Para no olvidar: la derecha es la que no perdona

Alberto Maldonado

La historia de la humanidad está plagada de casos y hechos, de esta naturaleza. No hay que ir ni muy lejos para demostrar este aserto: ¿Quiénes fueron los que precipitaron la segunda guerra mundial? Pues, la extrema derecha alemana, apoderada del poder. No perdonó ni a los
judíos, ni a los comunistas, ni a sus propios ciudadanos. Hasta ahora, al ciudadano(na) se le paran los pelos de puntas si se visita cualquiera de los ghetos que, en la “culta” Europa establecieron las
bestias nazis para explotar y acabar con tales personas, por el solo hecho de que pensaban diferente. Lo mismo está haciendo la extrema derecha israelí, con los palestinos. | ALBERTO MALDONADO S.*

¿Quiénes fueron los que, durante siglos, establecieron en “la culta Europa” y en las colonias americanas, la bestialidad de la inquisición? De lo que se sabe y se ha logrado especificar, fue la derecha más retardataria de la Iglesia Católica y los pelucones de todos los tiempos, que de esta manera pretendieron acabar con sus enemigos. De paso, se quedaron con sus bienes.

En este Ecuador, ¿qué gobiernos han sido declarados los más retardatarios de la historia? Pues, García Moreno (en la segunda mitad del siglo 19) y León Febres Cordero (1984—1988) Superaron en crueldad y persecuciones a las dictaduras militares ecuatorianas.

Con motivo de la protesta presumiblemente indígena, un índigena que se identificó como de la “seguridad” de los marchantes, obligó a un joven de la televisión pública a que abandone el lugar (creo que era en Ambato) ya que tiene orden de no permitir que “nadie de esa televisión” lo haga. Poco después, la asambleísta por Pachakutec, doña Lourdes Tibán, aclaró (palabras más, palabras menos) que no permitirían que “agentes infiltrados” graben hasta que el Prefecto de Morona (el indígena Salvador Quishpe, otrora dirigente de la CONAIE) cuándo y en qué hotel ha orinado. (Creo que dijo meado)

Lo que no dijo es que esta señora representa en la Asamblea Nacional el sector más retardatario de cuantos existen en el país (Ecuador) Y que su acto es contrario a los más elementales cánones de la “libertad de expresión” que la señora dice defender. Y lo que quiero es demostrar que es la derecha cavernaria la que en realidad, nunca está dispuesta a perdonar.

En este aprendizaje (porque es eso) la derecha mundial ha aprendido a ofrecer a sus pueblos que “serán felices” si votan por ellos; o dan el golpe de Estado que anhelan y matan al que es y no es. Casos al canto:

La invasión de Libia y la ejecución de Gadaffi, en plena calle, no es sino un pálido reflejo de lo que es la derecha. No hay que perder de vista que para el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, esta “era una labor humanitaria” Por primera vez, el mundo asistió a un bombardeo incesante de la vieja OTAN (cerca de 30.000 incursiones en poco más de 6 meses) Y hoy, el auto llamado Consejo Transitorio al que EE.UU. y la vieja Europa le dio la plata (¿cuánto?) no sabe qué hacer con ese pueblo, que empieza a descubrir que ha sido engañado y bombardeado, por no creer en ellos. Supuestamente, por salvar a mil mercenarios, mataron a 50.000 y destruyeron sus casas—viviendas.

Lo que está pasando en la tradicional Siria, la puerta para invadir Irán. Pretendieron hacer lo mismo que en Libia; pero esta vez, tanto Rusia como China, en el Consejo de Seguridad de las NN.UU. dijeron que no. Hasta la saciedad, se ha comprobado que el número de víctimas (cerca de 9.000) como de la carnicería en Homs (norte de Siria) no es sino parte de la invasión mediática de ese país. En todo caso, ha quedado demostrado que en ese país incursionaron mercenarios pagados por países europeos y, lo que es peor, por la misma Liga Árabe, que no ha abierto sus arcas para democratizar Arabia Saudita, Bahrem, y ellos mismos, etc.

¿Quiénes fueron los bárbaros que auspiciaron y fomentaron las dictaduras militares de Argentina y Chile? Pues la extrema derecha, a pretexto de que sus países libraban una batalla contra los “comunistas” de las dos regiones. En menos de 8 años, las bestias argentinas (que hoy están siendo juzgadas) mataron y/o desaparecieron a 30.000 argentinos y argentinas; y hasta se distribuyeron los niños que nacieron en el cautiverio de sus jóvenes madres, a las que también mataron o desaparecieron. En 17 años, los cosacos chilenos al mando de Pinochet, mataron o desaparecieron a más de 3.000 chilenos y medio millón fueron obligados al destierro. ¿Y no fueron los sicarios de la desaparecida DINA, los que dinamitaron los carros del General Prats, en Buenos Aires; y del ex Canciller de Chile, en EE.UU.?

Por todo lo dicho, y mucho más, no es extraño que los más derechosos del famoso 30—S (30 de septiembre de 1910) hayan planteado la amnistía el mismo día de los trágicos sucesos y del fallido golpe de estado. Según el asambleísta Kléber (o Cléber) Jiménez, los policías alzados debían cumplir la orden del Presidente (Rafael) Correa; que debían matarle ese rato. Y una asambleísta de la misma camada, tan pronto como terminó lo de Libia, exclamó que los Estados Unidos debían ocupar el Ecuador y hacer lo mismo con Correa. Y no hay que creer en las lágrimas de cocodrilo de asambleístas, como el señor Herrería, el mismo que algún día militó en la ID del Guayas.

Es que para la derecha extrema (en Ecuador o en cualquier país del mundo) la rabia se corta matando al perro rabioso. Y, a lo largo de la historia de la humanidad, los derechosos de siempre, han querido matar la rabia, matando a los “perros infectados”, inútilmente, desde luego. Casualmente, la ex URSS tenía en su constitución, una disposición que declaraba su ateísmo (como Estado, laico) pero los rusos siguieron creyendo en los popes y asistiendo a sus servicios religiosos. Durante 70 años, siguieron creyendo en la Iglesia Ortodoxa, hasta que vino la contrarrevolución promovida (entre otros) por el borracho de Yeltsin. Para ellos, el rabioso Stalin contribuyó con lo suyo, matando o desapareciéndoles, a quien era sospechoso de anticomunismo. Y solo después de lo de Libia, la antigua Rusia de los zares, se dio cuenta que había sido utilizada por la Sra. Clinton, para lo de Libia. Lo mismo podemos decir de La China, que sigue bajo el mando del Partido Comunista Chino.

Vuelvo a este Ecuador

Una cosa, muy diferente, es lo que la señora Lourdes Tibán, pensaba hace años, respecto de la libertad de expresión. Por lo menos, en otros tiempos, la libertad de expresión era, para ella, que no le permitieran (o pretendieran, por lo menos) que dijera lo que quería. Por eso no le pasó nada cuando dijo que el Lucio era un perfecto animal. Hoy (siglo 21 – 2012) la libertad de expresión es que no se diga nada en contra, así sea contra un ex dirigente de la CONAIE (como es el señor Salvador Quishpe) No es posible (para la mencionada señora y sus adláteres) que públicamente se diga que el Prefecto del Azuay, le ha dado, como regalo, una botella “del bueno”; o que le sorprendan meando (en algún buen hotel de Ambato) Es decir, según la señora Tibán (lo mismo deben pensar los asambleístas de esa misma camada, con el señor Montúfar a la cabeza) que libertad de expresión es que no se diga o no se admita nada, en contra. Por ello, “es saludable” la expulsión del joven camarógrafo—periodista que filmaba escenas de la marcha indígena—carruable.

¿Acaso —pregunto— doña Guadalupe, la dueña y directora del diario sipiano (de la SIP-CIA) El Comercio de Quito, no “puso el mal ejemplo” cuando reunió a sus periodistas y les anticipó más o menos lo siguiente: aquí estamos contra el señor Correa y su revolución ciudadana. El que quiera seguir apoyándolos no tiene sino que presentar su renuncia e irse de este periódico”? ¿Es eso libertad de expresión? Por eso doña Lourdes “tiene derecho” a botar de una cobertura informativa al camarógrafo que “sorprendió” al señor Salvador meándose.

Y por ello, no tengo la menor duda que todo va de acuerdo “al cristal con que se mire” Y no tengo la menor duda que les da erisipela a los legisladores de una supuesta o real oposición, el votar por una ley de comunicación, como la que se plantea. Por fortuna, los legisladores de Montecristi previeron que la derecha ultrista, algún momento, desacatarán el mandado constitucional, ratificado por el pueblo ecuatoriano en las urnas; y previó que la Cámara Constitucional, pueda dictar una ley perentoria si la Asamblea Legislativa no cumple o evade el cumplimiento de sus deberes, les guste o no.

Claro está que estamos viendo que para algunos legisladores es más importante lo que les diga la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP-CIA) Asegura la SIP, que en materia de comunicación, “la mejor ley es la que no existe”. Y como ellos son muy obedientes de los dictados extranjeros, pues si la SIP lo dice, “así ha de ser” De lo contrario, amenazan, desde ya, que irán a quejarse amargamente ante la Comisión de Derechos Humanos de la OEA y ante la señora o señorita Botero, que para eso están. Y además, no dejarán de quejarse ante Fundamedios y ante el Presidente de la UNP (el Lcdo. Ordóñez) que para eso también están.

Lástima grande (para ellos) que “el malo de Correa” ya ha solicitado que la CIDH sea en verdad de la OEA, lo mismo que la señora o la señorita Botero. Y no que sean pagados por el sector privado (vía NED, antigua USAID) Es más grave. “El malo del Correa” quiere una OEA sin EE.UU. y Canadá, que tienen de latinoamericanos lo que la mayoría de nosotros tenemos de astronautas.

Y pregunta final (soy periodista profesional y, por lo tanto, preguntón) ¿Nos perdonará —si ganan— la extrema derecha nuestro pensamiento, por más equivocado que esté? Lo dudo; pero también de ilusiones se vive.

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* Periodista.