México pidió la renuncia de Almagro por manipular y propiciar golpe de Estado en Bolivia
Gerardo Villagrán del Corral - CLAE
México denunció este miércoles ante la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) al secretario de la misma, el uruguayo Luis Almagro, por ser el promotor de un informe manipulado para propiciar el Golpe de Estado en Bolivia en octubre de 2019, causando derramamiento de sangre del pueblo boliviano.
Nunca hubo fraude en Bolivia en el 2019, y quedó demostrado con el resultado de las elecciones del domingo pasado, expresó el representante de México ante la asamblea de la OEA, que puso en tela de juicio la labor del secretario general de la OEA, y le sugirió que se someta a una autocrítica y reflexión “para determinar si aún cuenta con la autoridad moral necesaria” para encabezar el organismo.
Maximiliano Reyes, subsecretario para América Latina y el Caribe del gobierno de México, dijo en su discurso en la Asamblea General de la OEA que durante las elecciones presidenciales de Bolivia de 2019 la Secretaría General de la organización “utilizó de manera facciosa a la misión de observación electoral para denunciar prematuramente un supuesto fraude que nunca existió” ante el triunfo de Evo Morales.
“Este uso faccioso generó inestabilidad, violencia y desorden constitucional en Bolivia y creó un entorno internacional de confrontación. La Secretaría General no está para calificar elecciones o gobiernos”, dijo Reyes.
Expresó que no es ajeno para México que en el hemisferio existen dificultades en el diálogo político que han detenido avances importantes en numerosos temas.
“Ante estos sucesos la cuarta transformación de la vida pública de México encabezada por el Presidente López Obrador siempre defenderá los principios de no intervención, de auto determinación de los pueblos, de solución pacífica de las controversias y de respeto y protección y promoción de los derechos humanos”, dijo.
Argentina
Por su parte, el canciller argentino Felipe Solá también cuestionó a Almagro, al exigir que “debe actuar en concordancia” con la acción de los órganos políticos del organismo internacional que preside para promover las relaciones económicas, políticas, culturales y jurídicas. Para la Argentina, Almagro “no cumple con ese mandato ya que se opta por posiciones personales que terminan alimentando el problema al que se debe solucionar”.
Los cuestionamientos están relacionados con la decisión de Almagro de avanzar una vez más en una resolución que denuncia “la carencia de condiciones democráticas mínimas, para garantizar elecciones libres, justas y transparentes en Venezuela” que cuenta con el aval al autoproclamado presidente Juan Guaidó, a quien Argentina no reconoce como tal.
“La OEA debe ser garante de la paz y la contención. Nunca juez o gendarme político”, dijo Solá , quien remarcó que desde hace tiempo “somos testigos de la división que se busca imponer en América Latina alrededor de los que cada país piensa sobre Venezuela. Y se dejan postergados temas de integración o desarrollo”.
“Argentina va a denunciar la violación de todos los Derechos Humanos donde sea, sin distinciones», y cuestionó «las sanciones y los bloqueos» a Cuba y Venezuela porque «perjudican a los más pobres».
«Integración, producción, crecimiento económico, cooperación para la salud, cooperación entre nuestros países son temas postergados frente a uno solo. Mientras tanto sigue nuestro atraso frente a otros continentes, pero nos peleamos por eso. La Argentina se pregunta cómo se llegó a esa situación y a quién le conviene», sentenció Solá.
Grupo de Puebla: que renuncie
El Grupo de Puebla, conformado por exmandatarios, legisladores, políticos y personalidades progresistas de la región, expresó que tras las elecciones en Bolivia, queda claro que el liderazgo regional del Secretario General de la OEA, Luis Almagro, resulta seriamente cuestionado.
“El papel que jugó en la desestabilización democrática de Bolivia y las relaciones excluyentes que mantiene con otros países del área lo inhabilitan para seguir ejerciendo el papel de mediación y facilitación democráticas que debería desempeñar al frente de tan importante cargo. Su salida ayudará a recuperar la paz en la región y reactivar la integración regional que tanta falta ha hecho en estas épocas de pandemia”, señaló.
Almagro y su fraude en Bolivia
El ex presidente de Bolivia, Evo Morales, salió de su país en 2019 luego de ser obligado a renunciar a la presidencia en medio de un golpe que se produjo tras las elecciones generales en las que buscaba su cuarto mandato consecutivo y que fueron anuladas por las denuncias de fraude aupadas por la secretaría general de la OEA.
Reyes calificó en su discurso los comicios en Bolivia como democráticos, «un ejemplo para todo el mundo, muy a pesar de usted secretario general y su misión de observación electoral. El pueblo boliviano les ha dado una lección histórica que ojalá aprendan». El funcionario mexicano también dijo que su país “denuncia el afán del secretario general de intervenir en los asuntos internos de nuestros Estados y de lastimar nuestras democracias”.
“Mientras usted siga al frente de la organización la sombra de los sucedido en Bolivia estará siempre presente”, sostuvo Reyes. “Ustedes han deslegitimizado a las misiones de observación electoral”. “Las elecciones del domingo pasado en ese país mostraron la misma tendencia electoral que en 2019”, destacó el funcionario mexicano.
El subsecretario también se refirió a la actuación de Almagro en su intento por interferir en el proceso de designación de secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). “Mi país denuncia el afán del secretario general de intervenir en los asuntos internos de nuestros Estados y de lastimar nuestras democracias. Lo que ocurrió en Bolivia no debe repetirse jamás”, enfatizó.
Para México, agregó, la secretaría general de la OEA debe actuar siempre dentro de su propio marco institucional y alejarse de hacer cualquier pronunciamiento en nombre de la membresía. “Somos los Estados miembros y no la secretaría general los que decidimos el rumbo de la organización”.
Señaló que bajo la gestión de Almagro en el cargo, se ha configurado un patrón de actuación preocupante desde la secretaría general del organismo, consistente en utilizar sus facultades administrativas para la toma de decisiones políticas que impactan el rumbo de la OEA, sin someterlas previamente a la consideración de la membresía.
“Tales decisiones adolecen de un sustento jurídico y de la información necesaria que permita conocer su motivación y objetivos. Tal es el caso de la designación de un asesor especial sobre la responsabilidad de proteger. Este tema debió haber sido consultado y discutido de manera exhaustiva en el seno de la organización. México ve con suma preocupación este nombramiento”, añadió el mexicano.
La misma actitud, agregó Reyes Zúñiga, se mostró en el intento de Almagro por interferir para evitar la renovación del mandato de Paulo Abrao como secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
* Antropólogo y economista mexicano, asociado al Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)