Venezuela: unos por el barranco, otros en el dolor de la agonía
Néstor Francia.*
El vicepresidente Elías Jaua reveló el lunes que el Gobierno Nacional investigará 91 denuncias sobre presuntas estafas de inmobiliarias. Informó que convocaron a los afectados para escuchar sus opiniones y testimonios, pues considera que 
se les ha violado sus derechos a la propiedad, a la paz familiar y a la vivienda. Esta situación es un excelente ejemplo de lo que subyace en el tema de la propiedad privada.
Jamás se verá a Fedecámaras o a Globovisión defendiendo el derecho a la propiedad de estas familias. Para ellos el único derecho a la propiedad digno de ser defendido es el de los burgueses y las clases medias altas. Por sus obras los conoceréis.
El PPT, en su irremediable rodada hacia el barranco de la derecha, asume todos los usos y costumbres de ese sector enemigo acérrimo de la revolución. Ahora una de sus voceras carga contra el periodista Eleazar Díaz Rangel, director de Ultimas Noticias, porque este opinó que ese partido obtendrá como mucho tres diputados. La neo-escuálida Lenny Manuitt lanzó un estúpido reto, que suponemos Díaz Rangel ni siquiera responderá:
“Si nosotros obtenemos más curules de los que usted pronostica en su diario, renuncie. Si no es así, nuestro secretario general, José Albornóz, renuncia a su cargo”. Manuitt acusó al periodista de “estar actuando como partidario del Partido Socialista Unido de Venezuela en el enfoque informativo”.
Ahora bien, sin importar si obtiene dos, tres o cuatro curules, el destino del PPT está muy claro: pasará a formar parte de los despojos que constituyen partidos con existencia solo mediática, como Copei, URD, el MAS o Podemos. Así pagará el precio de su prepotente ceguera política.
Triste cumpleaños
Acción Democrática conmemoró su 69º aniversario en la árida y nostálgica soledad de la quinta Esmeralda. El otrora partido del pueblo, que llegó a convocar multitudes, languidece ahora en el pantano de la conspiración y el resentimiento. No otra cosa reveló ayer el desgañitado discurso de su Secretario General, Henry Ramos Allup.
AD fue un gran partido, sobre todo mientras mantuvo en alto algunas banderas democráticas y populares, si bien con muchas limitaciones ideológicas, por allá por los años 40 del siglo XX. Pero su ocaso comenzó a perfilarse más nítidamente a fines de los 50, cuando Rómulo Betancourt firmó en Nueva York el pacto de Judas y se convirtió en el representante de las nuevas estrategias del imperio para América Latina por aquellos años. Esta alta traición a la Patria del líder adeco prefiguró la realidad de hoy: AD terminó siendo un mini-partido, al servicio de imperialismo y la oligarquía. Paz a sus restos, si no se ponen cómicos.
El caso de los peñeros extraviados en Nueva Esparta[1] nos sirve para demostrar una vez más hasta donde llega la insania, la enfermedad, que ha inoculado en sus fanáticos la canalla mediática.
Mientras el ministro para la Defensa en persona, general Carlos Mata Figueroa, asumía la dirección de la labor de rescate de los pasajeros de los dos peñeros ya localizados, la página-web de Globovisión realizaba una encuesta donde consultaba a sus lectores sobre las acciones del gobierno en este impactante caso. El supuesto resultado es paradigmático: el 65% de las respuestas apunta a que nuestro gobierno fue lento e ineficiente en el rescate.
Uno se haría varias preguntas: ¿qué información tienen esos lectores de lo que se hizo en este caso? ¿Qué conocimientos tienen en esta área tan especializada que los autorice a opinar tan drásticamente?
La única respuesta es la de siempre: la canalla mediática ha conformado una minoritaria caterva de audiencias cautivas e idiotizadas que conforman un espeluznante caso de disfunción mental.
[1] El peñero es una embarcación menor usada para el transporte costero; los tres perdidos fueron rescatados.
* Analista de asuntos políticos.