Brasil. – LA DURA LUCHA CONTRA EL TRABAJO ESCLAVO
El Grupo Especial de Fiscalización Móvil, creado en 1995 para combatir el trabajo esclavo en Brasil, suspendió sus acciones de control debido a que habría «interferencias políticas» por parte de senadores que obstaculizan las tareas de los fiscales, informó hoy el Ministerio de Trabajo.
En memorando enviado por la secretaria de Inspección del Trabajo, Ruth Vilela, al ministro Carlos Lupi, se informa que la decisión fue tomada después de la ‘reciente descalificación’ hecha por una comisión del Senado sobre la existencia de trabajo esclavo en una hacienda de la empresa Pagrisa en el estado amazónico de Pará.
Vilela señaló que la actitud de los senadores proyectó una sombra de inseguridad sobre las acciones desarrolladas por el grupo para erradicar el trabajo esclavo en el país.
Durante la fiscalización a la hacienda de Pagrisa, realizada en julio, fueron encontrados en el lugar 1.108 trabajadores en situación análoga a la esclavitud.
A partir de la denuncia, una comisión de legisladores encabezada por el senador Jarbas Vasconcelos, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), fue establecida para investigar los cargos contra la empresa.
Vasconcelos estuvo el pasado jueves 21 en la hacienda, e informó que la visita tuvo el objetivo de averiguar denuncias de que excesos fueron cometidos en la operación fiscalizadora.
La secretaria Vilela argumentó que la suspensión de las acciones del grupo móvil se justifica por la necesidad de asegurar a los fiscales un mínimo de seguridad y condiciones de trabajo «libres de la injerencia de factores extraños a la acción administrativa».
Desde 1995, cerca de 22.000 brasileños fueron rescatados de condiciones similares a la esclavitud en todo el país. En 2006, 3.266 personas fueron liberadas gracias a la acción de los fiscales de trabajo.
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