Alberto Maldonado* / Ecuador: entre tantos yo también quiero ser candidato

5.420

Dice el cuento (porque es un chiste, que oí hace rato) que un “gringo” se quejaba ante su barbero de ocasión ¿por qué los ecuatorianos tumbamos gobiernos, a cada rato?; a lo que el barbero de ocasión contestó, dejando su oficio por un momento:
“Es que, míster, usted comprenderá, que habemos muchos ecuatorianos que no hemos sido presidentes del Ecuador, todavía”. Por lo que de chiste he resuelto también candidatizarme a Presidente de la República, en las elecciones previstas para febrero/2013.

 

Otro caso; y este no es un chiste. Yo le preguntaba a un buen amigo y pariente mío, que quién iba a “lanzar” (presentar, se dice ahora) su libro de vivencias personales; y me dijo que fulano de tal (no doy el nombre porque está vivo) quien fue candidato a Presidente del Ecuador.
Pregunté que quien era ese señor, a lo que me contestó un poco indignado: “Pues usted, en vano es periodista y no sabe que fulano de tal fue candidato a Presidente del Ecuador”.

 

A lo que volví a preguntar, ya que soy preguntón de nación, ¿y qué movimiento y/o partido político le lanzó su candidatura?; a lo que me contestó: en otros tiempos uno podía lanzarse a candidato de algo, siempre y cuando tenga la plata suficiente. Este señor (volvió a darme el nombre) fue candidato a Presidente; y punto. No ganó pero es un honor que quien haya sido candidato a Presidente, presente mi libro. A lo que no volvía preguntar nada.

 

Al margen del chiste, parece que poco caso le están haciendo al doctor Oswaldo Hurtado (ex Presidente del Ecuador) y a tantos y tantos gurúes
de nuestra política doméstica, que si no hay un solo candidato contra
Rafael Correa, lo más probable es que el “dictador” se quede en el
gobierno ecuatoriano unos cuatro años más; y quién sabe, si encuentra
un heredero apropiado, se quede 8 años más a los 4 que puede por sus
propios medios.

 

Ellos prevén que si no hay un solo candidato (tipo Venezuela) lo más probable es que Correa gane las próximas elecciones y siga rompiendo records políticos; en este país que muy pocos han durado 4 años (el tiempo de un período presidencial) y nadie ha superado los 5 años, en Carondelet, Correa va para los 6 años, sin las elecciones de febrero/2013.

 

Traigo a colación estos antecedentes porque supongo que poco caso le hicieron a mister Oswaldo y sus muchachos, respecto de que lo mejor era ir con un solo candidato a Presidente, para tratar de emparejarle; o, con mucho optimismo, ganarle al “dictador” Correa. Y ya van para 5 los precandidatos a la Presidencia que rompen la indicación. A este paso, y como las elecciones son en febrero/2013, el número de candidatos sumará algunos más. Con lo cual Rafael Correa tiene para largo, en este país.

 

El primero en lanzarse, fuera de contexto, fue el banquero Guillermo Lasso, de Guayaquil. Su candidatura estaba lanzada desde hace años, cuando comenzó a aparecer en la televisión comercial, con el banco del barrio, como la solución del momento, a fin de que ecuatorianos y ecuatorianas salgamos de esta situación. También escribió a los hijos.

 

Solo que Lasso se identifica con la bancarrota de los años 2000, que le costó el puesto al presidente Jamil Mahuad. Pero él se ha lanzado de candidato y no ha esperado a que lo lancen, como otros casos. Espera cosechar lo que queda en el Ecuador de la derecha pelucona, que hasta el día de su muerte (que de Dios goce) el ingeniero Febres Cordero era dueño de tal derecha. Que es muy poco, lo que queda. Ni los diarios pelucones dicen lo contrario.

 

Otro que no se cansa de lanzarse al ruedo es el multimillonario, señor Álvaro Noboa. Su aspiración es a que todos los ecuatorianos y ecuatorianas seamos “ricos” (millonarios en dólares USA ya que “ricos” si somos) Quiere lanzar, además, otra iniciativa: que la quinta es “más mejor”

 

Se sabía que la tercera es la vencida; pero, antes que pagarle al SRI (Servicio de Rentas Interno) comandado por ese cuencano que quiere cobrarle, solo por el año 2005, unos 90 millones de dólares que le debe al fisco. Pero don Álvaro prefiere seguir pagando a la televisión comercial y a la prensa escrita, antes que pagar uno solo centavo al Estado. Aquello equivale a “persecución política” y en eso anda.

 

El único que medio-medio aparece como candidato de coalición, es Alberto Acosta, otrora Presidente de la Asamblea Constituyente de Montecristi (Manabí) y “alto” (mide cerca de 2 metros) dirigente de Alianza País (AP).

 

Según la prensa sipiana (de la SIP-CIA) él representa a la “izquierda” ecuatoriana ya que fue elegido por grupos y movimientos políticos de esa tendencia, llenos de precandidatos. Don Alberto, por bajarse de la camioneta de AP, antes de tiempo, me parece que perdió. Porque jóvenes (o viejos) del MPD, de Pachakutec, de CREO, de la Concertación, etc. no le van a trabajar
gratis. Ya sabe por qué. Para eso es (o era) la “oveja negra” de los banqueros.

 

Por allí se habla del general-héroe del Cenepa (cuando teníamos el conflicto fronterizo con el Perú) Paco Moncayo, quien, entre sus méritos exhibe que nunca se ha definido partidario de tal y cual partido o movimiento popular, a pesar de haber sido de la Izquierda Democrática (ID) su Alcalde de Quito, por no sé cuántos años. Como tal (como Alcalde de Quito) le recibió con todos los honores el señor Augusto Pinochet, ese si un dictador de de verdad de la sufrida Chile.
Pero, esta vez, ha resuelto unirse a la Ruptura de los 25, que está comandada por la abogada María Paula Romo (por algo los dos son asambleístas) Pero nada de afiliarse, porque mañana o pasado se ofrece.

 

Y, para que todo esté en contra del Dr. Oswaldo Hurtado, por allí aparece la figura del asambleísta César Montúfar, que ha vuelto a romper ese redil llamado de la oposición y que se ha proclamado también candidato de la izquierda ecuatoriana. No importa si alcanzó su curul “con las justas” (en votos) aun cuando ha actuado, en estos años, como la oposición parlamentaria visible. Veremos.

 

Como también he resuelto candidatizarme a Presidente del Ecuador, lo primero que tengo que hacer, para precautelar mi izquierdismo de toda la vida, es buscarme un buen padrino en el diario El Comercio de Quito (por lo menos, de El Universo de Guayaquil) a fin de que me declaren candidato de la izquierda ecuatoriana. Porque de lo que leo y veo, es este diario el que está patrocinando a la izquierda nacional. Ellos sabrán por qué. Y como no tengo dinero (soy un pobre jubilado de la Universidad Central) tengo que buscarme ese padrino que no solo mande en El Comercio de Quito, sino que tenga plata. Estoy pensando en el señor Alvarito, que está lleno de plata; pero nada más.

 

Soy pues el candidato (o candidote) sin votos, sin partido político y sin plata. De seguro que en esta feria me irá de mal a peor. Pero “más mejor” que muchos que quieren llegar a Carondelet, para defender lo suyo. Yo que tampoco tengo nada que defender, estoy de acuerdo con el presidente Correa, aun cuando los amigos de ayer dicen que gano dinero con esa afiliación. Ellos que andan metidos en todo, saben dónde y quién están cobrando a mi nombre o a nombre de otros.

 

En todo caso, estoy preparando mi programa de gobierno. No quiero confundirme con el resto que han tomado el anti correismo como doctrina de gobierno; y nada más. Yo sé que fuera de AP no sirve para nada los programas de gobierno, como el que estoy preparando (por si acaso) Además, el anti Correismo ya tiene dueño propio: los medios de comunicación o sea la gran prensa ecuatoriana (de otrora) No será pura coicidencia que en todas partes, el anti cualquier gobierno progresista que aparezca se alínea la gran prensa de hace poco. Pruebas, al canto, lo que está pasando en Venezuela, en Bolivia, en Nicaragua y hasta en Argentina. En todo estos países “viva al anti gobierno” como si fuera calcado. No dan para más.

 

A propósito, leo en eso que se llama GDA, que saben tanto de narcotráfico (desde México-Colombia) que no sé por qué sigue el gran negocio. Excepto (como debe ser) los Estados Unidos. Solo que todo el mundo sabe que la mayor parte del dinero viene del gran imperio (miles de millones de dólares, al año) Y no pasa absolutamente nada. Solo están tan bien informados; y donde no pasa absolutamente nada, de unos años a esta parte.

 

Los muertos por el narcotráfico vienen de México (cerca de 50.000 en los últimos años) de Colombia. A los otros países latinoamericanos, los autores del “estudio” que son colombianos y mexicanos, nos les pasa absolutamente nada.

 

¿Por qué será?
——
* Periodista.

También podría gustarte
Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.


El periodo de verificación de reCAPTCHA ha caducado. Por favor, recarga la página.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.