Óptica: »blues de la mujer árabe». – DE PARTE DEL SEXO »DÉBIL»

1.136

Aparecida en la revista Piel de Leopardo, integrada a este portal.

Hasta que oí decir que un buen número de todos esos tipos, que supuestamente se situaban desde la izquierda a la extrema izquierda, que se consideraban marxistas de línea dura, o trotskistas, y otros, ¡oh!, tan progresistas… que esos izquierdistas habían votado por Muqtada al-Sadr, Allawi, Al-Hakim, en apoyo de la ocupación.

¿Han escuchado alguna vez que un comunista de línea dura se convierta en un sadrista, en un seguidor de un supuesto mullah cuyos hombres se han hecho tristemente célebres por violar, taladrar y mutilar a las mujeres? ¿Han oído alguna vez de un marxista que apoye al carnicero de Allawi, responsable de colaborar con los psicópatas estadounidenses que quemaron con napalm a las mujeres de Faluja?

¿Han escuchado alguna vez a un izquierdista cantando alabanzas al Ayatollah Jomeini y a sus brigadas de al Quds, de las cuales el Consejo Supremo de la Revolución Islámica de Iraq, alias el SCII del que las Brigadas Badr son la rama responsable de quemar vivas a las mujeres nawasib1 sólo porque son sunníes?

¿Piensan que las cosas se quedan ahí? Vayan más allá de Iraq y echen una mirada a los izquierdistas árabes y verán lo mismo. Les verán apoyando los movimientos políticos más reaccionarios y retrógrados, alardeando de “anti-imperialistas” , que son los movimientos más retrógrados y fascistas en todo cuanto a las mujeres se refiere, como los seguidores de Hamas, Hizbollah e Irán.

Ahora extiendan todo lo anterior hasta abarcar a la izquierda en Occidente, y añádanle las feministas árabes y las feministas occidentales y tendrán el retrato completo de lo que está sucediéndoles a las mujeres de Iraq. Por eso, viendo toda esa vomitiva hipocresía política, declaro el ocho de marzo como día de luto, un día de luto y llanto para las mujeres de Iraq.
Es decir, lo que es por mí, pueden atiborrarse de celebraciones de su ocho de marzo.

Desde luego que odio la ocupación estadounidense, que es en última instancia la responsable del actual espanto de la situación en que se encuentran las mujeres iraquíes. También mantengo que todos los cómplices situados a la derecha del espectro político son igualmente responsables.

Pero nada, absolutamente nada, supera mi total desprecio por la izquierda en general, incluidos los payasos antibelicistas y en especial los izquierdistas árabes. Sé cuál es mi opinión respecto al actual discurso masculino islamista, sé donde me sitúo en relación al sionismo, sé donde me coloco frente a los «neocon» y demócratas por igual, pero lo peor de lo peor es la izquierda. Son una enfermedad cancerígena insidiosa, lobos con piel de cordero y aspecto de palomas; son una abominación, especialmente, los izquierdistas árabes.

Su total falta de posición, de principios, su propaganda manipuladora, su apoyo a los movimientos fascistas en nombre del anti-imperialismo, les hace ante mis ojos cientos de veces peor que una ocupación inconclusa.

Las ocupaciones extranjeras no duran siempre, todas serán finalmente vencidas, pero ¿qué podemos hacer con el enemigo interior?

¿Qué se puede hacer con el comunista que se convierte en un taladrador sectario? ¿Qué hacer con el progresista que se dedica a violar? ¿Qué hacer con el pan-arabista que apoya a los Hizbollahs y a los mullahs de este mundo? ¿Qué van a hacer con todos ellos, desterrarles al olvido físico y político?

¿Qué van a hacer con todos esos prostitutos políticos que pretenden hacerse pasar por hombres?

¿Qué le dirán a Amal, que fue violada en grupo y torturada por las milicias sectarias?

¿Qué le dirán a la doctora Farida, que está barriendo las calles en Damasco? ¿Qué le dirán a Umm Zayd que tuvo que presenciar cómo el Hizbollah iraquí quemaba a su propia hija frente a sus ojos?

¿Qué le dirán a Aisha que encontró a su hermana tirada en una calle, violada y mutilada en sus genitales por las milicias Sadr? ¿Qué le dirán a Afaf que fue violada y torturada por las Brigadas Badr de su “anti-imperialista Irán”?

¿Qué le dirán a Dalal, profesora, que he tenido que pedir limosna por la calle? ¿Qué nos dirán a nosotras, mujeres, que hemos perdido a nuestros maridos, padres, tíos, hermanos, hermanas, madres, tías, niños, obligadas a exiliarnos sin ningún ingreso, sin ningún derecho al trabajo, sin atención sanitaria, teniendo que hacernos cargo en solitario de todas nuestras familias?

Vosotros, hombres árabes, bastardos, vosotros, izquierdistas de mierda, ¿qué es lo que nos vais a decir todos los ocho de marzo? ¿Qué nos vais a ofrecer, montón de depravados, decadentes, repugnantes?

No me dirijo a los estadounidenses, no les considero seres humanos. A vosotros os consideraba humanos pero estaba equivocada.

No sois más que un montón de mierda, ahítos de bravuconería, no sois más que un puñado de eunucos cobardes.
Sean mis invitados, y métanse por donde les quepa sus teorías políticas, conceptos, análisis, artículos, conferencias, congresos, partidos, poesía, prosa, eslóganes y jergas.

Ninguno de ustedes vale para gobernar nada ni a nadie; no son más que prostitutas políticas entregándose al chulo más hortera du jour…

Y eso es todo lo que os ofrezco en el día 8 de marzo, prosélitos, prostitutos ideológicos.

Al infierno con todos.

1 Nawasib, término utilizado para designar a los sunníes radicales, aunque en tiempos de confrontación sectaria puede utilizarse para designar a todos los sunníes.

———————————–

* Anwat mantiene un «blog» presuntamente desde Bagdad o más probablemente en Jordania.

Texto en inglés (Arab Woman Blues) aquí. La traducción del inglés pertenece a Sinfo Fernández.

También podría gustarte
Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.