Se agudiza la lucha ideológica en Venezuela

Néstor Francia.*

La defenestración de José Albornoz de la segunda vicepresidencia de la Asamblea Nacional cierra definitivamente el capítulo de este colosal salto de talanquera sin regreso. Quien hizo la propuesta de desincorporación fue el diputado Mario Isea, que presentó argumentos irrefutables. Isea señaló que “el PPT agrede al PSUV, al poner en tela de juicio la existencia de democracia en el país, según recientes declaraciones de Albornoz a medios de comunicación social (…) el PPT usa la segunda vicepresidencia como una trinchera de la oposición”.

Vendrán otros saltos de talanquera en la medida en que el proyecto revolucionario se vaya definiendo con mayor nitidez.

Ahí está el caso de José Vielma Mora, cuyas declaraciones en Unión Radio lo ubican en el campo de la oposición, aunque no lo reconozca. El ex funcionario del Seniat realizó un llamado para que se paguen de manera inmediata las expropiaciones que realiza el Ejecutivo.

“Creo que se puede expropiar de acuerdo a un interés de nación de país, a un proyecto, pero por favor paguen la expropiación de manera inmediata…Eso es lo que yo evalúo, no puedo hablar radicalmente que estoy en contra de la expropiación, pero creo que debe haber un respeto a todo el mundo, para que al final no hagamos lo que no nos gusta que nos hagan… Hay que fortalecer  y dinamizar la empresa privada conjuntamente con el Estado, y darle a la gente la opción de qué quiere en la vida”.

Vielma Mora asume así una de las banderas principales de la oposición, la “defensa de la propiedad privada”. Pero hay más: Vielma se calificó como “un amante del diálogo”, y afirmó que “hay que salir, entonces,  de esta situación tan peligrosa como lo es la polarización…estamos retardados, y tenemos que trabajar en la unidad” y dijo espera que se puedan sentar en una mesa todas las tendencias para consolidar el diálogo y “evitar las rencillas personales y los odios que se están desatando”.

Con relación al PPT, dijo que “las palabras traidores y oligarcas, son contraproducentes en un estado democrático”. De paso expresó la siguiente posición desatinada y definitoria de su inconsistencia ideológica: “Estoy convencido que todos los partidos tienen la idea de fortalecer o dinamizar el país”. Pero lo que definitivamente lo ubica en el campo de la derecha es lo siguiente: “Creo que el marxismo es lo peor que le puede pasar al país, esa es una visión de Vielma Mora y no estoy saltando la talanquera”. Si no la está saltando, al menos se está colando por debajo.

Mientras Vielma Mora se regodea en su idílica visión de la realidad, Oswaldo Alvarez Paz pone las cosas en su lugar, al criticar posiciones antichavistas “demasiado blandas” y exigir que los opositores que vayan a la Asamblea Nacional sean “guerreros” que no se limiten a “interpelar a los ministros”. “Los diputados de oposición deben buscar el cambio de régimen político que necesita el país”, señaló Álvarez Paz durante un encuentro con corresponsales extranjeros, al referirse a las elecciones parlamentarias del próximo 26 de septiembre. También expresó que “En Venezuela hay una legalidad de plastilina, en la que el derecho se amolda a los hechos (…); sin estado de derecho no hay democracia”

¿Quiere la oposición “fortalecer o dinamizar el país”, como afirma Vielma Mora?

Por allá el naufragio…

Entretanto, en Europa la cosa se le pone cada vez más caliente al capitalismo, con un estado de crisis y debilidad nunca antes visto. Acorralada por la quiebra de los Estados y por los ajustes salvajes que empiezan a multiplicarse, parece estar ante el desenlace de un colapso económico y político generalizado.

Algunos analistas están previendo la incidencia de huelgas y amplias protestas sociales, mientras las bolsas del mundo entran en pánico.

La hecatombe del sistema capitalista es inevitable, pues la crisis siempre anida en su desfigurado cuerpo y en su envenenada alma.

* Analista de asuntos políticos.