Epístolas chilenas: más tirar del mantel que poner las cartas sobre la mesa

Wilson Tapia Villalobos*

Este es el momento culminante en el póquer. Finalmente aparece la verdad. Es el instante en que se sabe si el esfuerzo ha valido la pena… Y si se gana o se pierde. Después de eso no hay más.
O sea, se puede empezar otro juego, llorar desconsoladamente lo perdido, dejar lugar a la euforia del triunfo, suicidarse. Cualquier cosa. Pero eso es en la vida real. En la política es mucho más aburrido.

La coalición gobiernista se ha transformado en una especie de oficina postal. Pese a que enfrenta más de un problema, en vez de soluciones, la Concertación recibe cartas. Si no existiera la informática, hoy los comentaristas políticos chilenos tendrían que ser grafólogos. Y así dispondrían de una herramienta eficaz de desentrañar las verdaderas intenciones que encierran las palabras escritas. Con el computador, hasta esa posibilidad se ha esfumado.

El ex presidente Ricardo Lagos está hecho un escritor consumado. Cuando el Partido por la Democracia (PPD) lo designó su candidato, respondió con una carta. Hizo una serie planteamientos, muchos de los cuales son exigencias impropias de un candidato. Pero, en fin, Lagos está en otro nivel, según dice. Hay que recordar que anteriormente, cuando le plantearon la posibilidad de ser precandidato e ir a una primaria con otros postulantes de la Concertación, fue tajante: su condición de ex presidente de la República se lo impedía. Después reiteró que no postularía a la Presidencia.

Ahora Lagos está disponible para ser candidato y, agrega, que jamás ha sostenido otra cosa. Sólo lo interpretaron mal.

La otra carga epistolar ha corrido por cuenta de José Miguel Insulza. El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) fue algo más directo. Pidió –también vía carta– al Partido Socialista (PS), su partido, que postergue la decisión acerca de la nominación de un presidenciable. Y que lo haga en consonancia con el PPD y el Partido Radical Socialdemócrata (PRSD), el autodenominado polo progresista.

En definitiva, Insulza, que al menos no ha entrado en contradicciones, busca no enturbiar más las aguas ya poco transparentes al interior de la Concertación.

Pero el tema está lejos de encontrarse zanjado, Entre otras cosas, porque las cartas sobre la mesa no dicen la verdad. Con ellas el juego no termina, recién comienza. La misiva de Lagos tiene tantos puntos difusos que se requiere la vocería de Pepe Auth (der.), presidente del PPD, para ser comprendida. Y éste, hábil operador político, ha dado muestras reiteradas de gran audacia y obsesiones mayores. Aparentemente, está convencido que su candidato no llegará lo suficientemente fuerte a la primaria concertacionista, si es que previamente no se alinean tras él pepedés, socialistas y radicales.

Por eso, lo primero que debe hacerse es eliminar la candidatura de Insulza. Aquí el obstáculo más fuerte sería el presidente del PS, senador Camilo Escalona. Él es el principal sostén con que cuenta el jefe de la OEA.

Hay que recordar que Auth ya logró un éxito en lides similares. La salida de la senadora Soledad Alvear de la presidencia de la Democracia Cristiana (DC) fue la consecuencia de los magros resultados obtenidos en la última elección municipal. La DC perdió 41 alcaldes y 113 concejales. Parte importante de esa debacle tendría su razón de ser en la idea de Auth de presentar dos listas para concejales. Una, que llevaba candidatos del PPD y el PRSD y, otra, que aglutinaba a los aspirantes del PS y la DC. Sin embargo, la baja de esta última colectividad no puede ser achacada exclusivamente a la jugada de Auth.

Parte importante obedece a desgajamientos que sufrió el partido. Pero Pepe no se detuvo allí. Previo a la salida de Alvear de la mesa DC, dio su apoyo al ex presidente Eduardo Frei Ruiz Tagle (izq.) como precandidato presidencial. Con ello, marcó una diferencia con la senadora, quien también aspiraba a ser la abanderada presidencial democratacristiana.

Aparentemente, Auth considera que Lagos tendría posibilidades insuperables en una primaria contra Frei. Pese a que éste ya lo venció en 1993. Pero las cosas han cambiado. Y si sus cálculos resultan correctos, adicionalmente la DC sufriría un golpe del que difícilmente podría recuperarse.

Las propuestas del presidente del PPD no ayudan a cohesionar a la Concertación. Lógicamente, el senador Camilo Escalona se encuentra molesto. Considera que su colega esta llevando a cabo una injerencia inaceptable en su partido. Pero la movida de Auth cuenta con apoyo interno socialista, lo que la hace aún más seria.

Sin embargo, el embrollo no termina allí. El personero PPD también planteó que las primarias no fueran abiertas en la Concertación. Propuso hacer, primero, una encuesta que señalara a los dos con más posibilidades de ser nominados y de enfrentar con éxito al candidato de la derecha, Sebastián Piñera. De inmediato esto generó el malestar de los radicales, que ya levantaron a su presidente, el senador José Antonio Gómez, como precandidato. Y esta maniobra posiblemente los dejaría fuera de competencia. Algo similar ocurriría con José Miguel Insulza.

Lo que está pasando se parece más a una tirada de mantel que a colocar las cartas sobre la mesa. Y de todo esto podría surgir un realineamiento político cuyos resultados hoy nadie se atreve a prever.

* Periodista.