos por las generaciones precedentes.

Ellos no tendrán la posibilidad de esperar sino solo el deber de actuar con decisión para evitar catástrofes mayores.  Solo entonces existirá la posibilidad de reformular nuestra forma de vida y las bases del capitalismo como lo hemos conocido hasta ahora.

*Economista de la Universidad de Zagreb  y Máster en Ciencia Política de la Universidad Católica de Chile. Ha sido embajador de Chile en Vietnam, Portugal, Trinidad-Tobago e Italia. Consultor para FAO en Roma en temas de cooperación Sur-Sur, académicos y parlamentarios. Artículo publicado  en Treccani, de Italia. 

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